Las historias detrás de los tatuajes de los famosos

Las historias detrás de los tatuajes de los famosos

Por Julián Anzoategui
Aunque no solo los famosos llevan en la piel grandes demostraciones de amor o felicidad, es cierto que las celebrities suelen hacer todo a lo grande y, claro, con los tatuajes no se quedan atrás. No se trata de una cartera a la moda, una mascota insólita, una joya carísima o un auto de alta gama con controles sofisticados, pero en la actualidad pareciera que los tatuajes marcan status en el mundillo de las celebrities.
Los tatuajes ya no son de marineros, presos y marginales. Ahora la moda de “el arte corporal”, la forma cool que encontraron los especialistas para llamar a los cuerpos pintarrajeados, se desparramó por otros lares y llegó especialmente a los cuerpos esbeltos de la farándula argentina. Es así que con frecuencia podemos ver a muchos famosos, sean conductores, cantantes, actores, con sus cuerpos intervenidos.
Cancheros, ricos, famosos… ¡y tatuados! ahora son más los miembros del espectáculo local que llevan entre sus filas de adeptos a numerosos “adictos” a los tatuajes, que, en ocasiones, dedican a los más pequeños de la familia: nombres, retratos, símbolos o hasta coordenadas en su honor.
He aquí, entonces, un recorrido sobre el significado de los tatuajes de los famosos: nombres de hijos, caras de mascotas, siglas en otros idiomas, frases pegadizas, amores perdidos y encontrados y metas en la vida. Las marcas de los famosos son mucho más que pura moda.

Fresquitos
Como ya se sabe, los tatuajes de amor suelen ser los más dolorosos. Pero no por el pinchazo de la aguja o por el ardor que queda en la piel después de tamaña obra de arte: pasa que, muchas veces, ¡el amor se va pero el tatuaje queda! Por suerte, el romance entre Andrea Rincón y Ale Sergi, el cantante de Miranda!, parece ir viento en popa, al punto de que la pareja aprovechó su reciente viaje a Nueva York para plasmar en sus cuerpos una muestra de amor mutua de la que habían hablado en su primera salida: ella eligió lucir un “Ale” escrito con letras floridas en su cuello, a la vista. Por su parte, el músico correspondió al gesto de su novia con un tatuaje similar: un “Andrea” escrito sobre el lado izquierdo de su pecho, justo por encima del corazón. ¿Será entonces hasta que la muerte los separe? No se sabe. Pero ella fue una visionaria: le queda el consuelo de que el día de mañana, ante una eventual discordia, puede agregarle las sílabras “gría” para completar su tatoo y dejarlo aún más canchero.
Entre los recientemente tatuados no sólo está la parejita del verano. Hay varios más que eligieron los primeros días del otoño para dejar alguna nueva marquita en su piel, como es el caso de Jorge Rial. El periodista, ya más relajado con todo el tema de su divorcio televisado y por sugerencia de su novia, “Loly” Antoniale, que lo llevó engañado hasta la sala de tatoo, se tomó unos días de descanso y aprovechó para tatuarse un código de barras con el nombre de sus hijas Morena y Rocío en cada antebrazo.
Que Francisco Tinelli es gran compinche de su papá, no es noticia. Ambos son muy parecidos físicamente, comparten la pasión por el fútbol y San Lorenzo, aman la música electrónica, disfrutan del tiempo libre haciendo deporte y ahora tienen otro punto en común: ¡los tatuajes!
Es que “Tiki” (como lo llaman en la intimidad) hace tiempo venía con ganas de tatuarse, pero no encontraba el diseño ni el tatuador que lo convenciera. Su papá le dijo que únicamente Mariano Antonio, el tatuador de muchos famosos y el suyo personal, podía ser el que grabe su piel. Así, Tinelli Jr. eligió tatuarse un ancla dibujada por un amigo y se la dedicó al conductor de Showmatch por la red social Twitter. Tinelli comenzó a grabarse sus brazos hace unos años con un diseño de Micaela, su hija mayor.

Misceláneas
“Pour l´eternité”. Con esta frase en francés, que en español significa “por la eternidad”, Nazarena Vélez y su hija Barbarita, sellaron con una impresión en sus antebrazos el amor que se tienen como madre e hija y eso hizo que Nazarena le pierda el miedo a imprimirse la piel. Tanto le gustó ese tatuaje que comparte con Barbarita que cuando terminó la temporada de verano quiso sorprender a su familia con una nueva adquisición y llamó a su tatuador amigo para que le armara un lindo diseño para su nuevo “escracho” que ahora lleva en el omóplato con los nombres de sus tres hijos y su marido.
Abuela orgullosa, Daniela Cardone tampoco dudó en inmortalizar el nombre de su primer nieto, Eloy, en uno de sus brazos. El pequeño, fruto de la unión de la hija de la modelo, Brenda Gandini, con el actor Gonzalo Heredia, se suma así a los varios tatuajes de esta abuelita sexy. Otra que se le animó a las agujas y la tinta fue Celina Rucci, quien eligió una zona que algunos aseguran que es dolorosa para tatuarse la frase “Passione per la vita” (Pasión por la vida, en italiano) que ahora luce con orgullo en sus costillas izquierdas. Sin embargo, la ex vedette aseguró que ella no sintió dolor alguno, que sentía la obligación de tatuarse porque es una apasionada en todo sentido y además porque esta obra marca el comienzo de un nuevo perfil en su vida personal. Otra que se tatuó en la zona de las costillas es Cinthia Fernández que eligió siglas en árabe para dejar grabado en su piel su creencia: Maktub, que significa “el destino está escrito” y refiere a su actual estado de querer cambiar el perfil profesional.
“Nunca seremos más jóvenes que ahora” es la inscripción elegida por Soledad Fandiño para colocar en sus brazos. Entre las que eligen tatuarse frases también está Jesica Cirio que, al parecer, se inclinó por una que la caracteriza y es su leit motiv: “If you believe it, is posible” (si lo creés, es posible) y para inmortalizarlo eligió una de las zonas más sexies de su cuerpo: ¡el ombligo!
Espiritual, Guillermina Valdés también se sumó a la moda de las frases en el cuerpo. En este caso, una palabra: Soltar. La novia de Tinelli eligió tatuarse ese recordatorio tras su separación de Sebastián Ortega. En cambio, Valeria Archimó y su novio Guillermo Marín se sienten unidos para siempre y lo reflejaron con un mismo tatuaje en sus manos que asegura: For Ever.
Además de las frases, que son casi un lugar común entre los amantes de los tatuajes, están quienes aprovechan el dolor para dejar un recuerdo en su cuerpo. Así le pasó a Ximena Capristo que tras la muerte de su pichicho de 10 años, se dibujó en la espalda la cara de la mascota.
Donde hay tatuaje, historias quedan.
TIEMPO ARGENTINO