Río de Janeiro para todo el mundo

Río de Janeiro para todo el mundo

Por Elaine Guerini
Locos símbolos de la cultura brasileña conquistaron hasta ahora reconocimiento para llevar la imagen del país a las pantallas de cine extranjero. Principalmente en una producción de Hollywood. Con excepciones como Carmen Miranda y Zé Carioca -a pesar de la visión americanizada de la actriz, con sus adornos y turbantes con frutas tropicales, y del personaje creado por Walt Disney, un papagayo vago y pícaro al que no le gusta trabajar.
“Rio”, largometraje de animación que estrenó el 8 de abril en los cines de Brasil, promete ir más lejos, funcionando en el mundo como una tarjeta postal de lujo de Brasil -más precisamente de Rio de Janeiro-. Dirigido por el carioca Carlos Saldanha, la película vende una imagen altamente positiva de la ciudad, apostando a los bellos paisajes (incluso tomas aéreas del Cristo Redentor), la sensualidad de los esculpidos cuerpos en la playa, la alegría del pueblo, la pasión por el fútbol, la diversidad musical y el esplendor del Carnaval.
El camino de esa superproducción hollywoodiana, con presupuesto estimado en u$s 80 millones, incorpora lo mejor de la ciudad, en especial sus atributos de exportación. Filmado en 3 D, Rio parece haber sido concebido como un antídoto contra las producciones extranjeras que despreciaron la imagen de Brasil, como Turistas (2006), donde una pandilla dedicada al tráfico de órganos roba y secuestra a universitarios estadounidenses.
Más recientemente, en la ComicCon del año pasado, Sylvester Stallone hizo un comentario infeliz al abordar la filmación de Los Mercenarios (2010) en Brasil. Podés explotar todo allí, y al final del día, ellos te dicen ‘gracias’ y te dan un mono para llevarte a casa, ironizó el actor, en la convención de historietas.
Gracias al éxito de las animaciones anteriores firmadas por Saldanha, como la franquicia La Era del Hielo (responsable por u$s 1.900 millones en las boleterías del mundo, con tres películas), el director tuvo total libertad para la realización de Rio. En el universo de la animación de alcance mundial, hay muchas películas que retratan diferentes culturas y pueblos, como Kung Fu Panda, que mostró un poco de China, y Ratatouille, con foco en París. Pero no hay casi nada que represente a Brasil. Por eso pensé que era hora de buscar inspiración en mis raíces, dijo Saldanha a Valor, en los estudios Fox, en Los Ángeles.
Con la máquina de publicidad de uno de los mayores estudios de Hollywood a su favor, “Rio” llega a la pantalla grande prácticamente del mundo entero. En el mercado estadounidense, los especialistas calculan un potencial de venta de entradas por u$s 150 millones. Sólo en abril, los cines de 23 países, incluyendo EEUU, Francia y Reino Unido, abren sus puertas a la historia de Blu, una arara azul macho que vive en una ciudad pequeña y helada de Minnesota hasta viajar a Rio, para aparearse con Jade, la arara hembra de la misma especie, en extinción.
A pesar de que Blu es un ave domesticada y miedosa, que nunca aprendió a volar, el protagonista embarca en una gran aventura en la capital carioca, su tierra natal (cuando era pequeño, fue capturado y llevado a Estados Unidos).
“Si pensamos en el alcance de mis películas, “Rio” definitivamente tiene potencial para hacer mucho por la imagen de Brasil, por toda la exposición que tendrá el país. Comenzando por la elección del título, “Rio”, mi intención con el filme fue enorgullecer al brasileño y brindar más conocimiento sobre Brasil en el exterior”, contó Saldanha, que aprovechó su prestigio para elegir a actores de primer nivel de Hollywood como dobladores en el original, en inglés. Quién presta la voz al protagonista Blu es Jesse Eisenberg (indicado al Oscar este año por Red Social).
Anne Hathaway y Jamie Foxx también componen el elenco -además de Will.i.am, líder de la banda Black Eyed Peas, encargado de la banda sonora. Todos visitaron Rio hace algunas semanas, durante la premiere mundial de largometraje, con la presencia de la prensa nacional y extranjera.
Sergio Sá Leitao, presidente de Rio-Filme, empresa vinculada a la Secretaría Municipal de Cultura de Rio de Janeiro, acompañó el proyecto desde febrero de 2009, cuando Saldanha llevó por primera vez su equipo a Rio.
Para reproducir la ciudad con autenticidad en el mundo de la animación, el director quiso que los profesionales de Blue Sky, compañía de animación donde trabaja, basada en Nueva York, visitasen el lugar y asistiesen al desfile de las escuelas de samba y al Carnaval en las calles. Desde que supo de la realización del filme, el alcalde de Rio, Eduardo Paes, colocó la intendencia a disposición de Blue Sky y de Fox, entendiendo la importancia del producto para la ciudad.
Para Leitao, el Rio que Saldanha llevó a las pantallas es diverso, heterogéneo y complejo, con todas sus virtudes y problemas. Más importante que enfatizar solamente las bellezas naturales y arquitectónicas, el filme transmite la sensación de que la vida en Rio, a pesar de lo malo (la pobreza, el tráfico de animales silvestres, etc), es una experiencia rica, intensa, plural y, muchas veces, feliz.
La animación representa la “imagen más positiva y de mayor alcance” que tuvo Rio en una producción internacional, según Steve Solot, presidente de Rio Film Commision, entidad que promueve los predicados de la ciudad en el exterior y facilita la realización de obras audiovisuales en Rio. El filme marcará una nueva visión global de la ciudad, lo que fácilmente ofuscará impresiones negativas del pasado. Y hará más: tocará a todas las generaciones, inspirándolas a descubrir la ciudad por sí mismos, señaló Solot.
Además de muchos turistas, “Rio” promete atraer a más equipos extranjeros interesados en filmar en Brasil. Estamos pasando al mundo la imagen de que Rio es una ciudad de cine, sea en el sentido figurado, sea en el literal, comentó Leitao, citando algunas producciones internacionales rodadas en la ciudad. Veloces y Furiosos 5 y La Saga Crepúsculo: Amanecer. Traer producciones de afuera significa atraer inversiones y generar renta y empleos, moviendo la industria audiovisual de la ciudad. Durante los diez días de filmación de Amanecer se gastaron en la ciudad u$s 3,5 millones, además de que la producción generó 500 empleos.
EL CRONISTA