Los smartwatch maduraron y ahora sí vale la pena comprarlos

Los smartwatch maduraron y ahora sí vale la pena comprarlos

Por Marcelo Belluci
Tras deambular sin rumbo por el pasillo de los accesorios digitales, los smartwatch encontraron entre los consumidor de artículos de lujo el público que andaban buscando. Más allá de la apariencia exterior, que comprende la parte aspiracional del dispositivo y la mecánica de control, están los detalles técnicos, que marcan la gran diferencia en la muñeca. Lejos de los primeros relojes que eran llamativos pero limitados, los fabricantes ahora lograron dar con el equilibrio justo entre servicio y funcionalidad. Algunos modelos van por su tercera generación y los más avanzados, al sincronizarse a través de Wi-Fi, pueden recibir notificaciones y hasta incluso, aceptar o efectuar llamadas en forma remota.
El punteo de la división establece que de un lado están los llamados relojes híbridos, que rondan los 3 mil pesos y se manejan exclusivamente con las apps instaladas de fábrica. Los avanzados incluyen las mismas conexiones que un smartphone: Wi-Fi, GPS, NFC, LTE y también, son resistentes al agua y el polvo. Su precio supera los 8 mil pesos.
Su mayor privilegio es prescindir de la pantalla del celular para cotejar las notificaciones de redes sociales o mensajeros instantáneos. Así, dentro del hogar o en un contexto de oficina, uno puede dejar el celular en un cajón y, mientras permanezca vinculado a la misma red inalámbrica del teléfono, es posible contestar los mensajes o responder las llamadas a la distancia con sólo girar el bisel.
De todas las máquinas disponibles, Apple Watch y Samsung Gear tienen la plataforma más desarrollada, con amplias ofertas de aplicaciones y juegos. Además, los amantes del diseño pueden descargar una gran variedad de esferas: hay varias gratuitas, pero si uno pretende lucir un módulo Tag Heuer, Fossil, Tissot, Seiko, Hublot, deberá pagar por ellas. La definición de estos cuadrantes, sumado a la nitidez de los colores en pantalla, hace olvidar que lo que uno tiene frente a sus ojos es una simulación digital y no un sistema mecánico.
De algún modo, esta superioridad se refleja en las preferencias del público. El líder del sector es Apple Watch cuyo sistema WatchOS ostenta el 57% del mercado, según un reporte de la consultora Strategy Analytics. Curiosamente, en el segundo lugar y contra todos los pronósticos que auguraban su fracaso, lo ocupa Samsung con su Tizen (19%).
En 2015, la firma surcoreana le quitó el apoyo al sistema Android Wear -que hoy se ubica un punto por debajo y lo integran diferentes marcas como Huawei, Motorola y LG- para apuntalar a Tizen, un sistema operativo basado en la distribución MeeGo, que también encontró su camino hacia los smartphone de gama baja y los televisores Samsung.
Como la idea es rivalizar (al menos en ornamentos y precio) contra la maquinaria tradicional suiza, estos mecanismos digitales basan su poderío en la posibilidad de personalizar las combinaciones. Uno puede elegir el tipo de malla, colores y materiales. Desde un modelo base de silicona, otro más avanzado de cuero, mientras que las de metal ocupan el extremo más codiciado.
De acuerdo a las estimaciones de la consultora CanalysCanalys, este universo tecnológico continuará creciendo a lo largo de este año. Los cálculos apuntan a un alza del 18% hasta los 28,5 millones de relojes. El gran perjudicado por este ascenso es el rubro de la relojería tradicional, que todavía no se logró ponerse a tono con las nuevas tendencias.
Uno de los pocos relojes tradicionales que se animó a probar el equilibrio en el otro lado de la balanza es Tag Heuer. Desarrollado en colaboración con Intel, Connected Modular 45 a la suntuosidad de siempre le agrega la posibilidad de renovar su aspecto todos los días gracias a que es modular. En total hay más de 500 combinaciones para lucir un equipo diferente todos los días.
La línea Samsung consta de dos modelos, Gear S3 Frontier, casual o deportivo y el Gear S3 Classic, con un semblante más tradicional. Estos dispositivos son compatibles con cualquier celular Android, aunque si uno tiene un Galaxy S7 todo es mucho más simple y la configuración se realiza de forma automática. Mientras, Apple se prepara para mostrar lo que será su serie 3, hacia fines de septiembre.
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