Se mató el padre de María Cash

Se mató el padre de María Cash

Por Diego Igal
Con 70 años a cuestas, había estado en morgues de Paraguay y en prostíbulos de Ushuaia y entregado un auto, una casa y un empleo, dedicado a tiempo completo a un sólo objetivo: reencontrarse con su hija María del Carmen, desaparecida en julio de 2011, un hecho que le cambió la vida a él y a toda la familia. Y en ese afán, que aún no tuvo recompensa, Federico Carlos Cash se mató el lunes en una ruta de La Pampa. El Renault Clío que manejaba desde Neuquén hacia Buenos Aires chocó de frente con un Peugeot 207 en el que viajaba una pareja de porteños de 50 años que sólo sufrió heridas menores, en la Ruta nacional 152, a dos kilómetros de la localidad de Puelches, una zona predominantemente desértica. La colisión ocurrió cerca de las 17:30 en una recta y las primeras pericias determinaron que la velocidad aproximada de ambos vehículos eran los 100 kilómetros por hora, que no hubo falla mecánica ni frenadas, y que uno de los dos vehículos invadió el carril, aunque aún se desconoce cuál, informaron fuentes de la Policía de General Acha a Tiempo Argentino. El impacto fue en el primer tercio de los frentes de las carrocerías. Según un informante consultado, la conductora del Peugeot tenía sol de frente y eso pudo dificultarle la visión. La mujer viajaba a la Patagonia junto al esposo. Ambos fueron llevados al hospital local Padre Buodo, donde ayer les dieron el alta. Cash quedó aprisionado entre el volante y el asiento y los bomberos debieron trabajar varias horas para rescatarlo. Al parecer el hombre falleció al momento del choque. La noticia conmovió a muchos, como al abogado penalista Víctor Varone, a quien Cash había recurrido hace siete meses para que junto con su socio Gabriel Iezzi lo ayudarán en la Fundación que lleva el nombre de su hija y que en diciembre había obtenido la personería jurídica. Varone ofició de portavoz de la familia y tras desmentir que volviera de Neuquén por seguir una pista de María, comentó: “(Federico) era un luchador incansable, que en estos últimos 33 meses de lo que único que se ocupaba era de buscar a su hija. Y en esa tarea encontró otra gente desaparecida, armó un esquema de cómo buscar personas, creó la fundación y presentó un proyecto (a través del senador Juan Carlos Romero) de una agencia nacional de búsqueda de personas (ver completo en http://www.buscamosamariacash.blogspot.com.ar/). La familia dijo que quieren despedir al jefe en paz y después van a seguir con la búsqueda de María”, agregó Varone.
El rastro de María del Carmen Cash se perdió el 8 de julio de 2011 en Rosario de la Frontera, cuatro días después de que la joven partiera desde Retiro en ómnibus hacia el norte del país, para visitar amigos, pasear y vender la ropa que ella misma había diseñado. La causa que tramita en el Juzgado Federal Nº 2 de Salta tiene hoy 44 cuerpos, pero ningún imputado. En febrero del año pasado, el gobierno nacional elevó a $ 200 mil la recompensa para aquellas personas que, “sin haber intervenido en el hecho, brinden datos útiles” sobre la joven. En diciembre último, Federico había recibido mensajes en un teléfono celular cuando estaba en la provincia norteña. “Se van a enterar qué la pasó a tu nena, y se van a enterar en la cagada en la que estaba metida. Yo no la maté, la mató la boludez, vos estás cerca del gitano que la mató”, eran algunos de los seis textos que él consideraba un insulto a la memoria de su hija, a la que consideraba viva. Junto con Juan Carr, Cash había interesado a la Corte Suprema de Justicia de la Nación para implementar una oficina que centralice y coordine las búsquedas de personas desaparecidas, que aún está en armado. Mientras, le ponía el cuerpo a dar con el pájaro que le faltaba a su nido cómo solía decir. Y en eso se le fue la vida.
TIEMPO ARGENTINO