10 Sep Un mapa para navegar seguros
Por Ramiro Barreiro
Dios está en todos lados, pero atiende en Facebook. De ese modo habría que reformular el tradicional refrán si las provincias argentinas fuesen redes sociales. La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales (DNPDP) realizó el primer “Mapa Argentino de las Redes Sociales”, una iniciativa que volvió a trazar las fronteras internas del territorio nacional a partir de la cantidad de usuarios que tienen las principales páginas utilizadas en el país, según los últimos datos de la consultora Comscore.
En total, son siete las redes sociales que en la Argentina superan el millón de usuarios, aunque el liderazgo de Facebook es indiscutible: su penetración ronda el 90% de las personas que cuentan con acceso a Internet (16.087.000). Sin embargo, el informe de Comscore de 2013 ya advertía que surgían nuevas propuestas. Esa tendencia la lideran Instagram, Scribd y Pinterest.
“El mapa sirve para apreciar la importancia que cada red social tiene en el país, lo que permite trazar estrategias orientadas a responder a las necesidades reales de los argentinos, según el estado de situación actual”, dijo a Tiempo Argentino el titular de la DNPDP, el doctor Juan Cruz González Allonca.
Sin embargo, también se puede jugar a imaginar la identidad que cada provincia tendría. Por ejemplo, los 4.253.000 de tuiteros “del norte” que no paran de opinar son muy distintos a sus vecinos de Pinterest, unos 471 mil fotógrafos aficionados y no tanto. Ellos prefieren a los 877 mil litoraleños de Instagram, aunque por lo bajo los critican ya que estos se la pasan con el celular en la mano.
Entre esas dos “provincias” viven más de 2 millones de habitantes de Linkedin, los que más temprano se levantan, y tomando la Ruta 9 se puede conocer a los 8.850.000 ciudadanos de Taringa, tan contactados que funcionan como una “inteligencia colectiva”. Unos kilómetros al sur viven casi 300 mil solidarios de Change.org.
En este supuesto país, la Patagonia está mucho más habitada que en la realidad, por los 2.508.000 preguntones de Ask.fm; los 636 mil seductores de Badoo y 2.419.000 fanáticos de las diapositivas que viven en Slideshare. En nuestras Malvinas, vivirían 97 mil usuarios de Sónico.
González Allonca reveló que “el mapa surge por la necesidad de monitorear las nuevas redes sociales y servicios en Internet con el objetivo de proteger los derechos de los usuarios”. Los riesgos más frecuentes son revelar información personal como el domicilio o el DNI, que puede servir para efectuar fraudes o delitos. Otro caso típico es revelar en forma inconsciente movimientos de la familia. “Las nuevas tecnologías nos ofrecen oportunidades pero también riesgos”, resumió el funcionario.
El mapa también permite complementar el programa “Con vos en la web”, una iniciativa que empezó en 2012 “cuando vimos que los principales usuarios eran niños y adolescentes y que eran los que más datos compartían en Internet, se creó una página muy colorida y con mucho video rompiendo el estereotipo que tenía la Web del Ministerio de Justicia. Enfatizamos lo visual y lo conciso del mensaje porque identificamos que los chicos tienen una capacidad mucho más desarrollada que los adultos en el manejo formal de la tecnología. Pero también identificamos falta de desarrollo de las capacidades críticas y reflexivas acerca de los peligros.”
La dirección no tiene representación federal pero se apoya en otros organismos como los ministerios de Educación y Planificación, el programa Conectar Igualdad y la ANSES para realizar talleres en todo el país. De esa forma, llegan a los colegios y a las netbooks, y mediante videotutoriales, clases y charlas explican, entre otras cosas, que si bien las redes sociales se presentan como servicios gratuitos, obtienen como prestación datos personales que luego son usufructuados según sus conveniencias.
El funcionario también opinó que los medios de comunicación juegan un papel distintivo en la tarea reflexiva. “Muchos titulares dicen cosas del estilo ‘la conoció por Facebook y la violó’. Así se demoniza a la red social o al servicio, pero en realidad, la tecnología es un medio. Mi viejo me decía: ‘No charles con un desconocido en la calle.’ Esto es lo mismo. Las redes sociales acostumbran y se valen de charlar con desconocidos; entonces, la idea es apuntar a qué cosas contarle y qué cosas no porque los chicos no tienen una frontera clara entre lo que es online y lo que es offline. El plan Conectar Igualdad cerró la brecha digital. Nosotros estamos para cerrar la brecha generacional.”
TIEMPO ARGENTINO