18 Jul CASI 80 AÑOS ATRÁS: TALLABA GRANDE… LA FAMOSA OCURRENCIA
Investigación, producción y textos de RODOLFO ROBERTO ROSENDE
Nuevamente SAN ISIDRO le brinda homenaje justo y merecido a un ejemplar que dejó una huella indeleble en el turf nacional: la yegua OCURRENCIA. En este caso, dedicándole un clásico de Grupo II para toda yegua de 4 años y más edad, a peso por edad, sobre la distancia de 1400 metros con codo.
El nombre de OCURRENCIA nos trae el recuerdo de una época sumamente importante en la consolidación del turf y elevage argentinos y, al mismo tiempo, determina que evoque a D. SATURNINO J. UNZUE, gracias a cuyo espíritu de empresa y visión fue posible que nuestras pistas contasen con un ejemplar de la talla de aquella magnífica yegua.
A don Saturno le encantaban los tordillos, se sabe, pero OCURRENCIA era ZAINA COLORADA lo mismo que sus padres VAL D’OR y MELTONA; exactamente igual que su abuelo paterno PLYING FOX y su bisabuelo ORME, padre del anterior, y que sus abuelos maternos MELTON y ORIA…Sangres excelsas todas éstas que denotan directo parentesco con ORMONDE, GALOPIN, BEND OR y otras ramas insignes del elevage europeo.
La primera campaña de OCURRENCIA, cumplida en la temporada de 1915, fue realmente sensacional. Sobre 13 actuaciones logró 10 triunfos (8 clásicos), un segundo puesto y dos terceros. ¡Y qué carreras son las que se adjudicó! Arrancó con dos condicionales y siguió con los clásicos INICIACION, IGNACIO CORREAS, SAAVEDRA, OLAVARRIA para luego ganar también la POLLA DE POTRANCAS, el SELECCIÓN, el JOCKEY CLUB y el CARLOS PELLEGRINI…Y de no haber sido porque Packoy la venció por la cabeza en el NACIONAL, hubiera concretado un cuarto de siglo antes la hazaña que La Mission logró en 1940: ser CUADRUPLE CORONA (la única en la Argentina). Buscando puntos de contacto vemos que Packoy era hijo de Perrier, justamente el abuelo materno de Congre ve, progenitor de La Mission fue Packoy el que la despojara del invicto también al dejarla tercera en el clásico RIVADAVIA. La otra derrota de OCURRENCIA (no podía ser de otra manera dada la fama del cotejo) fue en el COMPARACION, que abonó su condición de “tumba de cracks” ya que en é1 OCURRENCIA llegó tercera de Picacero y Wotan a 2 y y 1 cuerpos, respectivamente, en un lote de seis. OCURRENCIA estaba cotizada, según reza en el Calendario Oficial del Jockey Club de Buenos Aires de 1915, en una proporción de 2/6. Algo así como que pagaba sólo 2, 70 por bola to. Venía de ganar el PELLGRINI, claro, pero los “contreras” (de ayer, de hoy y de siempre) se afirmaron en que era su presentación número TRECE. Y la cábala se les dio.
OCURRENCIA corría por los colores de su criador, la caballeriza INDECIS, era entrenada por JUAN TORTEROLO y la corrió siempre el hermano DOMINGO TORTEROLO. Y este jockey, el famoso MINGO, se se lleva un comentario obligado. Muchas veces se ha hablado del sino que persiguió a ese as de la fusta respecto al DERBY argentino.
Por hache o por be, MINGO TORTEROLO nunca pudo ganar el NACIONAL y el caso de OCURRENCIA (perdió por la cabeza, quedó dicho) parecería conferir la razón a quienes tal creen…
También en las temporadas de 1916 y 1917 actuó OCURRENCIA. En la primera de ellas corrió siete veces y ganó dos clásicos: el CHILE y el SUIPACHA (cuando se lo corría sobre 1800 metros) en el que hizo WALK-OVER. En la restante temporada compitió dos veces y no pudo ganar; no obstante, obtuvo un buen segundo puesto de Mamita II justamente en el clásico SUIPACHA. Su vencedora sería luego extraordinaria madre en el haras La Oriental, de don Justo C. Saavedra, y dio, entre otros ganadores clásicos, a dos vencedores en el NACIONAL: Bermejo y Rubens.
Como es natural, la lógica declinación que viene con los años se hizo sentir sobre OCURRENCIA. Retirada de las pistas, pasó a desempeñarse en la reproducción en el haras que la había visto nacer: SAN JACINTO. Dos hijas suyas resultaron muy buenas madres: GRISETA dio a (Ipe A VOLONTE, hoe del JOCKEY CLUB del ’42 (en puesta con PONICO) y de los clásicos KEMMIS, CHEVALIER y MIGUEL F. MARTINEZ.
SONRISA, por su parte, produjo a la buena RIDERE (Master Vere) vencedora consecutivamente de los clásicos CARLOS CASARES, UNZUE, ELISEO RAMIREZ, Y LUIS MARIA CAMPOS ATUCHA, para perder su invicto en la Polla en la que escoltó a Dalilah. En el ’43, RIDERE se impuso en el RAMON BIAUS y se despidió de las pistas con un triunfo en el GILBERTO LERENA.
Con los datos suministrados en esta sucinta reseña, surge con meridiana claridad la condición de una auténtica gloria del turf de la guardia vieja: la famosa OCURRENCIA.
#CarlosFelice