El Anchorena, Puerto de Llegada

El Anchorena, Puerto de Llegada

El Anchorena, puerto de llegada

Culminación de la Ruta Clásica de los Milleros

Bronx y Violeta M, titulares el pasado fin de semana de los Premios Clásicos Ecuador-G2 (1600 metros) y Sibila-G2 (1600 metros), completaron una etapa trascendente en La Ruta Clásica de los Milleros del Hipódromo de San Isidro, que continuará como ya refiriéramos en anteriores entregas, con el Clásico Espirita-L. (1800 metros) del 28 de este mes, y los Grandes Premios San Isidro-G1 (1600 metros) y Diamante-G1 (1600 metros) del 5 de octubre.

Luego habrá otras dos instancias previas al gran choque de diciembre, donde finaliza el derrotero iniciado en el Gran Premio San Isidro-G1 (1600 metros). Por ende, restará para los últimos dos meses una rica trilogía:

10/11 Premio Clásico Carlos P. Rodríguez-G2 (1600 metros)

22/11 Clásico Embrujo-L. (1800 metros)

14/12 Gran Premio Internacional Joaquín S. de Anchorena-G1 (1600 metros)

Instituido el domingo 30 de marzo de 1947 en la arena liviana del Hipódromo Argentino con la identidad de Clásico Carlos P. Rodríguez (2000 metros, Handicap), tuvo su puntapié inicial con Platero (Haut Brion), guiado por “Jotapé” Artigas al batir por ¾ y 2 cuerpos a Recién y Colosal en 2’3”; el crédito de la caballeriza F.A.R. estaba al cuidado de Cesáreo Rodríguez. Rákóczi (Technique) en 1948 con Salvador Di Tomaso, High Born (High Table) en 1949 al mando de Juan Araya, Kalmazul (Killarney) con Osvaldo J. Matteucci en 1950, Toribio (Gringaso) al año siguiente con Jacinto G. Gularte, y High Life (Full Sail) en 1952 conducido por Roberto H. Ciafardini, completan ese cuarto de hora en las veinte cuadras porteñas.

No se programa en 1953 y recién regresa el 18 de junio de 1961, ya en la grama de San Isidro, donde Pombé (Nigromante), también con Rubén H. Ciafardini, relega por 2½ y 3 largos a Nápoles y Parisien en 1’23”1/5 para el Clásico Carlos P. Rodríguez (1400 metros) exclusivo para productos de 2 años. En 1962 pasa a Palermo, y el potrillo Ukase (Único) les tira varios cuerpos a Espigón y Gran Trece en 1’27”2/5 para una arena brava. Y en 1963 es el bueno de Gamín (Tatán), reservado del Upper Cut al cuidado de Juan Lapistoy y dirigido por Cayetano S. Sauro, el encargado de despedir por casi dos décadas la carrera, superando por 3 y 1½ a Snow Man y Anheloso en 1’24”2/5 para la húmeda palermitana.

Luego de la reapertura de San Isidro, el cotejo reprisa el viernes 19 de septiembre de 1980 como Clásico Carlos P. Rodríguez-G2 (1000 metros), y en el pasto normal el soberbio Villares (Lustily) les tira 3 largos a Raigal, Francis Trail y Marignan en 56”41/50, con Rubén Laitán en postura. Catorce meses después, el sábado 14 de noviembre de 1981, el Clásico Carlos P. Rodríguez-G2 (1600 metros) debuta con su rótulo millero en el césped principal pesado, cuando Stall Moon (Stallwood) con Víctor Centeno le dio de un viaje por muerte, tirándoles 7 cuerpos a Te Espía, Altivante y La Tramposa en 1’35”2/5; “La Máquina Blanca” del stud E.C.P. estaba al cuidado de Carlos A. Ferro.

Desde entonces, siempre bajo el mismo encuadre, tuvo ganadoras de la talla de Taranta (1982), Cachy (1986), Kalerre (1988) y La Charlatana (1990), una etapa plenamente dominante de Juan Carlos Maldotti con sus pupilas Aplanatín (1993), Good Passion (1994-95-96) –única heroína triple del historial-, Baronesita (1997), Saragosse (1998), Paga (2000), Randy Cat (2001), Valery Lady (2004) y Baby Melody (2005), y, más cerca en el tiempo, féminas de la clase de Tina Wells (2006), Filarmonía (2007), la torda Teamgeist (2008), Scarlatt (2009), Bouclette Gulch (2010), Infiltrada (2013), Pura Magia en doblete de Juan Carlos y Juan Sebastián Maldotti (2014-2015), Fair Value (BRZ) (2017), Elvas (2020), Manuca (BRZ) (2022) y Hawaiian Love (2023).

