El amor, en todas sus formas

El amor, en todas sus formas

Por Bernardo Stamateas
El amor es poder. No es algo romántico. Es una capacidad o energía que cuando se suelta transforma a las personas, sus vidas y circunstancias.
Ya sea una amistad, vínculo comercial o de pareja, cualquier relación implica riesgos, y para poder soltar el 100% del potencial que tenemos dentro, debemos aprender a ser vulnerables. Saber que cada vez que sueltes el poder del amor, alguien puede lastimarte, traicionarte o dejar una marca en tu vida.
Hay quienes no se atreven o tienen miedo de volver a sufrir. Sin embargo, todo pasa y lo único eterno es el amor. Un amor sano cura y edifica cualquier dolor.
Decí cuánto querés al otro lo que más puedas, mientras más lo hagas la toxicidad no podrá penetrar en tu vida. Sé un sembrador de buenos recuerdos en tus hijos, pareja y padres. Los lindos recuerdos te sostienen en los momentos más difíciles.
No hay familias perfectas (las que dicen serlo son las más disfuncionales o conflictivas).
Intentemos dejar de hacer lo que al otro le molesta. Si a tu marido o a tu esposa no le gusta tal o cual cosa, no lo hagas; y si a vos no te gusta alguna actitud suya, decile: “por favor, no lo hagas delante mío”, y en esa conversación decile qué es lo que no te gusta. Evitá esas cosas que exasperan a los demás.
Una familia debe ser un equipo y como tal necesita buscar y compartir alguna actividad que a todos les guste hacer, tener un proyecto en común –desde programar unas vacaciones juntos o una cena–. Tu familia es tu equipo.
TIEMPO ARGENTINO