10 May Estrategias contra el estrés: las técnicas para bajar un cambio
Por Laura Litvin
La vida es aquello que te va sucediendo mientras te empeñas en hacer otros planes”, le cantaba John Lennon a su hijo para que pudiera dormir. En los tiempos que corren, muchos como el pequeño Sean no pueden conciliar el sueño. Las incertidumbres varias, las presiones de todos los días y la costumbre occidental de estar todo el tiempo pensando en el futuro hacen que el estrés amenace a toda hora. Así, el presente se convierte en algo efímero, de lo que nos resulta difícil dar cuenta. Distintas técnicas abordan el problema con un objetivo común: controlar la ansiedad, tener registro del aquí y ahora, poner en dimensión las dificultades y lograr una mejor calidad de vida.
Tiempo Argentino consultó a especialistas que proponen distintas técnicas para manejar eficazmente el estrés. Cuando la mente se entrena a conciencia para estar mejor.
ATENCIÓN PLENA O EL ARTE DEL AQUÍ Y AHORA
Mindfulness es la palabra en inglés para designar a la meditación Vipassana, una práctica budista proveniente de la tradición Theravada que tiene más de 2500 años. “Comenzó a difundirse en Occidente en la segunda mitad del siglo XX y especialmente en los últimos años, impulsada por estudios científicos que dan cuenta de los efectos de esta práctica sobre la salud. Hay distintas formas de practicar mindfulness: sentados, acostados, en movimiento, lo importante es ser conscientes de lo que sucede en ese momento y observar todo sin reaccionar y sin juzgar. En las clases comenzamos presentando algún tema relacionado con la práctica o trabajamos sobre situaciones que traigan los participantes; luego guío una meditación que dura entre 40 y 50 minutos, en cualquiera de las modalidades y al finalizar compartimos cómo les fue. El aprendizaje de mindfulness es fundamentalmente experiencial, la teoría es apenas un complemento para enmarcar y dar sentido a la experiencia. Con respecto a las diferencias con otras prácticas, hay algunos tipos de meditación que son “de concentración”, donde el foco está puesto y se mantiene en un objeto en particular que puede ser la respiración, una frase o mantra, un sonido, una imagen; y otros tipos de meditación que son “de atención plena”, como mindfulness, en la que si bien podemos reconocer algún objeto principal de atención, el campo de la conciencia se abre para dar lugar a todo lo que pueda surgir en el momento presente”, explica Gustavo Geerken, instructor de Mindfulness en la Fundación Columbia.
Según el especialista, la atención plena nos permite descubrir recursos para manejar el estrés: la autorregulación (a través de la respuesta de relajación y el fortalecimiento del sistema inmunológico) y la estimulación de áreas del cerebro asociadas a emociones positivas (con la práctica sostenida en el tiempo se van produciendo cambios a nivel neurológico que van creando las condiciones para incrementar los momentos de atención plena hasta eventualmente convertirla en un rasgo de la personalidad). Además, la práctica va transformando la visión de la realidad (al descubrir y flexibilizar condicionamientos y filtros mentales); propicia el incremento de la conciencia interoceptiva (el registro de las sensaciones internas) y de la capacidad de concentración, y posibilita un manejo consciente de las emociones, todo lo cual se traduce en una mayor capacidad de manejar y reducir el estrés. “No se trata de dejar la mente en blanco sino de observar lo que sucede momento a momento, eventualmente la mente se aquietará y podremos o no acceder a algún espacio que podría denominarse ‘mente en blanco’, pero no es algo que se busque especialmente”, dice Geerken.
DINÁMICA MENTAL, LA LIBERACIÓN INTERIOR
La dinámica mental es un sistema de técnicas que se dirigen al desarrollo y a la ampliación de la conciencia y de la persona en su totalidad. “Lo que proponemos es tomar conciencia de la dinámica de nuestra mente –entendida en un sentido amplio como conciencia– para dirigirla hacia nuestro bienestar físico, psíquico, mental, material y espiritual. Partimos siempre de la práctica de la relajación y respiración para acceder a un estado mental de profunda atención relajada, lo que se conoce como estado Alfa. Estar en Alfa significa que la puerta está abierta a niveles más profundos de la propia mente y del propio cerebro en donde la intuición toma relevo, el estado creativo crece y hay una progresiva conciencia de unidad. La incorporación de estas técnicas para el mejoramiento personal permite al practicante descubrir el grandioso potencial de su mente, de sus propios recursos y capacidades para posicionarse en la vida como un ser humano integrado; sintetizamos este proceso en dos movimientos: liberación interior y autorrealización personal”, explica Carolina Cobelo, técnica superior en dinámica mental.
