Desvelados: por las series, casi el 75% de los porteños le quita horas a su descanso

persona viendo series o películas en notebook

Desvelados: por las series, casi el 75% de los porteños le quita horas a su descanso

Por Evangelina Himitian
Odia el gusto a poco. Lara es adicta a las series. No le alcanza con ver un solo capítulo por vez. Si sigue Black Mirror o Stranger Things, verá como mínimo cinco episodios, y si no logra conciliar el sueño, toda una temporada en un solo día. Eso implica quedarse varias noches a la semana despierta hasta las tres. El fenómeno se conoce como binge watching (atracón).
Lara es parte de una generación “adicta” a las series que duerme menos de cinco horas diarias. Según un estudio de la consultora Ibarómetro, el 74,6% de los porteños reconoce que es víctima de esta conducta.
“Las series le roban horas al sueño, en una población que ya padece una gran privación de su tiempo de descanso. Los más afectados son aquellos que tienen entre 25 y 45 años, tanto los que viven solos como los que son padres y encuentran en la trasnoche un momento ideal”, dice Mirta Averbuch, especialista en Medicina del Sueño de la Fundación Favaloro.
“El sueño es nuestro mayor enemigo.” Así lo sintetizó Reed Hastings, el CEO de Netflix, en abril pasado, al presentar los resultados del primer trimestre, cuando le preguntaron por las plataformas de streaming que salen a darle batalla. “Cuando ves una serie de Netflix y te enganchás, te quedás hasta tarde. Realmente, al final, estamos compitiendo con el sueño”, dijo Hastings.

Unos días después, la Sociedad Americana de Medicina del Sueño advirtió sobre cómo afecta la salud, el estado de ánimo y las habilidades cognitivas el dormir poco a causa de las series. Las maratones nocturnas representan el 15% de todo el streaming en Netflix, a nivel mundial.
El consumo nocturno de series de los porteños es aún mayor. El 76% dijo que las consume de noche: de ellos, el 18.3% lo hace durante la cena, el 54,2% luego de la comida y el 3,5% sigue durante la madrugada.
¿Cómo consumen las series los porteños? De a varios capítulos juntos, después de la cena y en soledad. Esa es la tendencia que manda, sobre todo entre los más jóvenes. Los mayores de 51 años fueron los únicos que dijeron que veían de a un capítulo por vez, mientras que las maratones son frecuentes para siete de cada 10 porteños.
“Hoy, las plataformas de streaming destronan a la televisión. El 43% prefiere sitios como Netflix a la televisión, elegida por el 39,5%. Sólo el 11,4% dijo que le gustan ambas y al 6,1%, ninguna. Entre los más jóvenes la preferencia por el streaming llega al 70%”, explica Guido Moscoso, director de estudios de Ibarómetro.
Las personas mayores de 51 años son las únicas que siguen prefiriendo la televisión a las plataformas. “Casi el 80% de la gente considera que estos sitios cambiaron la forma en la que consumimos películas y series. El diferencial no es ni el precio ni la variedad. Es poder ver lo que uno quiere cuando quiere”, agrega Moscoso.
Romina tiene 28 años, trabaja en un banco y se levanta todos los días a las 7.30. Sintió una atracción tardía por las series, junto a su novio, Nicolás, hace dos años. Por eso, para ponerse al día con los clásicos que tiene atrasados, como Lost o Doctor House, atraviesa casi todas las semanas varias maratones que se extienden hasta las 4. Pero tienen un código de hierro: ninguno de los dos puede adelantarse si el otro no está o se quedó dormido.
Para el día de San Valentín, Netflix lanzó una encuesta sobre “parejas infieles”. Se refería a aquellos que habían empezado a ver una serie juntos y que uno de los dos “engañó al otro” y se le adelantó uno o varios capítulos o, directamente, terminó viendo todo solo.
Según los resultados, el 46% de las parejas que ven Netflix son infieles. Y el 81% fueron infieles alguna vez. Uno de cada cuatro engaños ocurre en la misma cama, cuando el otro se queda dormido. El 28% ocurrió durante un viaje y un 24%, mientras la pareja está trabajando.

Postergaciones
Casi la mitad de los consumidores de series porteños (49,7%) dijo que mira algunos días a la semana, mientras que un tercio (33,1%) ve todos los días y un 17,3%, sólo los fines de semana. Los menores de 35 son los que con mayor frecuencia consumen a diario.
Les preguntaron qué actividades habían dejado por mirar series. El 37,3% dijo que abandonó el cine o el teatro; el 15%, que postergó alguna salida con su pareja; el 14%, que dejó de salir con amigos, y el 13,5%, que cambió su forma de hablar, vestirse o pensar. Los adolescentes, los millennials y los mayores de 51 años, en ese orden, son los más propensos a cambiar la manera de comportarse en función de la serie que miran.
Aunque los porteños prefieran mirar ficciones solos, el 24,2% dijo que elige su próxima serie en función de las opiniones y recomendaciones de sus amigos y familiares. “Las series se convirtieron en una parada obligada en la conversación, durante los encuentros sociales. Esto nos habla del lugar que ocupan hoy en nuestras vidas, en la era del streaming. No sólo cambiaron los patrones de consumo cultural audiovisual. También modificaron nuestros hábitos”, dice Moscoso.
La temática es el motivo para elegir una serie para el 53,1% de los 1200 encuestados, mientras que los actores inciden en el 10,8% de los casos y los comentarios en las redes sociales, en el 5,9 por ciento.
LA NACION