18 Jun El avión solar no pudo cruzar el Océano Pacífico
La anunciada hazaña del avión Solar Impulse 2 no fue tal. El aparato, que se disponía a atravesar el Océano Pacífico tras despegar de China rumbo a Hawai, debió aterrizar poco antes de la medianoche del lunes en Nagoya, Japón; una escala imprevista y obligada por las malas condiciones meteorológicas que encontró en su trayecto hacia el este.
“En ruta hacia Nagoya, decepcionado de no poder proseguir, pero lleno de agradecimiento hacia las autoridades japonesas por su apoyo” escribió en su cuenta Twitter el piloto suizo del avión, André Borschberg, de 62 años. “Las condiciones meteorológicas se deterioraron. ¡Hemos decidido llevar a cabo un aterrizaje intermedio en Nagoya!”, habían anunciado previamente los organizadores de la expedición. Bertrand Piccard, que se alterna con Borschberg a los mandos del avión, había declarado que “atravesar un frente activo con escarcha, lluvia, turbulencias… no está previsto para nuestro avión. Vuela lentamente, es sensible a las turbulencias y necesita del sol para recargar sus baterías.”
El Solar Impulse 2 despegó el domingo desde Nankín (este de China) para cubrir la etapa más larga y peligrosa de su vuelta al mundo, en la que el suizo debía pilotar en solitario durante seis días y seis noches. El vuelo ya había sido aplazado varias veces debido al mal tiempo y desde el 21 de abril estaba bloqueado en esa zona china.
El avión, compuesto por alas recubiertas con más de 17 mil células fotovoltaicas, nunca sobrevoló un océano ni permaneció en el aire más de 24 horas, y planeaba afrontar la travesía del Pacífico durante 8500 kilómetros a una velocidad media de 50 a 100 km/h., a una altura media de 8400 metros sobre el nivel del mar y con variaciones térmicas de hasta 55 grados en la cabina monoplaza no presurizada.
Volverán a intentarlo. Piccard admitió: “La vuelta al mundo quizá no avanza tan rápido como querríamos, pero no estamos haciendo una carrera de velocidad. El objetivo es llegar.”
TIEMPO ARGENTINO