Esta disciplina fue creada por el doctor Horacio Moreno hacia la década de 1980, quien creó la Fundación Conciencia y Ciencia. “Es un método que se destaca por el hecho de comprender que la persona misma tiene los propios recursos que necesita para manejar cualquier tipo de situación. Las técnicas y las prácticas que se enseñan se las llevan las personas para sí, y lo que hacen es sacar a flote estos recursos, porque consideramos que sólo uno mismo puede ser su propio maestro. Horacio Moreno cultivó este método, más que nada, para que la persona se encuentre a sí misma en su verdadera libertad”, explica Cobelo.
Las sesiones de Dinámica Mental pueden ser grupales, donde la persona suele venir con un objetivo que quiera trabajar. El trabajo comienza con técnicas de respiración, relajación, concentración, programación, visualización y meditación. “Como siempre digo, el método debe adaptarse a la persona y no al revés, así que el tiempo que lleva tiene más que ver con los tiempos de cada uno. Hay personas por ejemplo que vienen simplemente a meditar y hay otras que vienen a realizar un trabajo específico que, una vez logrado, puede no venir más, aunque en general se quedan para seguir practicando o usar el espacio como un paréntesis de la semana, para recargar pilas, como se suele decir”, explica Cobelo.
GESTIÓN POSITIVA
Lucila Guttman es yogaterapeuta especializada en estrés y coach ontológico (un método que consiste en acompañar, instruir y entrenar a una persona o a un grupo, con el objetivo de conseguir alguna meta o de desarrollar habilidades específicas; una filosofía de entrenamiento del ser). En la técnica que aplica, Start Living (comenzar a vivir), se trabaja con meditación, visualizaciones, relajación progresiva y respiración consciente. “Se trata de que si reconocemos cómo es el mecanismo del estrés o el distrés, si sabemos cuáles son nuestros estresores y las consecuencias de ellos, si luego buscamos una estrategia para afrontar o controlar el estrés, mejoramos nuestro bienestar y nuestra calidad de vida. Significa dejar de percibir los estresores o estímulos como amenazantes y pasar a percibirlos como desafiantes. De alguna manera es pasar del distress o estrés malo al eustres o estrés bueno. El estrés es una función normal del organismo humano, es posible afrontarlo y aprender a manejarlo adecuadamente. Porque momento a momento estamos eligiendo y decidiendo qué hacer o no hacer. También elegimos nuestros pensamientos. Es importante darse cuenta de que si no podemos bajar las preocupaciones solos, es necesario buscar ayuda profesional. En una primera sesión evalúo al paciente en cuanto a sus hábitos cotidianos, su estilo de vida. Luego fijamos conjuntamente los objetivos de “salud y bienestar” que se desean lograr. Es importante comprender que estos tratamientos son complementarios a la medicina convencional. En cada sesión el paciente pude explayarse en aquello que necesita hablar y/o consultar, y mediante técnicas de coaching ontológico abordamos la problemática. La otra parte de la sesión es donde aplicamos las técnicas de respiración consciente, meditación y visualizaciones o imaginería. Me encanta ver los progresos de los pacientes que aprender a utilizar su imaginación para lograr sus objetivos, ya sean aumentar su bienestar o abundancia”, explica.
Los 10 pasos del Start Living son: reconocer las señales del estrés, detectar las situaciones que lo causa; vivir en el presente; tomar conciencia y no reaccionar a situaciones de estrés; disfrutar del silencio; pedir ayuda; enfrentar los temores; dejar de rumiar pensamientos negativos; fijarse metas y relajarse.
Como dice Cobelo, “los pensamientos pueden dominarnos o nosotros dominar los pensamientos. Dirigir los pensamientos requiere al principio un trabajo de mucha disciplina interna. Escuchar qué pensamos permanentemente es desarrollar una actitud de testigo observador de nuestra mente. Los pensamientos son, cuando actúan a nuestro favor, poderosos aliados.”
TIEMPO ARGENTINO