28 Jul Día Mundial de la lucha contra la Hepatitis: cómo prevenirla y detectarla
Las infecciones por hepatitis virales se han extendido y afectan a 400 millones de personas en todo el mundo, más de 10 veces el número de personas infectadas con el VIH, indicó la Organización Panamericana de la Salud. A nivel mundial, alrededor de 1.4 millones de personas mueren cada año a causa de ésta enfermedad y se estima que sólo el 5 % de las personas con hepatitis crónica sabe que tiene la infección y menos del 1% de los afectados tiene acceso al tratamiento.
La hepatitis es una inflamación del hígado causada generalmente por una infección, que puede ser viral, medicamentosa o autoinmune:
Dentro de las virales están la llamadas A, B, C, D, E y hay otras virósicas menos frecuentes, como las del virus Epstein- Baar o Citomegalovirus.
Las medicamentosas llevan ese nombre porque que pueden ser producidas por cualquier medicamento, inclusive por la herboristería no alopática.
Cuando no es viral ni medicamentosa puede ser autoinmune.
Este día se creó para fomentar la toma de conciencia sobre las hepatitis virales y las enfermedades que causan, para contribuir a eliminarlas. La fecha elegida corresponde al nacimiento del doctor Baruch Samuel Blumberg, quien descubrió el virus de la Hepatitis B, explicaron desde el servicio de Virología del Hospital Francisco Javier Muñiz, que atiende unas mil consultas por mes.
La importancia de la detección temprana
En la Argentina, las hepatitis afectan a unas 900 mil personas y especialistas advirtieron que 6 de cada 10 argentinos desconocen que son portadores del tipo C de la patología, que es curable en el 95% de los casos.
La Hepatitis C, que se detecta mediante un test y no se previene por vacunación, afecta a 400 mil personas en el país, reportó la Asociación Argentina para el Estudio de las Enfermedades del Hígado (Aaeeh) en un informe difundido en el marco del Día Mundial de Lucha contra las Hepatitis Virales.
La patología en su tipo C constituye la principal causa de cirrosis, cáncer de hígado, falla hepática y trasplante de hígado, por lo que especialistas destacaron la importancia de su detección en forma temprana para evitar daños sobre el órgano.
El presidente de la Aaeeh, Ezequiel Ridruejo, explicó que el número de personas afectadas por la hepatitis C “es equivalente a 4 ó 5 estadios de fútbol repletos”.
“Son cientos de miles de personas que no saben que tienen una enfermedad grave que va ocasionándoles daño irreversible en su hígado y puede desencadenar cirrosis, falla hepática, cáncer, otras afecciones no hepáticas y necesidad de trasplante”, advirtió el especialista.
En ese sentido, recordó que la Organización Mundial de la Salud ( OMS ) estableció como objetivo lograr su erradicación para 2030, a raíz del problema que representa para la salud pública.
“Es una enfermedad que no da síntomas, entonces es necesario salir a buscar a los portadores del virus y encontrarlos”, expresó Ridruejo, y manifestó que “se necesita el apoyo de todo el sistema de salud. Los médicos deben solicitar dentro de los análisis de rutina el test de la hepatitis. Y debe haber disponibilidad de los reactivos para efectuar el test en los hospitales y centros de salud de todo el país”.
Cómo prevenir las Hepatitis A, B y C
En el caso de la hepatitis A y B, existen vacunas para prevenirlas, que forman parte del Calendario Nacional de Vacunación, mientras que no hay vacuna contra la hepatitis C. Frente a esta realidad, además de la aplicación de las dosis indicadas en el esquema sanitario vigente, Silvio Luis Aguilera, Director Médico de Vittal, dijo qué hay cuestiones que contribuyen a prevenir la enfermedad y su propagación:
La hepatitis B no se transmite por medio del agua o la comida, ni tampoco por estornudar, abrazar, toser. En este caso y en el de la hepatitis C, lo que hay que tener en cuenta es:
Evitar compartir artículos personales tales como cuchillas de afeitar o cepillos de dientes.
No compartir agujas para inyectarse drogas u otros equipos para drogas (como pajillas para inhalarlas).
Limpiar los derrames de sangre con una solución que contenga 1 parte de lavandina por 9 partes de agua.
No hacerse tatuajes ni perforaciones (piercing) en el cuerpo con instrumentos que no sean descartables o esterilizados.
Usar preservativo.
En el caso la hepatitis A, para evitar el contagio hay que seguir las siguientes recomendaciones:
Evitar los alimentos y el agua que no estén limpios.
En caso de estar en contacto con alguien infectado, lavarse bien las manos después de usar el baño y cuando entre en contacto con la sangre, las heces u otros fluidos corporales de la persona.
LA NACION