28 Sep 0cho avances que transformarán la industria
Por Ezequiel Chabay
En el devenir del capitalismo abundan historias de compañías que despreciaron los cambios tecnológicos que se daban mientras estaban en la cresta de la ola. Muy a pesar de ellos, el cambio llegó y provocó que la zona de conforte se convirtiera en un torbellino de problemas. En muchos casos, la obsolescencia de su modelo de negocios les obligó a bajar las persianas. La mentalidad del management, desde entonces, ha cambiado bastante.
Un estudio de PwC detectó que el 61% de los altos cargos de grandes empresas están preocupados por la velocidad de los cambios en sus industrias. Y el 77% de esos encuestados cree que los avances tecnológicos serán el fenómeno que más transforme las expectativas de sus clientes, proveedores y público interno, entre otros. Seguramente, la misma preocupación se extiende a pequeños empresarios industriales o del ramo de servicios, con actividades que requieren estar -más o menos- al día con los avances tecnológicos.
La reducción de costos, la globalización, el efecto multiplicador y las ventajas competitivas de las nuevas tecnologías están apareciendo en sectores tan dispares que pocas actividades económicas podrían arrogarse inmunidad frente a los cambios. En este panorama, urge a los número uno repensar la actualidad del negocio propio y ver qué herramientas están apareciendo en la tradicional o en la nueva competencia para estar al día e incorporarlas a la estrategia general.
Las ocho esenciales que llegarán en un plazo de cinco a siete años (de tres a cinco en el caso de economías desarrolladas) son la Inteligencia Artificial (IA), Internet de las Cosas (Internet of Things, o IoT), Realidad Aumentada, Robots, Blockchain, Realidad Virtual, los vehículos aéreos no tripulado (como los drones) y la Impresión 3D.
– Inteligencia artificial (IA)
El desarrollo de algoritmos y la velocidad para procesar datos permite que las computadoras realicen tareas que normalmente requerían de una o varias personas. La IA es un concepto paraguas que engloba el aprendizaje automático, el desarrollo de programas que pueden enseñar, comprender, razonar, planear y actuar en base a los nuevos datos que reciben. En algunas industrias es posible que asesoren a clientes sobre sus decisiones de compra.
– Realidad Aumentada (RA)
A través de gráficos o audios superpuestos, distintos dispositivos (como lentes o celulares) mejoran la experiencia del trabajador con una tarea o producto. En un futuro mediato, los operarios podrían ensamblar piezas u objetos para los que van recibiendo la información al instante.
– Blockchain
Se trata bases de datos compartidas que funcionan como un libro contable que registra operaciones de compra, venta o cualquier otra transacción. El registro de eventos se comparte entre muchos usuarios y la información una vez introducida no puede ser alterada, ya que la cadena aguas abajo refuerza las transacciones ascendentes. Este desarrollo comenzó con la criptomoneda Bitcoin, pero su uso se extendió pronto a bancos. Otro uso posible es en compras virtuales.
– Transportes no tripulados
Vuelan o se mueven sin un piloto humano a bordo. Pueden funcionar de forma autónoma, con un plan de vuelo predefinido o controlados de forma remota. Coches autónomos o drones podrían realizar operaciones de logística.
– Internet de las Cosas
Dispositivos, electrodomésticos, vehículos y otros tantos objetos pueden levantar e intercambiar información, y así ofrecer un mayor control sobre el desempeño de una máquina o el de un producto o servicio. El IoT Industrial (IIoT) ofrece una multiplicidad de beneficios en la supervisión de desempeño, control y producción, con datos que llegan a través de Internet.
– Robots
Se trata de máquinas electromecánicas o agentes virtuales que automatizan o asisten la actividad humana de acuerdo a un set de instrucciones, que suelen correr sobre un programa.
– Realidad Virtual (RV)
Es una simulación generada por computadora de una imagen tridimensional o de un entorno completo. La RV provocará cambios profundos en muchas industrias. En el sector automotriz, su aplicación permite testear el desempeño de herramientas de montaje con un demo y anticipar el funcionamiento de las máquinas en la línea de ensamblado.
– Impresión 3D
Por medio de la fabricación aditiva, piezas de extrema delicadeza pueden ser construidas directamente desde la información acumulada en un plano digital. De la computadora y la realidad virtual a la fabricación y el mundo real. La impresión se hace con la sopladura de materiales en capas sucesivas. Las tintas, en estos casos, son plásticos, metales, vidrios y aserrín o madera.
Estas tecnologías están modificando las interacciones de las compañías con sus clientes. La IA, por ejemplo, permite detectar el comportamiento de los clientes a través de cientos o miles de ventas y redirigir así los esfuerzos de marketing o ventas. Por ello, el informe sugiere evaluar si la firma tiene una estrategia y procesos de innovación, si es posible cuantificar el impacto económico de las nuevas tecnologías, e imaginar cómo estaría la compañía de aquí a cinco o diez años.
Hugo Santana, manager de los negocios corporativos de Microsoft en Latinoamérica, dice a Pyme que la incorporación de tecnología, por sí sola, no sirve. Es necesario comprender los escenarios a futuro, explica.
Santana también previene: no en todo se requieren grandes inversiones, ni implica cambiar de la noche a la mañana. Hasta hace unos años, las empresas demoraban su tiempo incorporando tecnología, porque se debía ir paso a paso. Pero las nuevas tecnologías te permiten llegar a un nuevo escenario aunque tengas sistemas antiguos”, explica. Por eso -agrega- es fundamental contar con gente con mente abierta, que rompa los esquemas tradicionales. Lo disruptivo, que ya está llegando, genera más retos a las organizaciones.
EL CRONISTA