01 Jul De Benedicto XVI al Papa: “Su bondad me impacta, me siento protegido”
Por Elisabetta Piqué
ROMA.- “Su bondad, desde el primer momento de la elección, en cada momento de mi vida aquí, me impacta. Más que en los Jardines Vaticanos, con su belleza, su bondad es el lugar donde yo habito: me siento protegido.” Benedicto XVI habló ayer por primera vez en público desde su renuncia, el 11 de febrero de 2013, y elogió a su sucesor, Francisco , que organizó en el Vaticano una sobria ceremonia para conmemorar los 65 años de su ordenación sacerdotal.
Para participar de este acto, Benedicto, que vive en el monasterio Mater Ecclesiae, en los jardines del Vaticano, volvió por primera vez a la Sala Clementina del Palacio Apostólico. Cuando llegó, al mediodía, fue recibido con aplausos por los miembros de la curia romana.
En un breve discurso, Francisco volvió a elogiar a su predecesor, luego de que en la conferencia de prensa que brindó en el vuelo de regreso de Armenia dijera que “hay un solo papa” y definiera a Benedicto XVI como el hombre que le custodia “las espaldas y los hombros con su oración”.
Destacó, de hecho, cómo hoy Benedicto XVI “sigue sirviendo a la Iglesia” rezando desde el monasterio Mater Ecclesiae y contribuyendo con “vigor y sabiduría” a su crecimiento.
Tal monasterio, subrayó, es todo lo contrario a “esos rinconcitos olvidados en los que la cultura del descarte tiende a relegar a las personas cuando, con la edad, sus fuerzas disminuyen”.
El papa argentino agregó que desde allí le llegan “una tranquilidad, una paz, una fuerza, una confianza, una madurez, una fe, una dedicación y una fidelidad” que le hacen “mucho bien” y les dan “mucha fuerza” a él y a toda la Iglesia.
“Y me permito también decir que de usted también me llega un sano y alegre sentido del humor”, agregó.
Terminado su discurso, Francisco se acercó a Benedicto, a quien abrazó con mucho afecto y calidez, luego de estrecharle las manos. La ceremonia, en la que también pronunciaron discursos el cardenal Gerhard Müller, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, y curador de su opera omnia, y el cardenal Angelo Sodano, decano del Colegio Cardenalicio, culminó con palabras de agradecimiento de Benedicto XVI.
Tras destacar su bondad, el papa emérito, de 89 años, también le auguró a Francisco que “pueda seguir adelante con todos nosotros sobre esta vía de la misericordia divina, mostrando el camino de Jesús, hacia Jesús, hacia Dios”.
La última aparición pública de Benedicto XVI había sido el 8 de diciembre pasado, cuando presenció la inauguración del Jubileo de la Misericordia, con la apertura de la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, en el Vaticano.
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