Lange; la imagen eterna de Río 2016

Lange; la imagen eterna de Río 2016

Por Claudio Cerviño
Los Juegos Olímpicos de Río tuvieron grandes momentos, entre despedidas, conquistas y frustraciones entre los más de 10.000 atletas participantes. Concepto que aplica, también, para el deporte argentino. Pero a la hora de elegir una imagen, nos quedamos con la de aquella tarde en Marina de Gloria, cuando desde un gomón le avisaron a Santiago Lange y a Cecilia Carranza Saroli que “sí”, que “eran oro” en la Clase Nacra 17. A los 54 años, con casi 30 de ellos en participaciones olímpicas, y después de haber ganado la batalla personal de su vida que hasta le significó la pérdida de un pulmón, Lange se quitaba la espina que tenía desde Atenas 2004 y Pekín 2008, con sendos bronces cuando disponían de chances de lograr la medalla dorada junto con Camau Espínola, en la Clase Tornado.
antiago-lange-y-cecilia-carranza-celebran-el-oro-para-argentina-en-la-clase-nacra-17-reutersEl primer festejo de Lange permite recordar aquella imagen de Héctor Alterio en Caballos salvajes y la frase inmortalizada: “¡La puta que vale la pena estar vivo!”. Seguramente eso sintió Santiago al coronar un viejo anhelo. Seguramente lo sintieron también familiares y amigos, que sabían exactamente lo que estaba experimentando en ese instante. Y en definitiva lo sintieron todos los que tuvieron el privilegio de estar ahí para verlo y los que lo siguieron, vibraron y se emocionaron por TV. Tenía mucha razón Alterio y Río 2016 nos lo recordó.
LA NACION