La Enorme Paseana

La Enorme Paseana

De “Bahía Blanca” para el mundo

Este sábado 13 en San Isidro habrá otra edición del Premio Clásico Paseana-G2 (1800 metros), para hembras de 3 años y más edad, dispuesto en homenaje a una de las grandes yeguas de nuestra hípica.

Con cinco triunfos en 8 salidas argentinas entre 1990 y 1991, la hija de Ahmad (Good Manners) y Pasiflin, por el británico Flintham, continuó su campaña en Estados Unidos, para totalizar al fin de su trayectoria en julio de 1995 un palmarés de 19 primeros, 10 segundos y 2 terceros en 36 actuaciones, con recompensas por U$S 3.317.427.

Por acá, siempre al cuidado del uruguayo Ever Washington Perdomo para el stud Bahía Blanca, tras dos éxitos condicionales ganó el Francisco J. Beazley-G2 (1800 metros) de Palermo con la monta de Miguel García, secundada a 1½ cuerpo por Silver Beauty y con la notable Campagnarde a otros 6 largos. Luego fue 3ª a varios de las mismas Campagnarde y Silver Beauty en el Gran Premio Selección-G1 (2000 m), y se reivindicó en el pasto húmedo de San Isidro a las órdenes de Miguel Sarati al preceder por 4 largos a la platense Pupy Hill y a Jewellery en 1’59”2/5 para el Gran Premio Enrique Acebal-G1 (2000 m). Falló en diciembre al animar la Copa de Plata-G1 (2000 m) de Jewellery, y ya en 1991 reapareció con un buen 4º a 2½ de Fail, Ballesta y Teresine en el Federico de Alvear-G2 (2200 m). Posteriormente, el 13 de abril, se despedía del país con victoria en el Clásico Abril (1800 m), derrotando fácilmente a Inimitable y Serrana (la madre de Serradiza) en 1’46”2/5.

Y en Norteamérica, entrenada por Ron McAnally para Sidney H. Craig y conducida por Chris McCarron, la zaina nacida en el Haras Vacación desplegó su mejor repertorio, llevándose en forma consecutiva el Silver Belles Handicap-G2 (1700 m) de Hollywood Park; el San Gregorio H.-G2 (1800 m) a expensas de la argentina Laura Ly en un fangal, el Santa Maria H.-G1 (1700 m) –dejando 3ª a Campagnarde- y el Santa Margarita Invitational H.-G1 (1800 m) de Santa Anita, aquí con Laramie Moon, Campagnarde y Laura Ly por detrás; más tarde, el Apple Blossom H-G1 (1700 m) de Oaklawn Park; y los Milady H.-G1 (1700 m) sobre Re Toss y Vanity H.-G1 (1800 m) de Hollywood Park.

Entró 5ª ante los machos en el Pacific Classic-L. (2000 m) de Del Mar, placé de Fowda (USA) en el Spinter Stakes-G1 (1800 m) de Keeneland, y el 31 de octubre de 1992 en Gulfstream Park acaparaba todos los titulares al brillar en la Breeders’ Cup Distaff-G1 (1800 m) por 4 cuerpos sobre Versailles Teatry (USA) y Magical Maiden (USA) en 1’48”17/100 y con lujoso accionar.

Reprisó en 1993 con un 2º a 1½ de Race the Wild Win (USA) en el Santa Maria H.-G1 (1700 m) de Santa Anita, en igual circo repitió colocación a la cabeza de Southern Truce (USA) en el Santa Margarita Invitational H.-G1 (1800 m), dio doblete en los Apple Blossom H-G1 (1700 m) y Milady H.-G1 (1700 m), para luego continuar sumando figuraciones y triunfos en el más alto nivel, como el 2º al hocico de la célebre Hollywood Wildcat (USA) en la Breeders’ Cup Distaff-G1(1800 m) de esa temporada en Santa Anita. Entre sus últimos éxitos, el Spinster Stakes-G1 (1800 m) de Keeneland, el Santa Margarita Invitational H.-G1 (1800 m), el Chula Vista H.-G2 (1700 m) de Del Mar y ya con 8 años de edad el Hawthorne H.-G2 (1700 m) de 1995 en Hollywood Park.

Devuelta a Argentina, fue servida cuatro veces por Lode (USA), quedando vacía en tres de ellas por serios problemas de fertilidad. Tras denodados esfuerzos de Ignacio Pavlovsky, gestó sólo a Paseana’s Girl (2000), exportada a Estados Unidos donde al cabo de tres salidas apenas clasificó 3ª en un Maiden de 1200 metros de Santa Anita; de madre generó con Candy Ride a Candy for Paseana (USA), triunfante en cinco de sus 29 presentaciones.

El 21 de junio de 2006, el corazón de Paseana dejó de latir en el Haras San Ignacio de Loyola. Aunque a los 3 años había sido favorita aquel miércoles 1º de agosto de 1990 al debutar con suceso en la auxiliar de pasto de San Isidro, cuando en rauda carga batía por 1½ a La Calada en 1’23” clavados, pocos pensaban que integraría al poco tiempo la saga albiceleste en la Copa de Criadores iniciada por Bayakoa (1989/1990), y a la cual se agregaría Blue Prize (2019) casi tres décadas después. Ni que sería Doble Mejor Yegua Adulta (1992-1993) en los Eclipse Award, e inducida al prestigioso Hall of Fame en 2001.

Pie de foto
Paseana y McCarron, inolvidable postal