El Clásico Embrujo se corre por primera vez el viernes 23 de diciembre de 1983 sobre 1400 metros en la grama grande San Isidro, con Le Bourget (Good Bloke) al tope tras derrotar de un viaje y por 3 cuerpos a Ligerazo y Ecossaise en 1’23”1/5; Héctor Libre en las riendas del pensionista de Eduardo L. Génova. Trascartón sale de circulación hasta el 19 de octubre de 1988, ocasión en la que el platense Fontino (Wohlgemuth), con Carlitos Fernández y ustrado por Saturnino L. Bello, somete por ½ pescuezo y ¾ cuerpo a El Sabi y Sureste en 1’35”3/5 para el Clásico Embrujo-L. (1600 mts.), condición que mantiene hasta la actualidad. Entre sus celebridades encontramos a la yegua Atout Coeur (1990), Pleyel (1991), Akiro (1995), Rincón Fraile (1996), Me Coviene (2000), Eclipse West (2003) y Maruco Plus (2008), todos a peso por edad. A partir de 2010, con el éxito de My Golan, se dirime a modo de Handicap –con recargos o descargos por contiendas de Grupo ganadas o no sólo en 2018, 2019 y 2020-, y registra por ejemplo los halagos de Koller (2014), Kiran (2016) y Strategos (2018), más el doblete ulterior del moro Tooru (2022-23) tutelado por Pablo Pedro Sahagián.

La ruta jerárquica culmina con el Gran Premio Internacional Joaquín S. de Anchorena-G1 (1600 mts.). Arrancó el 24 de mayo de 1959 sobre la arena de Palermo como Clásico Joaquín S. de Anchorena (1500 metros), para potrancas de 2 años debutantes, y lo inauguró Perdularia (Cruz Montiel) con la monta de Rubén Baltasar Quinteros, superando por varios a Astucia y Nicosia en 1’30”2/5 para la arena normal, presentada por Ezequiel J. Solari para la ecurie El Aparte. Provocadora (Argur) en 1960 y Victoria (Nigromante) en 1961 terminan ese breve terno.

Trasladado en 1962 y 1963 a los 2200 metros de césped de San Isidro con idéntico nombre, pero ya para productos de 3 años, marca el doblete de Eduardo Jara a bordo de Trinando (Prince Canarina) y Símbolo (Cronus).

Y desde el 8 de diciembre de 1964 adopta la estructura actual, sobre 1600 metros y para todo SPC de 3 años y más edad oriundo de cualquier país. Entonces, la recordada Doretta (Aristophanes y Doria), con Adolfo Sánchez Cáceda, postergó por 1½ y 2½ a Bien Jaileife y Fantasista en 1’36”3/5 para la grama normal, vestida con la chaquetilla del Haras Ojo de Agua. Hasta 1973 tuvo sede en San Isidro, y allí ganaba Centurio (El Centauro), huésped de Eladio Labrador enriendado por Eduardo Jara

En 1974 se mueve a Palermo por el cierre del Norte, y Appell (El Centauro), pupilo del “Mago” Bianchi dirigido por Vilmar Sanguinetti, le saca pescuezo a Get Sun en 1’35”4/5. No se corrió en 1976, tampoco en 1977, y el 26 de noviembre de 1978 con el cartel de Premio Clásico Joaquín S. de Anchorena-G2, se lo apropió Seúl (Dancing Moss) con Aníbal Etchart y también del “Mago” Juan Esteban Bianchi, por 5 largos sobre Teócrito y Brujo Negro en 1’38” para la pesada. El mismo trainer para la foto del último capítulo céntrico, el 23 de diciembre de 1979, Certificado por el hijo de Perugín con Marina Lezcano en su silla al adelantar por 1½ y 4 largos a Caratesis y Bogart en 1’36” clavados.

Finalmente, el 12 de diciembre de 1980, se estrena en el Hipódromo de San Isidro el Gran Premio Internacional Joaquín S. de Anchorena-G1 (1600 metros) dentro del mitín del Pellegrini. Con Otelo (Yata Nahuel e Infanta Carlota), con Alberto Plá y Jorge Degregorio por detrás, le estira arriba 1 cuerpo al líder Pulinés en 1’33” de platino para el verde firme, con Hackman a la sombra del placé. El aludido Hackman (1981), el embajador Lord at War (1983), Good Champagne (1985), el tordo Vigorous Toss (1991), Cleante (1993), El Coliseo (1994), el recordista Ritón (FR) (1995), Ixal (1998), el extraordinario Candy Ride (2002), Storm Military (2006), Inter Optimist (2008), Thunder One (2011), Winning Prize (2012), Infiltrada (2013), Todo un Amiguito (2014), Le Ken (2016), Irideo (2020), Satu (2022) de una hebra en el soberbio crono récord de 1’30”90/100 y Huapango Torero (2023) son algunos de los actores de relieve que brillaron en la competencia, los dos posteriores adiestrados por Nicolás Martín Ferro al igual que Winning Prize.