13 Jul Cómo se le puede ganar a Alemania
No hay un partido igual a otro, ni siquiera un tiempo igual a otro según sostiene Alejandro Sabella.
En el fútbol todos se conocen y toman nota de cómo neutralizar al adversario. El ejemplo más claro fue el partido entre Argentina y Holanda que se pareció a una partida de ajedrez con escasa audacia. Son pocos los entrenadores que se equivocan groseramente con los planteos y le dejan el camino libre al rival.
Por eso es poco probable que Alemania se destape con otra catarata de goles contra la Argentina. El 7-1 frente a Brasil fue algo excepcional, en un lapso breve los alemanes hicieron todo a la perfección y los brasileños todo mal.
Con los antecedentes de ambos frescos la pregunta es: ¿cómo puede Argentina ganarle a Alemania?
La final está cerca y los dos tienen un largo camino recorrido en el Mundial por diferentes vías.
Alemania explotó ante Brasil. Sin embargo a lo largo del torneo pareció un equipo sólido, pero no perfecto. La goleada ante Portugal (4-0) en el comienzo del torneo lo llenó de confianza. Pero no le pudo ganar a Ghana (2-2) y con Argelia en octavos tuvo que ir al alargue para definirlo en un tenso desenlace (2-1).
En tanto Argentina, sin brillar y con los goles oportunos de Messi ganó el grupo, después superó a Suiza y a Bélgica siempre por un solo gol de diferencia. Empató con Holanda y pasó en los penales. Encontró rivales que no lo dejaron jugar de contraataque, que es lo que mejor le sale. Sobre todo en la época de los Cuatro Fantásticos . Pero con los partidos y los retoques encontró solidez en el medio y atrás.
Alemania tiene una mecánica que no negocia. Es práctico, no se entretiene con la pelota y del medio hacia adelante marca la diferencia con Thomas Müller, Klose, Kroos, Schweinsteiger y Ozil y del banco puede dar una mano determinante Schurrle quien entra para destrabar partidos. Además en el arco cuenta con Manuel Neuer un arquero-líbero impecable.
Parecería que Argentina tiene desventajas ante Alemania. Pero si el plan de Sabella es consistente las puede superar.
Lo primero que tiene que hacer es no dejar espacios entre líneas ni recorridos largos para los volantes alemanes que llegan agrupados. Suelen entrar por los laterales y definir con el pase atrás a la boca del área para que resuelva el que viene de frente. Hay que evitar que la defensa argentina quede dada vuelta y no pueda reaccionar.
Otra de las claves es dónde los van a esperar. Lo ideal sería a la altura de los medios, con Mascherano marcando el paso. Siempre con una línea de cuatro bien organizada. Esperarlos muy atrás es demasiado riesgoso, tanto como lo es ir a buscar lejos.
Los volantes argentinos serán clave para quitarles ritmo a los alemanes y Enzo Pérez puede ser un factor de sorpresa si se desprende en los momentos oportunos.
Argentina no es un equipo que se caracterice por la tenencia de la pelota, de manera que ésta debe circular rápido hacia los de adelante. A Messi siempre lo rodearon tres rivales. A los alemanes tal vez les parezca exagerado. Allí puede sacar ventaja Leo con su velocidad para las réplicas.
Seguramente Alemania no será defensivo como todos los equipos que enfrentó la Selección hasta aquí. Es una ventaja: que el desgaste lo hagan ellos. Porque Argentina viene de jugar en una cancha mojada un alargue y vivió el nerviosismo de las definición por penales. Hay un esfuerzo físico y emocional importante.
Con Alemania neutralizada, el desafío es llegar al gol. Otra vez Higuaín deberá hacer el trabajo de generar espacios casi en soledad, de chocar con los rivales porque es poco probable que Sabella le ponga compañía de entrada. Se la tendrá que arreglar con la ayuda de Lavezzi para abrirle la cancha y dejarlo a Messi en posición cómoda para definir.
En un fútbol dinámico los antecedentes son sólo eso: antecedentes. Los dos llegan con el ánimo por las nubes. El temperamento también será decisivo para escribir el final de esta historia.
CLARIN