07 Apr “El Chacal”: un nuevo juicio en Francia por un atentado cometido hace 40 años
Un nuevo juicio contra el venezolano Ilich Ramírez Sánchez, alias Carlos, acusado de un atentado con granadas en París en 1974, que causó dos muertos y decenas de heridos, comenzó ayer en la capital francesa.
Carlos, de 67 años, también conocido como “El Chacal”, será juzgado durante quince días por un tribunal en lo penal competente para juzgar “actos de terrorismo”. Vestido con una elegante chaqueta negra y un pañuelo rojo de bolsillo, Carlos ingresó a la sala de audiencias sonriente, saludando con un beso en la mano a su abogada, Isabelle Coutant-Peyre, con quien contrajo matrimonio religioso en 2011, antes de lanzar un beso a los periodistas.
El legendario líder del terrorismo internacional de los años setenta y ochenta se presentó ante los jueces, en francés, como un “revolucionario de profesión”. Encarcelado en Francia desde que fue capturado en 1994 en una operación del espionaje francés en Sudán, este antiguo adepto del marxismo cumple ya dos condenas a cadena perpetua por un triple homicidio en 1975 en París y cuatro atentados cometidos en Francia.
El 15 de marzo se sentó nuevamente en el banquillo de los acusados, esta vez por un atentado con granada cometido el 15 de septiembre de 1974 contra una tienda en pleno centro de París que se saldó con dos muertos y 34 heridos.
“El Chacal” nació en Venezuela en 1949. Hijo de un acaudalado abogado militante del Partido Comunista, Carlos y su hermano Vladimir fueron bautizados en honor en Lenin. Luego de empezar a militar en las juventudes comunistas venezolanas, se traslada a Moscú y se enrola en la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos Patricio Lumumba. Por su afición a las fiestas plagadas de mujeres y alcohol, Ramírez Sánchez fue expulsado de la universidad, pero fue rápidamente reclutado al Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), la organización para la cual terminaría luchando en Medio Oriente, África y Europa.
Luego de un triple asesinato que cometió en Francia en junio de 1975 (por el que actualmente cumple cadena perpetua), Ramírez Sánchez se escapó del país y reapareció en diciembre de ese mismo año en Yemen del Sur, donde encabezó la operación que lo convertiría en uno de los hombres más buscado del planeta. El venezolano lideró un comando de asalto contra la sede oficial de la Organización Exportadores de Países Petroleros (OPEP), donde tomaron 42 rehenes, entre los cuales se encontraban ministros de Energía de todos los países miembros. Además de darlo a conocer por su nombre de guerra Carlos, el diario inglés The Guardian se refiere a él como “El Chacal”, debido a que entre sus posesiones se encontró una copia de la novela “El día del chacal”, de Frederick Forsyth.
La carrera de Carlos llegó a su fin en la madrugada del 15 de agosto de 1994, cuando fue secuestrado en Jartun, la capital de la República de Sudán, por su propia escolta armada.
Fueron ellos quienes entregaron al terrorista a las autoridades francesas, quienes se encargaron de sacarlo de Sudán de incógnito y llevarlo a Francia, donde sería sometido a juicio.
Sentado tras un cristal blindado, acompañado de tres policías, Carlos intervino en numerosas ocasiones, denunciando la “falta de democracia en Francia”, en comparación a su país, Venezuela, donde, afirmó, existe “con la revolución bolivariana, una verdadera democracia participativa”.
Durante años, recibió el apoyo del ex presidente Hugo Chávez. Ahora, podrían condenarlo a una nueva cadena perpetua.
CLARIN