28 Jul Guías de abogados: Con esta sí, con esta no
Felicitaciones! Su firma ha sido nominada para el premio al mejor despacho intergaláctico y su abogado Lionel Hutz, candidateado al Petroccelli del siglo XXIII”.
Correos como estos, usualmente con otros nombres y con un “estimado, tenemos el agrado de anunciarle que” en lugar de “felicitaciones”, diluvian en el mercado jurídico e inundan casillas de firmas corporativas de mayor o menor porte.
La industria de los ránkings y guías internacionales de abogados y despachos no para de crecer, incluso a tasas mayores que las de las matrículas de los propios profesionales del derecho.
En general, se trata de propuestas no del todo transparentes, para las cuales hay que abonar una cierta suma para participar del certamen o publicación, o bien acceder directamente a la presea a cambio de una suma de dinero, generalmente en dólares o libras.
También existen versiones freemium (parte free, parte premium), que garantizan la presencia propia y de competidores en un formato básico, con participación destacada para aquellos que paguen por ella, y unas pocas que se fondean por otras vías menos endogámicas (encuestas encargadas por medios de comunicación, publicidad de universidades y suscripciones, entre otras variantes).
Lo cierto es que, pese a las críticas que suelen recibir, tanto metodológicas como éticas, en una industria altamente competitiva, hacerse un lugar en el mercado es todo un desafío y hay quienes (muchos) están dispuestos a los atajos que dan las cucardas entregadas por “jurados independientes” para escalar posiciones y ganar la simpatía de los potenciales clientes.
En términos generales, vale aclarar, esos clientes tienen más o menos en claro qué fixtures y reconocimientos vale la pena valorar, y qué otros deben ser descartados casi de plano.
Legales consultó a distintas firmas de las que interactúan a diario con este tipo de propuestas, para analizar dónde conviene estar y dónde, definitivamente, no.
Visiones
“Todos los días recibimos decenas de pedidos de publicaciones internacionales para participar de ránkings o que nos avisan que ganamos un premio”, reconoce Alfredo O’Farrell, presidente del directorio de Marval, O’Farrell & Mairal. En el 95% de los casos, dice, son publicaciones “poco importantes” en las cuales el estudio no participa.
Las publicaciones más reconocidas y, por tanto, las que sí entran en el radar de interés para la firma más grande la Argentina, son Chambers & Partners, Legal500, IFLR, Latin Lawyer250 y ManagingIP, ésta última en lo que refiere a propiedad intelectual.
En líneas generales, esos son los nombres que se barajan en todo el sector legal, y hay quienes suman, según la especialidad, las guías de Who’s Who Legal.
Desde otro de los grandes players del mercado local, Fernando Zoppi, socio de Pérez Alati, Grondona, Benites, Arntsen & Martínez de Hoz (h), coincide en que en los últimos años “han proliferado las publicaciones y guías legales, tanto a nivel nacional como internacional”.
Es clara la “bondad” de estas publicaciones, reconoce Zoppi: permiten la difusión de los despachos y sus abogados, sus logros, así como otras noticias relevantes de los despachos (nuevos socios, apertura de nuevas oficinas).
En muchos casos, también, permiten a las firmas y sus abogados exponer sobre temas de actualidad de una forma alternativa a la que ofrecen publicaciones especializadas más tradicionales.
En este último terreno, la filosofía de Pagbam es contribuir con contenidos de manera activa y regular con todas las publicaciones. “Incluso tenemos un equipo de profesionales que dedica la mayor parte de su tiempo a atender sus requerimientos. Apuntamos a participar en todas, con el foco en aquellas más consolidadas (Chambers & Partners, LatinLawyer, Legal500, GAR, IFLR, entre otras), haciendo una evaluación regular sobre aquellas que van ganando espacio de manera preponderante (LexLatin, por ejemplo)”, dice.
Firma mediana, con fuerte posicionamiento nacional e internacional, en Zang Bergel & Viñes tienen una postura bien clara de a dónde quieren estar y dónde no, señala con mirada estratégica su socia administradora, Carolina Zang.
“Nuestros esfuerzos, de tiempo y presupuesto, se centran en Chambers & Partners, Latin Lawyer, IFLR1000 (para lo que es mercado de capitales y M&A) y Legal 500. También participamos de premios específicos para mujeres en la profesión, como Chambers Women in Law Awards y Euromoney LMG Americas Women in Business Law Awards”, dice.
“Hay muchísimos ránkings, guías y premios en el mercado. La mayoría de las publicaciones del trade tiene una guía, un ranking o un premio para ofrecer. De hecho tanto el estudio como muchos de nuestros abogados están recomendados por varias otras guías y ránkings, algunas generales y otras de prácticas específicas”, agrega.
En términos generales, la aspiración de las compañías unipersonales o de aquellas compuestas por un puñado de profesionales que abordan el tema con criterio estratégico es compartir cartel en las principales guías con los líderes del mercado.
Eso, reconocen distintos abogados consultados, les permite captar “las migas que dejan los grandes estudios”, que por un tema de escalas y costos para estos perfiles de despachos pueden representar verdaderos banquetes.
EL CRONISTA