No hay que ser torero…

No hay que ser torero…

Por Silvina Marino
El nombre puede resultar chistoso, jocoso, o novedoso, al menos, aplicado a un deporte. Pero nada de esto es así. El volteo una de las disciplinas hípicas con mayor crecimiento en los últimos años y se trata de un deporte que tiene alto nivel de competencia internacional. Puede hacerse de forma individual con el caballo, en duplas o en equipos. Uno de sus representantes locales destacados es Juan Manuel Cardaci, que tiene 23 años, está terminando la carrera de Ciencias Biológicas en la UBA y que trabaja como entrenador de gimnasia artística.
Cardaci compitió en Estados Unidos, Francia, Alemania, República Checa y Eslovaquia. Y, en el último, obtuvo el primer puesto en la competencia individual masculina, el año pasado. “De chico mis papás me llevaron a una colonia de vacaciones en mi ciudad, Hurlingham, y ahí conocí el volteo. Durante mi secundario entrené gimnasia artística y, cuando empecé la facultad, me enteré por internet de este lindo deporte que combina la gimnasia y los caballos. Entonces, me comuniqué con la entrenadora Yanina Alvarez”, cuenta.

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Si bien, a simple vista (basta con chusmear en YouTube) la actitud guapa y la pose parecerían tener algo que ver con la tauromaquia, nada más lejos de lo sanguinario e irrespetuoso de los derechos de los animales de las corridas de toros. “Practico este deporte porque me fascinan los animales, desde que empecé a entrenar me comenzaron a interesar más y más los caballos. Siento que es muy terapéutico realizar actividades con animales inteligentes que pueden captar nuestras emociones y transmitirnos las de ellos, también”, agrega Juan Manuel. Y sigue: “La mayoría de nuestros caballos suele tener chicos colgados de sus patas o acariciándoles la cola o la nariz sin ningún riesgo para el animal ni para el nene. De hecho, me parece bastante beneficioso para ambos, por el hecho del contacto”.
–¿Qué opinan tus amigos del volteo? ¿El nombre?
–Mis amigos del colegio y de la facultad encuentran muy gracioso el nombre y hacen chistes. Pero a la mayoría le fascina una vez que se los muestro. Me preguntan cuándo va a haber otra exhibición.
–¿Podés salir de joda o la disciplina no te lo permite?
–Puedo. Como este deporte no llegó a los juegos olímpicos aún, no se lo considera profesional. Sólo entreno 4 días por semana. Descanso los viernes y guardo la salida para los sábados. Igual, hay períodos de precompetencia mucho más agotadores.
CLARIN