Una manera más segura de enviar correos

Una manera más segura de enviar correos

Por Esteban Schoj
El investigador adjunto del CONICET en el Instituto de Física de Buenos Aires (IFIBA, CONICET-UBA), Ezequiel Álvarez, desarrolló una página web que permite mandar mensajes confidenciales por Internet a través de un servidor seguro. Inspirado en la teoría de la mecánica cuántica, cuyo método de encriptación cuántica es infalible, Álvarez realizó un novedoso mecanismo para que el traspaso de información desde un emisor hacia un receptor sea lo menos vulnerable posible.
¿Cómo funciona? “En vez de mandar el mail, uno ingresa a un sitio web de servidor seguro y ahí escribe el mensaje. Lo que se logra es que en lugar de enviar el contenido en el cuerpo del correo de su cuenta de emails, lo que uno envía es un link que se genera con la información deseada dentro de ese link, que en el mismo momento en el que la información es abierta por el receptor, el servidor borra el mensaje del link y de cualquier otro lado, excepto de la pantalla de quien lo haya abierto”, explica Álvarez. Con esto, la ventaja que tiene el sistema es que el link se puede abrir una sola vez, por lo que si el destinatario argumenta no haberlo recibido, la posibilidad de que haya sido vulnerado es muy alta.
Según explica el investigador, cuando una persona le manda un mail a otra, surge el problema con la posibilidad de que ese mensaje sea interceptado y leído por un tercero sin que el receptor sepa que fue espiado. Para evitar esta situación se usa una analogía a una función de la encriptación cuántica que se llama colapso de la función de onda. “La función de onda –explica el especialista– es una forma de representar el estado físico de un sistema de partículas en mecánica cuántica, como por ejemplo los electrones, que podríamos imaginar como un ‘flujo’. A grandes rasgos, esta función sufre variaciones, colapsa, cuando se hace una observación o medición en alguna parte de un sistema. Por ejemplo, si A le envía a B un mensaje encriptado, pero en el camino C lo intercepta y lo lee, se modifica o colapsa la función de onda y el mensaje se borra. Ese es el principio que aplicamos para desarrollar este sistema: aprendemos de la mecánica cuántica de los electrones.”
Ya existen métodos matemáticos muy poderosos para encriptar información. Pero, a diferencia del desarrollado por Álvarez, requieren que las computadoras involucradas en el envío y recepción de la información estén preparadas para ese tipo de acciones. “Este método no tiene ese impedimento”, dice Álvarez y agrega que “es sencillo, simple y práctico, y bien hecho es seguro”.
Este académico trabaja en física cuántica y pensó este proyecto para ayudar a amigos y familiares en diferentes asuntos. Hay una versión beta funcionando y el CONICET está tramitando el patentamiento de la iniciativa. “Quiero que esto sea público y que esté disponible para todos”, se ilusiona Álvarez y explica que “es útil para mantener la privacidad en las comunicaciones, sabiendo que cualquier mail puede ser hackeado”.
Además, destaca que “no hay que instalar nada nuevo, sino que cada uno sigue utilizando su casilla de correo de siempre y sólo envía el link “que no expira hasta que no se abra. Para Álvarez, este software “le puede ser muy útil a las empresas y servir para seguridad nacional, pero sería necesario que el servidor seguro se encuentre dentro del país y que los enlaces de envío y descarga no salgan de la red local. Además se puede usar también para seguridad industrial, empresarial o personal.”
TIEMPO ARGENTINO