14 Feb Retiros detox
Por Teresa Sofía Buscaglia
¿A lguna vez te imaginaste estar frente al mar haciendo yoga, meditando y respirando el oxígeno limpio del bosque? Todo eso combinado con alimentación saludable y buena música relajante. Algo ha cambiado en los últimos años y mucha gente se alejó de pensar las vacaciones como ese período para olvidarse de dietas y horarios, y darse permiso para desarreglos, y las ve como el momento ideal para reordenar su cuerpo y espíritu, mejorar la alimentación, comenzar una actividad física y darse espacios de soledad para meditar y reflexionar sobre su vida, sobre lo que desea sanar y mejorar.
EN LA COSTA ATLÁNTICA
“En noviembre participé de un retiro de 3 días en la playa y estuvo buenísimo. Me desconectó la cabeza, Hacer yoga, comer sano y meditar en un lugar tan lindo fue mágico. Jamás haría yoga sola, pero en grupo y dirigidos por alguien que te hace sentir bien fue distinto. Elegir las vacaciones para hacer algo así y empezar a mejorar el estilo de vida. Este tipo de limpieza ayuda en lo físico y en espiritual”, relata Florencia Robles, una diseñadora gráfica que, desde hace 2 años, hace yoga booty ballet, una variedad de esta disciplina oriental que incluye danza y es furor en Estados Unidos.
Dafne Shilling junto con su novio, chef de alimentación consciente, ofrecen en Mar de las Pampas, jornadas de desintoxicación en las que incluirán clases de estiramiento y respiración en el bosque, yoga frente al mar, un almuerzo natural y talleres de cocina. Estos Días Detox se realizan previa inscripción, durante enero y febrero, a pedido de muchos turistas que ya reservaron su lugar al enterarse de esta modalidad.
Durante unos días, las personas asisten a sesiones de yoga y meditación, acompañados de alimentación muy sana y energizante en base a comidas sin harinas ni lácteos ni azúcares. La idea es hacer una depuración del cuerpo y sanar el espíritu, en una profunda introspección, rodeados de un ambiente natural y bello.
Si bien la oferta de estas experiencias se multiplica con una gran variedad de actividades, todos tienen el mismo objetivo: reordenar prioridades, mejorar la calidad de vida y generar hábitos más saludables que puedan sostenerse en el tiempo. Los beneficios son tan buenos que se trasladaron a muchos centros turísticos tradicionales, en la Argentina y Uruguay.
“Creo que es una necesidad mundial. Cada vez hay más contaminación de todo tipo (ambiental, emocional), alimentos procesados, cargados de pesticidas, agroquímicos, aditivos y modificados genéticamente. Esto viene acompañado de desinformación, enfermedades, incremento del gasto público destinado a la salud y sufrimiento en un mundo desconectado de lo natural”, sostiene Laila Sibello, una arquitecta de 40 años, marplatense, que desde hace 6 cambió su estilo de alimentación por la necesidad de sentirse mejor.
Era vegetariana y se convirtió al veganismo. Al darse cuenta de la poca oferta que tenía Mar del Plata en ese tipo de productos, desarrolló su emprendimiento. Allí organiza retiros desintoxicantes y prepara viandas de alimentación sana para los que veranean en la costa y desean empezar con hábitos más sanos. Durante este mes hace retiros que incluirán clases de yoga por la mañana temprano, meditación y prácticas respiratorias por la tarde, más comidas para todo el día basadas en una alimentación fisiológica.
Todas estas propuestas varían en estilos, cantidad de días, con pernocte o sin él, en la intensidad de las actividades así, como también, en sus costos. ¿Qué lleva a que cada vez haya más gente interesada en invertir sus días de vacaciones en un plan saludable para sentirse mejor?
Rita Corigliano es Counselor y analiza esta tendencia como consecuencia de vivir en un tsunami de obligaciones, corriendo en pos de satisfacer necesidades no siempre tan necesarias. Unas vacaciones que impliquen poner el foco en la armonía interior desde un cuidado integral de la persona permiten desintoxicarse y revitalizarse; incorporar nuevos hábitos que le den otra dimensión a nuestro estar en el mundo desde lo físico, lo mental y lo espiritual. “Así como habitualmente limpiamos la casa o el auto, hacemos orden de cajones y muebles, ¿por qué no hacerlo interiormente, aunque más no sea una vez al año? Hay que estar dispuestos al desafío de viajar al interior de nosotros mismos, que es el mejor recorrido turístico que podemos hacer para encarar la vida cotidiana”, reflexiona.
A pocos kilómetros de Pinamar, Villa Gesell no está ajena a esta movida, que representa el regreso al contacto del hombre con la naturaleza. Vanesa Barrera nació allí y en 2003, a partir de un problema de salud, se convirtió en crudivegana, lo que siente como la curación total de lo que la afectaba. “Desde el verano de 2012 trabajo en mi casa, que fue diseñada según el estilo de vida de los alimentos vivos: mucha luz y sol, lugar para hacer germinados y una despensa en lugar fresco y aireado.” Allí da talleres, hace retiros individuales y se pueden retirar alimentos por pedido. Durante el verano, la cocina se transformaba en un bar de batidos, jugos vivos y finger food crudivegana.
Ahora se mudó al Sur a emprender algo similar. Le dejó la posta a Paula Scilirrone, que con su empresa Ser Integral se encarga de la venta de alimentos naturales y organiza retiros detox durante todo el año. Esta temporada realiza jornadas de yoga y alimentación natural. Además prepara cuatro viandas diarias que consisten en jugos verdes, licuados energéticos y ensaladas con semillas, vegetales y germinados. De esta manera, los turistas que se inscriban podrán seguir con su dieta mientras disfrutan de sus vacaciones.
EN EL ESTE
En el caso de Uruguay, que goza de un entorno natural maravilloso, se puede encontrar una variedad muy rica de propuestas. En Punta del Este, Estancias Vyk ofrece un paquete de 7 días detox, con un cupo cerrado de asistentes, que disfrutarán de la belleza rural de José Ignacio con su propia costa de playa. Este lugar, uno de los predilectos de turistas estadounidenses y europeos, forma parte de paquetes internacionales detox, funcionando durante todo el año con una reserva que se realiza con varios meses de anticipación.
También hay propuestas más accesibles y de menos días, así como los que ofrecen un plan diario sin necesidad de pernoctar. Cecilia Vittola es médica e hizo cursos de especialización en alimentación viva y medicina china. Aplica todos sus conocimientos en los retiros desintoxicantes que organiza durante todo el año en Montevideo, Punta del Este y diferentes ciudades de Uruguay, y que repetirá durante el verano.
“Apuntamos a que la persona se conozca a partir de lo que come, que descubra los mensajes que le da su cuerpo y que utilice el alimento en beneficio propio, desde el punto de vista físico y espiritual. Cuidamos mucho el descanso, el ejercicio y el arte para potenciar al ser. Les damos herramientas como los talleres de cocina viva, para que pueda continuar con este estilo de vida al volver a su casa. Siempre viene bien un retiro para vibrar con personas que están en una sintonía similar”, explica.
Las sociedades evolucionan, cambian y sufren crisis que en el sentido griego de la palabra es algo positivo que lleva al crecimiento. Tanto en la Argentina como en el resto del mundo, algo está llamando a frenar un poco y reflexionar, meditar para disfrutar y ver con mayor claridad la vida.
LA NACION