
27 Aug Carlos Felice en el Forbes Summit: “La inteligencia social es el complemento indispensable de la inteligencia artificial”
En el Forbes Summit Reinventando Argentina, el presidente de OSPAT y la UTTA, Carlos Felice, llamó a la implementación de un nuevo concepto necesario para la mejora en el mercado laboral: la inteligencia social. Planteó que el verdadero diferencial del país está en valorar el talento argentino para potenciar la capacidad de adaptación a los entornos mediados por algoritmos y construir un futuro laboral con flexibilidad e inclusión.
El presidente de la Obra Social del Personal de la Actividad del Turf (OSPAT) y de la Unión de Trabajadores del Turf y Afines (UTTA), Dr. Carlos Felice, participó recientemente del Forbes Summit Reinventando Argentina, uno de los encuentros más influyentes del país en materia de economía, innovación y liderazgo. En su intervención, el dirigente abrió un debate central para el futuro de la Argentina: el impacto de la inteligencia artificial en el mercado laboral y la necesidad de reforzar la inteligencia social como motor para adaptarse a los avances de la IA.
Felice sostuvo que la inteligencia artificial representa uno de los cambios más disruptivos de la historia contemporánea y que ya está transformando múltiples sectores: desde la industria y la logística hasta la salud, la educación y los servicios profesionales. “La necesidad del desarrollo de habilidades, hoy se contemporizan en equipos que trabajan en una misma empresa. Es decir, hoy coexisten las personas de 60 años con las personas de 20 años. Son culturas laborales diferentes con desafíos diferentes, que van desde el conocimiento tecnológico o la implementación de la inteligencia artificial, hasta las viejas prácticas laborales”, señaló.
El Dr. Carlos Felice advirtió que la verdadera competitividad de nuestro país no se definirá por el grado de automatización que alcance, sino por su capacidad de potenciar lo humano. En ese sentido, destacó que la inteligencia social —las habilidades blandas como la empatía, la creatividad, el liderazgo, la colaboración y la construcción de confianza— será el factor decisivo que permitirá a la Argentina diferenciarse y aprovechar las oportunidades de este nuevo contexto global.
“En los últimos años siempre ha habido una especie de pensamiento mágico respecto del mundo laboral, está comprobado que hubo reducción del empleo, menos horas de empleo por ejemplo en Francia, donde se ha generado un pluriempleo y no dio resultado. Por el contrario de lo que se piensa, la educación ya está siendo aplicada de manera colaborativa, lo que nos lleva a pensar en cohesión y colaboración empática frente al avance tecnológico.”, enfatizó Felice.
El impacto de la Inteligencia Artificial en el mercado laboral
El presidente de OSPAT insistió en el impacto real que tiene la inteligencia artificial en el mercado laboral. “Salvo algunas tareas, como quien corta el pelo o entrena caballos de carrera, es decir tareas muy manuales, la innovación tecnológica afecta profundamente el mundo del trabajo. Por supuesto que en países, sobre todo de América Latina, estos procesos parecen todavía lejanos. Si hablamos de cambios en salud, la longevidad, la inmunoterapia, alcanzar los 120 años de vida, estudiar o cambiar el genoma, son cambios que requieren hábitos culturales, pero además y principalmente, tener dinero.”, remarcó.
Para Felice, es clave tener capacidad económica para garantizar la accesibilidad a estos cambios laborales para todos los argentinos.
Salud, educación y protección social: bases del mercado laboral
Desde su doble rol al frente de OSPAT y la UTTA, Felice advirtió que el futuro del trabajo no puede analizarse de manera aislada. “En las organizaciones debe haber cohesión tanto de lo que es la inteligencia artificial, porque definitivamente la IA hoy está atravesando ya procesos cognitivos y entonces, si no le das la empatía de la inteligencia social a la organización, eso desborda. Por eso creo que el estado debe ocupar un rol fundamentalmente de educación. Esa educación debe estar dirigida a la adaptación de los procesos de transformación que ya se están dando, justamente para que el más afectado que es el más vulnerable, no se quede fuera del mercado laboral.”, afirmó.
En esa línea, enfatizó la necesidad de avanzar hacia un estado presente que garantice inversión en educación y empleabilidad, siempre de la mano de la inteligencia social como copiloto de los avances de la inteligencia artificial.
El desafío de la Argentina
La exposición de Felice en el Forbes Summit dejó planteado un desafío que excede lo coyuntural: la Argentina tiene la oportunidad de liderar en la región el debate sobre cómo integrar la tecnología con el talento humano. Para ello, es necesario articular políticas públicas, estrategias empresariales y compromisos estatales en una misma dirección: construir un país donde la innovación y la inclusión vayan de la mano.
“Existe un fenómeno emergente, que es esta intersección entre la inteligencia artificial y lo que yo denomino inteligencia social, donde en un mercado precarizado como el mercado laboral argentino, hay nuevos desafíos donde la inteligencia social va a ser quien pueda contener todo lo que implica la necesidad del desarrollo de habilidades que le permitan al empleado mantenerse dentro del mercado.”, aseguró.
Felice remarcó también que los jóvenes deben ser protagonistas de este cambio. La formación de nuevas generaciones con competencias digitales y sociales será clave para que la Argentina pueda insertarse en la economía global de manera sólida y sostenible.
Conclusión
La participación del Dr. Carlos Felice en el Forbes Summit Reinventando Argentina puso en primer plano una visión que combina innovación tecnológica y humanismo. “La inteligencia artificial seguirá transformando el mundo laboral, pero el futuro no se definirá únicamente por lo que las máquinas puedan hacer, sino por lo que nosotros decidamos construir con ellas.”, concluyó.
La propuesta de Felice se resume en una premisa clara: la inteligencia social es el complemento indispensable de la inteligencia artificial. Solo integrando ambas será posible atraer, formar y retener el talento que impulse a la Argentina hacia un futuro más justo, innovador y competitivo.