24 Oct Comer en sobrecitos o cinco veces al día, las dietas de moda
Por Diego Geddes
Antes y después. Las fotos de la reina Máxima y de Amado Boudou son la prueba más evidente de una dieta exitosa. Cada uno con su método, lograron cambiar su imagen y también poner de moda sus dietas aunque, como sucede históricamente con los métodos para adelgazar, surgen opiniones a favor y en contra de estas dietas estrictas. Boudou logró bajar 17 kilos y Máxima perdió más de 10 y estilizó notablemente su figura.
La del vicepresidente es conocida como “la dieta de los sobrecitos”, porque así es como viene envasada la comida que los pacientes ingieren durante las primeras fases del tratamiento. En realidad, el método se llama Pronokal, nació en España y llegó a la Argentina en 2013. Ya la hicieron unos 4 mil argentinos, que lograron bajar entre 8 y 10 kilos por mes. “No es algo que pueda hacer cualquier persona y no se trata simplemente de alimentarse con los famosos sobrecitos”, aclara Gustavo Sojka, director de Pronokal. “Primero se hace un análisis clínico con un médico y después hay un seguimiento de cada paciente, con un equipo multidisciplinario”, dice Sojka. En etapas siguientes, los sobrecitos (valen 50 pesos, se consumen fríos o calientes y vienen con diferentes sabores, desde té o café hasta tortillas, nuggets o arroz con leche) se empiezan a combinar con verduras, frutas y carnes magras. “Si el paciente en medio del tratamiento consume hidratos de carbono u otras comidas fuera de la dieta, el hambre vuelve –advierte la Dra. Cafardo–. Por eso si durante la consulta el paciente nos refiere que no tiene hambre, quiere decir que está haciendo bien el tratamiento, en cambio si tiene hambre es porque estuvo comiendo de más. Al revés de lo que muchos pensarían”. Además de Boudou, la dieta de los sobrecitos la hicieron Nancy Dupláa, Marcela Tinayre y Matías Alé, entre otros famosos.
La de Máxima es conocida como New Fysic. Consiste en un menú diario de 5 comidas de pequeñas raciones para calmar la ansiedad. Sin grasas, ni carbohidratos, sin azúcares y con mucho cuidado, el plan sí incluye galletas de fibras, pechugas de pollo, verduras de hojas verdes, y además un complemento de proteínas y aminoácidos, que también se consumen en pescados, leche y huevos.
“Es un plan muy saludable, porque se hace a largo plazo, se bajan muchos kilos y apunta también a cambiar los hábitos. Lo ideal es bajar el 1% de tu peso por semana”, explica Fabiana González, de Dietaclub.
Según los especialistas, esta dieta está pensada para producir “cetosis”: al no tener hidratos de carbono para combatir, el cuerpo quema la grasa acumulada. Ese proceso es justamente una de las principales críticas a estas dietas.
Máxima dijo que además le daba mucha importancia al deporte: “Nado y juego al tenis con las niñas y mis desplazamientos privados en Holanda los hago en bicicleta. Además evito hidratos, grasas y azúcares añadidos. Le doy mucha importancia al desayuno, en el que tomo café, yogur y mucha fruta”.
CLARIN