El caribe de Cartagena de Indias

El caribe de Cartagena de Indias

Por Ángeles Lady
En las costas del mar Caribe se emplaza una ciudad que constituye, en sí misma, un trozo de la historia de Colombia: Cartagena de Indias. Desde su fundación en el siglo XVI y durante toda la época colonial española fue uno de los puertos más importantes de América. De aquellos años, justamente, data la mayor parte de su patrimonio artístico y cultural del que hoy disfrutan tanto locales como turistas. Allí, hay puntos imperdibles en una visita a la ciudad amurallada.
Parque de Bolívar: Situado en el centro de la ciudad, es el sitio más representativo de Cartagena. Allí se levanta la estatua del Libertador Simón Bolívar, y a su alrededor, el Museo de Oro, la Catedral, la Gobernación y la Biblioteca Bartolomé Calvo del Banco de la República. Sin dudas, es un punto clave para conocer la historia de la ciudad, su arquitectura y su cultura.
Ciudad amurallada: La ciudad vieja está cercada por un muro de 13 kilómetros. Entre otras curiosidades, esta zona de Cartagena resguarda 21 baluartes, 7 fuertes y varios monumentos que relatan gran parte de la historia de esta urbe. Apenas se atraviesa el arco ubicado debajo de la Torre del Reloj (la entrada original), la ciudad se convierte en un laberinto de balcones poblados de flores y calles empedradas en las que perderse es un verdadero placer.
Palacio de la Inquisición: Es un gran representante del estilo arquitectónico civil típico de la Cartagena de Indias del siglo XVIII. Sus paredes narran el paso de la Inquisición por esta ciudad colombiana entre 1610 y 1821. En este edificio, que funcionó como sede principal del Tribunal de Penas del Santo Oficio, hoy devenido en museo, se pueden recorrer las antiguas cárceles y cámaras de tortura.
Castillo de San Felipe de Barajas: Este fuerte militar, construido en 1536 y ampliado hasta 1657, es la construcción más grande que los españoles hicieron en América. El castillo, antiguamente conocido como San Lázaro (por la colina sobre la que se ubica), fue un lugar de protección y un sitio estratégico desde el que se avistaban las invasiones por tierra o desde la Bahía de Cartagena. Desde allí se obtiene una de las mejores vistas de la ciudad.
Cerro de la Popa: Es el punto más alto de la ciudad, y cuenta con una vista privilegiada. Sobre este cerro se pueden visitar la Iglesia y el Convento de Nuestra Señora de la Candelaria (patrona del distrito de Cartagena), dos edificios coloniales construidos entre 1609 y 1611, que deslumbran a los turistas por su belleza y su arquitectura.
Las Bóvedas: Construidas a mediados del siglo XVIII en el sector norte de la ciudad amurallada, la utilización de estas bóvedas fue exclusivamente militar, ya que sirvieron a los españoles como cuarteles y, posteriormente, como cárceles. Hace unos años fueron restauradas y acondicionadas, y en su interior actualmente funcionan galerías de arte y locales de artesanías y souvenirs.
Club de Pesca: Es uno de los mejores restaurantes de la ciudad. Además de sus preparaciones, otro de sus atractivos es su amplia terraza sobre la bahía para disfrutar de las vistas hacia la zona antigua. Sus platos típicos son a base de pescados y mariscos, y por lo general, los fines de semana hay música en vivo para animar la velada.
Café Havana: Este pequeño bar retoma la hermandad que une a la ciudad cubana de La Habana con Cartagena de Indias. Todas las noches, en este localcito hay buena música en vivo, preferentemente rumba, y ofrecen cócteles muy diversos a base de ron, con el clásico mojito como especialidad de la casa.
Plaza de Santo Domingo: Se puede recorrer en cualquier momento del día, aunque cuando cae la noche el ambiente se torna muy especial, con sus faroles iluminando cada rincón y los bares y restaurantes circundantes que ofrecen platos y tragos típicos.
Isla Rosa: Es una propuesta de lujo en medio del Mar Caribe (www.islarosa.com). Se trata de una isla privada sobre la que se ubica una casa de piedra, muebles de madera rústica y una piscina natural que desemboca en el mar. Cuenta con tres habitaciones con capacidad total para alrededor de diez personas y el servicio es excelente.
EL CRONISTA