28 May La mayoría de los jóvenes ve cine, escuchan música y leen por Internet
Por Sergio Di Nucci
Tradicionalmente, la relación entre los jóvenes argentinos y el cine nacional ha sido de desencuentro, de indiferencia. El film bien narrado, de trama cerrada y con una idea-motor desplegada a lo largo de hora y media sin desfallecimiento ni desvíos irrelevantes, encarnada en protagonistas dignos del papel, pareció una asignatura pendiente en muchas producciones nacionales durante el largo siglo XX. Y si bien esa imagen se modificó radicalmente en los últimos años, sigue siendo actual entre muchísimos jóvenes, según una encuesta presentada la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina.
“Uno de los datos centrales de la encuesta es que los adolescentes y los jóvenes ven mucho cine pero poco nacional, y son muy pocos los que pagan una entrada de cine para ver filmes nacionales”, señaló la directora del área de Jóvenes y Cine Nacional de la entidad, Roxana Morduchowicz, durante una conferencia de prensa que congregó a tres personalidades del cine argentino, para reflexionar sobre estos datos preocupantes: el laureado director Juan José Campanella, presidente de la Academia; su colega Santiago Mitre; y el crítico Axel Kuschevatzky.
De acuerdo con la encuesta realizada por la Academia de Cine entre noviembre de 2012 y julio de 2013, y en la que participaron unos 1500 jóvenes de 16 a 25 años de Buenos Aires, Mendoza, Rosario, Córdoba y Ushuaia, la televisión es el medio en el que más ven filmes, pero Internet le sigue muy de cerca. “De hecho, con el cine pasa lo mismo que con la lectura y la música: los adolescentes de hoy hacen todo en la pantalla de la computadora.” Y otro dato interesante: “Los amigos son el referente en la adolescencia para la elección de un film (y de todos los consumos culturales), pero después de la secundaria, lo que cuenta es la historia.”
A Campanella, los datos le parecieron “horrorosos y poco entendibles”, sobre todo en momentos en que las producciones nacionales –Séptimo, Metegol, precisamente de Campanella, y Corazón de León– copan la taquilla, y el cine argentino ya vendió seis millones de tickets en lo que va del año.
Un 90% de los jóvenes argumenta que hace falta más publicidad y difusión cuando se estrenan los filmes nacionales. “Ahí está la clave –dijo el director de El hijo de la novia y El secreto de sus ojos–. Desde la Ley de Cine, sancionada en 1995, se pone el énfasis en la producción. Es decir, que el director no piensa jamás en la difusión de sus filmes, lo cual es un error, porque esa parte es fundamental, y es incluso creativa, porque obliga a pensar en el plano de lo artístico cómo hacer que llegue a más gente lo que hiciste. De hecho, mis dos primeras películas no las conoce nadie, porque creí que la difusión no era una tarea mía.”
Mitre añadió: “Estos grandes éxitos de películas muy vistas son una excepción en nuestro cine; por eso debemos trabajar en los demás, para revertir esa imagen.”
TIEMPO ARGENTINO