22 Jul Manu, el estratega
Tenía que tomar una decisión sobre su futuro y Emanuel Ginóbili la tomó nomás. Por primera vez en su carrera en la NBA, el argentino decidió no optar por el segundo año de contrato que tenía firmado con San Antonio y quedó libre el jueves 30 de junio. Claro que las mismas fuentes que adelantaron la información desde Estados Unidos, seguramente dateadas por la franquicia texana, ya habían asegurado que el argentino seguiría un año más en los Spurs. De todas maneras, esta decisión debe analizarse como parte de una estrategia.
Durante toda su carrera, Ginóbili no tomó una decisión sin pensarla muy bien. Su paso a paso ha sido tan constante que no podía ser menos en esta ocasión, sobre todo teniendo en cuenta sus 14 temporadas en la NBA y el gran desafío que tiene por delante en sus últimos Juegos Olímpicos con Argentina.
No tenía presión Ginóbili a la hora de definir su postura sobre la cláusula contractual con San Antonio. Si hubiera optado por su segundo año de contrato por 2.900.000 dólares, eso no querría decir nada, porque podría haberse dado el caso de que después de Río 2016 Manu cambiara de parecer. Lo mismo sucede ahora: que Ginóbili haya entrado al mercado de agentes libres a partir del 1° de julio no implica que tenga que resolver enseguida dónde jugar. Es más, tanto desde el sitio The Vertical como desde la web de ESPN, periodistas conectados con las franquicias de la NBA dejaron trascender que el argentino seguiría un año más en la franquicia texana.
Ginóbili, que cumplirá 39 años el 28 de julio, pasó el Día del Padre con papá Jorge y su hermano Leandro. Y dejó en evidencia sus ganas de preparar bien los Juegos Olímpicos con la Selección al enviarle un mensaje de felicitación a Andrés Nocioni por su nuevo título con Real Madrid.
“Felicitaciones por otro título más. ¡Tremendo! Ahora festejá un ratito y apurate a descansar que te queda poco”, escribió en su cuenta de Twitter, pensando en que el santafesino se reuniría con él el domingo 3 de julio, en el arranque de la concentración de la preselección argentina.
Ginóbili podrá resolver cuando le plazca qué hacer de su futuro. Por ahora es tiempo de esperar que Manu se calce la celeste y blanca y sea olímpico una vez más.
CLARÍN