“Mafalda remite a valores esenciales”

“Mafalda remite a valores esenciales”

Por Malva Marani
Debe haber pocos personajes de ficción a los que se les celebre el cumpleaños, así como son contados los elegidos, décadas después de su nacimiento, para seguir poniéndole su rostro a la cartuchera de un niño o mantener un lugar privilegiado en la biblioteca de casa. Mafalda, la pequeña intelectual y querida rebelde de clase media, que ya sopló las 50 velitas, es uno de esos casos, y su perdurabilidad, y también el éxito que le permitió traspasar fronteras, motivaron a la historiadora uruguaya Isabella Cosse a dedicarle su último libro. Así nació Mafalda: historia social y política (Fondo de Cultura Económica, 2014), un interesante recorrido por las cinco décadas que atravesó la tira y un análisis de los distintos sentidos que tuvo y tiene el personaje más famoso de Quino.
–Define a Mafalda como “un ícono argentino” y “una figura con una significación social, política y subjetiva ineludible a la hora de entender al país y los argentinos”. ¿Cómo adquirió ese lugar un personaje de historieta?
–Esa es, justamente, una de las preguntas constructoras de la tesis. La respuesta que da el libro tiene que ver, en primer lugar, con reconocer la creatividad del genio de Quino, pero también con su capacidad de dialogar con los procesos sociales, culturales y políticos que atravesaba la sociedad argentina, y principalmente sectores como la clase media y las generaciones jóvenes,
a comienzos de los años ’60. Otra cuestión tiene que ver con las significaciones y los usos que esta creación potente y genial permitió en términos de las reapropiaciones que le dieron distintos sujetos y que actualizaron la capacidad de la tira.
–Además de su arraigo nacional, la tira fue traducida a cerca de 20 idiomas. ¿En qué radica esa capacidad de trasvasar las fronteras nacionales?
–Creo que, si bien la tira tomaba fenómenos que referían a la sociedad argentina de los años ’60, como la rebelión juvenil, el antiautoritarismo y la modernización cultural de la clase media, también eran cuestiones comprensibles y decodificables, a partir de su propia realidad, para lectores de Europa y América Latina. Además, la historieta pone en juego dilemas que trascienden ese momento puntual, como la injusticia, la desigualdad, el autoritarismo o los conflictos familiares.
–¿Cree que hay algo propio del humor de Quino que también favoreció el éxito transnacional?
–El humor pone en juego la interpretación del otro y exige, para ser risible, que el otro pueda decodificar algo no dicho que, justamente al ponerse en juego en términos activos por parte de quien lee, produce risa. Y el humor de Quino es especialmente abierto en ese sentido: exige mucho de quien lee y, así, también facilita que un otro distinto pueda colocar su propia subjetividad, cultura y códigos en la tira para terminar de significarla.
–Sobre el final del libro se pregunta por qué la tira sigue con vida 50 años después. ¿A qué conclusión llegó?
–Mafalda se ha transformado en un lugar en el que la sociedad puede mirar las cosas que nos unen y vale la pena valorar. Me gusta hablar de mito porque, aun cuando no todos los grupos sociales son igualmente referidos en la tira, Mafalda se ha convertido en un personaje que remite a valores esenciales compartidos que nos explican en tanto comunidad.
Durante el proceso de realización de su libro, Isabella se dio el lujo de entrevistar a Quino, a quien le agradeció no sólo por el diálogo, sino también por permitirle reproducir las imágenes de sus dibujos. La investigadora del CONICET se asombró con el alcance político y cultural que fue descubriendo al investigar la historia de la tira y también fortaleció su convicción de que es posible contar la historia de un fenómeno reciente.
–Analiza un fenómeno cercano en el tiempo, ¿cómo se hace historia sobre lo reciente?
–La historia reciente va ganando un lugar más legitimado en nuestro país y América Latina. Siempre es difícil lidiar con sucesos que, más allá de cuándo hayan ocurrido, aún tienen significación en nuestro presente: uno puede estudiar la Independencia de un modo tal que ponga en juego cuestiones que son conflictivas hoy en día.
TIEMPO ARGENTINO