“Si no mejoramos ahora mismo el mundo, toda va a empeorar”

“Si no mejoramos ahora mismo el mundo, toda va a empeorar”

Yehuda Berg, maestro del Kabbalah

Sus padres querían que él naciera en un lugar especial. “En un centro energético .importante”, aclara el propio Yehuda f Berg a GENTE. Por eso mismo, Phillip (un prestigioso rabino de Nueva York) y Karen (la esposa que acompañó su proyecto de vida) eligieron viajar a Jerusalén. Ahí nació Berg, quien con el tiempo se convertiría en el heredero perfecto. Phillip ya se había transformado en el referente principal del movimiento cabalístico, al enseñar esta milenaria doctrina (a veces tan difícil de clasificar) en los Estados Unidos. Creó el Centro Kabbalah en 1971 y trazó un camino. Popularizada principalmente por Madonna, y adoptada por la pareja Demi Moore-Ashton Kutcher, tiene adeptos en todo el mundo. Y Berg es el gurú que los aglutina y guía, todo un best-seller que publicó más de 30 libros traducidos a 20 idiomas. Entre sus obras más destacadas figuran El Poder del Kabbalah y Los 72 nombres de Dios. la Kabbalah (o Cabala) está conformada por un caudal de sabiduría que proviene de diferentes culturas, aunque se la suele asociar con el judaismo. Profundizar en esta filosofía, dicen sus seguidores, permite entender mejor de qué se trata todo esto. La vida, digamos. En eso anda Yehuda (casado, cinco hijos, vive Los Angeles), que llegó a la Argentina para promocionar otro libro con destino de éxito: El Poder de cambiarlo todo. Un hueco en su agenda, que incluyó charlas con celebrities locales -incluida Ivana Pagés, la ex de Redrado- para esta charla. -En sus propias palabras, ¿qué es la Kabbalah? -No es una religión, como muchos suponen, ni viene a suplantar ninguna creencia. Es una herramienta tecnológica. ¿Se entiende? la Kabbalah, su estudio, nos ayuda en este camino que es la vida. Es un cúmulo de sabiduría que tiene dos mil años de antigüedad.
-¿Su padre fue su maestro?
-Sí. Los conocimientos se imparten de generación en generación, siemprtfde maestro a alumno. -¿Usted también va a transmitir lo que sabe? -Eso espero… Tengo algunos alumnos, pero aún no puedo decir: “Este va a ser el próximo líder”.
-¿Su padre lo impulsó a tomar este lugar o fue una decisión personal?
-Fue mi decisión, totalmente. Mi padre nunca me impuso nada. En un momento de mi vida me pregunté “¿qué quiero hacer?”.,. Y después de un tiempo, cuando ya tenía 22 ó 23 años, supe que éste era mi camino.
-¿Cómo era su vida antes?
-Crecí como cualquier persona, yendo a la escuela. Por supuesto que mis padres me llevaban a viajes espirituales y sabía lo que era la Kabbalah, pero nunca me había comprometido totalmente. Hasta que un día… sentí algo, aquí en mi interior. Y me dediqué a estudiar. Desde entonces, muchas cosas cambiaron: encontré algunas respuestas, o al menos ahora sé dónde buscarlas.
-¿Respondió todas las dudas trascendentes de la vida?
-Conseguí una… dirección. No pienses que tengo todo claro, eh, ni todas las respuestas a los interrogantes que
se hace el Hombre. Pero sí un rumbo.
-¿Cuál es el rumbo que está tomando la Humanidad?
-Veo que estamos en una bifurcación. Tenemos la chance de mejorar, justo en este momento. Si no, el mundo va a
empeorar. Hay una energía de cambio dando vueltas, definitivamente, y no creo que las cosas sigan siendo iguales. Los cambios pueden ser buenos o malos. Depende de nosotros convertirlos en algo positivo.
-¿Es la eterna lucha del Bien contra el Mal?
-Hay fuerzas de negatividad y positividad en el mundo, eso está claro.
-Según se dice, la Kabbalah nos ensena las reglas de
la vida. ¿Cuál es la más importante?
-La primera de todas: no hay que juzgar. Típicamente,
ves a una persona y de inmediato descargas un caudal de
información que ni siquiera sabes si es acertado. La gente
juzga. Y eso causa una separación.
Es algo que está enquistado en las
sociedades y que debería cambiarse.
La segunda, entender que las cosas
ocurren por una razón. La famosa
ley de causa y efecto. Y saber que
los desafíos son oportunidades que
nos presenta la vida.
-¿Cree en Dios?
Sí. Considero que existe una fuerza que hace que todo fluya.
-Tiene raíces judías, pero no practica esa religión.
-Los cabalistas no nos consideramos
devotos de ninguna religión en particular. Paradójicamente, la religión ha causado más muertes que cualquier enfermedad, por las guerras que se producen. Algo que debería unir nos divide…
-¿Qué piensa de la muerte?
-Que es parte de la vida, como el nacimiento.
-Que figuras como Madonna o Demi Moore se interesen por la Kabbalah, ¿qué efecto causa?
-La parte buena es que, a raíz del interés que despertó en celebridades, más gente estudia la Kabbalah. Mira: yo
no conocía personalmente a Madonna antes de que se volcara a esta experiencia, pero ahora somos muy cercanos. Y puedo decirte que está muy comprometida. Y que es una gran persona y una madre maravillosa.
Estuvo con Susana Giménez hace poco.
-Sí. La conocí en Punta del Este… Noto que mucha gente de América latina estudia la Kabbalah, y me hace sentir
muy bien en cada destino.
-Hablando de destino, ¿piensa que todo está ya escrito en nuestras vidas?
-No, para nada. Todo depende de nosotros.
REVISTA GENTE