Anti-fraude: crece la emisión de tarjetas de crédito con chips en el país

Anti-fraude: crece la emisión de tarjetas de crédito con chips en el país

Por Sofía Bustamante
Desde el año pasado las tarjetas de crédito que operan en el país apuestan a nuevas tecnologías, lo que conlleva que se emitan cada vez más plásticos con chips además de la tradicional banda magnética.
Si bien tanto Visa como MasterCard pusieron a disposición de los bancos esta nueva versión de tarjeta, depende de cada entidad la manera en la que se decide a qué clientes emitírsela.
Según Visa Argentina, el año arrancó con más de medio millón de tarjetas emitidas. En tanto desde MasterCard informaron que “mínimamente se necesitarán tres años para renovar todos los plásticos en circulación”.
Por ejemplo, un banco de primera línea imprime plásticos con chip a sus clientes Premium, o en todo caso, a aquellos que en el último año hicieron compras en el exterior. Sucede que en Europa ya funciona la nueva tecnología, mientras que en Estados Unidos se espera una adaptación total recién para 2015. De todas formas, los postnets pueden recibir ambos pagos, mediante la banda y por chip, pero la migración está en pleno proceso, cuanto antes se avance en esta dirección, mejor.
El chip nació para impedir la clonación de plásticos. En Argentina este tipo de fraude no es un problema para los bancos y administradoras, sin embargo en la región, países como Brasil y México ya incursionaron hace tiempo en las nuevas tecnologías. De hecho Mastercard tiene en Brasil casi el 100% de sus tarjetas de crédito y de débito con chip. En cuanto a México, la Comisión Nacional Bancaria tenía por objetivo 2013 que todos las tarjetas contaran con chip antes de que finalizara el año.
Según el Vicepresidente de Desarrollo de Negocios de MasterCard Argentina y Uruguay, Federico Gulland, en el país los primeros en pedir los postnet fueron los comercios ligados al turismo, los que se ubican en aeropuertos, o los hoteles y restaurantes, dado que las tarjetas de los turistas europeos tenían chip. “El problema era que, si se efectuaba un fraude, el comercio tenía que hacerse cargo del fraude”, explicó Gulland.
En esa línea, comentó que “en Europa el furor por el chip se dio en Inglaterra, donde los comercios, cansados de perder dinero por los fraudes solo aceptaban tarjetas con chip”. No obstante, aclaró que “es un mito no se pueden usar las tarjetas con banda magnética” en ese país.
Los plásticos con chips son imposible de clonar -al menos por ahora-, porque se necesita tecnología muy sofisticada que además es sumamente costosa de replicar. Tal como recordó Gulland, treinta años atrás, las bandas magnéticas era la tecnología de punta que impedía el fraude.
A su vez desde Visa Argentina agregaron que los chips “cuentan con un microprocesador que proporciona mayor velocidad a la transacción, mejorando la experiencia del pago del consumidor”.
El próximo desafío será migrar las tarjetas de débito hacia este nuevo sistema, una tarea todavía más ardua dado que son más los plásticos de este segmento que los de tarjeta de crédito, dado que están atados a las cuentas corriente y de ahorro.
EL CRONISTA