21 Oct Me siento bárbaro
Por Pablo Gallo
Me llamo Lingote de Oro. Pero los burreros me conocen con el apelativo de “Lingote”, a secas. Estuve por marcharme a las praderas del haras, a padrillear, y justo se dieron cuenta que tenía muchas ganas de seguir corriendo. Y en este deporte tan competitivo, donde vencer no es sencillo, trato de volver a lo más alto del podio. Siento ese impulso. Mi cuidador lo nota en las madrugadas. Y mi jockey lo sabe, pues nos conocemos sin secretos y nos trasmitimos cosas.
Mañana iré por una medalla que ya gané doce meses atrás. Estoy un año más viejo. Y mis rivales también. La prueba es de Grupo 2, el Clásico Comparación, y tiene 2500 metros, una distancia casi en desuso, aunque habitual para mis ancestros.
Enfrentaré a cuatro adversarios. Uno de ellos viene de derrotarme, ya sopló 8 velitas y todo el mundo lo conoce bien. Yo lo humillé en este mismo cotejo, él irá por la revancha. Es como un cometa errante este Calidoscopio, su piloto lo trae en la retaguardia, desconectado de la punta, y cuando la gente grita, él se agranda de atropellada. Procuraré que no me sorprenda.
Estuve hablando con el “Chueco” Méndez esta mañana, después de un galopito de salud. Y le dije: “Mirá Corto, Ibeman tomará adelante, y Mustang Force seguramente lo irá a seguir. Nos conviene esperar los primeros 400 ó 500 metros, a ver si luchan, o no. Porque si se pelean yo quiero venir 3º, y te prometo no torcer tanto la cabeza si me hacés caso”. José me preguntó, con la mirada, qué pasaba si a Ibeman no lo iban a hostigar. “Por los 900 lo vamos a buscar nosotros”, le contesté.
Hoy cenaré temprano, frugalmente, y me iré a dormir tranquilo. Eché 2’8” de pasada. Me siento bárbaro. Y estas contiendas importantes, que de potrillo me ponían bastante nervioso, ahora me colman de una adrenalina difícil de explicar. Yo la noto siempre detrás de los partidores, incluso en mis oponentes más importantes: se les forma alrededor una suerte de aureola, el halo del guerrero.
Los espero mañana en el Hipódromo de Palermo. A las 19:30 estaremos ingresando a las gateras. Y ojala pueda abrazarlos a todos en el círculo de honor.