20 Feb Más allá de los videojuegos: cómo hacer negocios con la realidad virtual
Por Cintia Perazo
Si bien la realidad virtual está muy asociada con el mundo del entretenimiento, esta herramienta ofrece un gran valor para los negocios ya que promete revolucionar la interacción entre la información y las personas. “La tecnología de realidad virtual está transformando la forma en la que empresas y consumidores se relacionan. La posibilidad de experimentar en un ambiente virtual y de sentir, de una manera muy realista, un producto o servicio que una persona está evaluando comprar acelera los procesos de ventas y fideliza la relación con los clientes”, explica Martín González, gerente general de Delta3.
De acuerdo con la Asociación de Realidad Virtual, algunas de las más frecuentes aplicaciones son las visitas virtuales de un entorno empresarial, formación de nuevos empleados y una vista 360° de un producto. “Es una manera rentable de desarrollar un producto o servicio, puesto que permite probar un prototipo sin tener que desarrollar varias versiones, y al mismo tiempo, permite detectar problemas de diseño de manera temprana”, asegura Francisco Liguori, gerente de marketing de SAP para la Región Sur de Latinoamérica.
Según un estudio de la consultora IDC, los ingresos a nivel mundial del negocio de realidad aumentada (AR) y realidad virtual (VR) pasarán de US$ 5200 millones en 2016 a US$ 162.000 millones en 2020. Esto representa un crecimiento estimado mayor al 3000% en sólo cuatro años, donde se destacan aplicaciones en industrias como entretenimiento, salud, publicidad y software de negocios.
Carlos Farfán, gerente general de Pragma Argentina, señala que en el sector del entretenimiento ya hay emprendedores que se dedican a brindar la posibilidad de vivir recitales a través de esta tecnología. “Este tipo de vivencias son importantes para el proceso de ventas de un servicio cuyo motor de decisión pasa por el gusto y el precio. Además estos desarrollos están siendo estudiados por las universidades y escuelas de negocio para mejorar el proceso de aprendizaje de sus alumnos. En las conversaciones que hemos tenido con el sector académico en el país, hemos visto que el interés es muy grande”, revela.
Muchas compañías han comenzado a utilizar la realidad virtual para realizar reuniones con empleados o clientes que se encuentran en distintos lugares del mundo. Además los entornos virtuales también se utilizan para cursos de capacitación y escenarios de juegos de roles. “SAP incorporó esta tecnología en su sala de reuniones digital. Se trata de una solución que busca contextualizar y simplificar los informes de desempeño además de proporcionar a los clientes un panorama integral sobre el desarrollo empresarial de los distintos componentes estructurales de sus compañías”, cuenta Liguori. Esta solución utiliza auriculares Samsung Gear VR y Google Cardboard, que proyectan videoclips e interactividad digital basados en datos reales y escenarios simulados. “Los participantes de esta experiencia se ven inmersos en la acción y pueden experimentar cómo los datos, en tiempo real, están transformando los negocios mediante el cierre de la brecha entre los datos y la toma de decisiones”, detalla el ejecutivo de SAP.
González destaca que empresas como Audi están comenzando a promocionar y vender sus productos con experiencias de realidad virtual. “Otro caso interesante es el de la empresa SimSurgery, que comercializa desde 1999 simuladores de operaciones laparoscópicas de realidad virtual para entrenamiento de cirujanos. Nosotros, en Delta3, estamos produciendo simuladores de conducción de automóviles y vuelo para el entrenamiento de conductores y pilotos con tecnologías de VR”, afirma.
La agencia de publicidad R/GA, por su parte, desarrolló para Nike Chile una experiencia de realidad virtual para retail que permite personalizar los diseños de las zapatillas. Pero a pesar de su potencial Bruno Rovagnati, director general de R/GA Latam, observa que en el país aún se encuentra en una etapa de incipiente. “No hay aún mucha noción de costos. Además aunque muchos escucharon hablar de realidad virtual, muy pocos la experimentaron. Y la falta de acceso al hardware es una limitante. Aunque la tecnología sigue creciendo rápidamente todavía está en una etapa inicial”, resalta.
Para los especialistas, la realidad virtual puede ayudar a mejorar los procesos de las compañías, a simplificar procedimientos, a realizar entrenamientos y a reducir los riesgos a los que pueda estar expuesto un empleado; o bien maximizar la inversión que implica la organización de una feria, festival o recital. “Puede hacer más efectivo un proceso de entrenamiento y capacitación y hasta acelerar un proceso de compra de un cliente, puesto que ya lo vivió, ya lo probó, ya lo experimentó”, sintetiza el gerente general de Pragma Argentina.
Como dice Rovagnati, este es sólo el comienzo de la película. Los expertos aseguran que en unos años los entornos de realidad virtual permitirán que los usuarios puedan tocar, oler y sentir. Las experiencias podrían ser más reales aún y el sector corporativo podrá sumar “sentidos” a sus experiencias de venta y capacitación.
LA NACION