Sagrada Familia: arranca la fase final de una basílica única
La luz era el juguete de Antoni Gaudí. El arquitecto la imaginaba así: a 45 grados, mediterránea, la que no rebana ni se interrumpe. Una luz que acaricia. Fue moderno, intuitivo y distinto: pocas veces bocetaba sus obras. Será por eso que ante una pieza...