El legado de Evita llegó hasta los museos y bibliotecas de Vietnam

El legado de Evita llegó hasta los museos y bibliotecas de Vietnam

Por Juan Pablo Cinelli
Celebrando los 40 años de relaciones bilaterales entre ambos países, en septiembre pasado se realizó en Buenos Aires la Semana de la Cultura Vietnamita en la Argentina, a través de cuyas actividades se pudieron conocer en primera persona diferentes expresiones del acervo cultural de esa nación asiática: muestras de arte, de productos textiles y un interesante ciclo de cine fueron parte de aquella experiencia. Devolviendo la gentileza, la semana pasada se realizó la Semana Argentina en Vietnam.
El ciclo de cine incluyó títulos como Aniceto, de Leonardo Favio; Buscando al comandante Andresito, de Camilo Gómez Montero; y Revolución, el cruce de los Andes, de Leandro Ipiña. La música y la danza también formaron parte de las actividades, con las presencias de Lidia Borda junto a la Selección Nacional de Tango; y de Koki y Pajarín Saavedra, quienes brindaron un espectáculo de folklore, conjugando danza, zapateo, percusión y canto.
Pero si una presencia descolló y llamó la atención de los habitantes del lejano país del sudeste asiático, esa fue la de Eva Perón. Su histórica figura fue homenajeada con dos muestras que la tuvieron como objeto central, a cargo el Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón-Museo Evita. Bajo el nombre de Eva Perón, la justicia social en la Argentina, la primera de ellas tuvo lugar en la ciudad de Ho Chi Minh, en la que se expusieron 52 imágenes de la emblemática líder del peronismo, y donde se revela el trabajo desplegado por Evita en materia social.
Una segunda muestra, titulada Eva Perón, embajadora de la Paz, en referencia al título honorífico que recibió la por entonces Primera Dama argentina durante su gira por Sudamérica y Europa en 1947, se presentó en la Biblioteca Nacional de Vietnam, ubicada en la ciudad de Hanoi. En ella se exhibieron imágenes de Evita durante la mencionada gira internacional, cuyo objetivo principal fue presentar una posición alternativa a los enfoques hegemónicos imperantes del momento, lo que por entonces se conoció como Tercera Posición.
Ambas muestras volvieron a demostrar el carisma de Eva Perón, cuya figura continúa despertando curiosidad en todos los rincones del mundo y convocando el interés de las culturas más dispares. ¿O acaso no es notable que una ópera basada (libremente) en su figura haya sido un éxito en la mismísima Avenida Broadway de Nueva York, y que al mismo tiempo estas muestras convoquen a cientos de personas en las ciudades más importantes de Vietnam? Durante la Semana de la Cultura Argentina en Vietnam que finalizó el sábado también se expusieron diversas publicaciones del Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón. Una vez finalizada la exposición, el material exhibido pasó a formar parte del acervo de la Biblioteca Nacional de Vietnam, organismo que cuenta con una importante sección de libros en español.
Las actividades que tuvieron a Eva Perón como figura destacada finalizaron con una conferencia en la Universidad de Hanoi, cuyo tema fue el libro La razón de mi vida, escrito por Eva Perón en 1951. En dicho encuentro se analizó el valor de la obra en el contexto histórico de su aparición y la importancia que tuvo en la divulgación del ideario de Evita y la conformación de su liderazgo en el marco del primer peronismo.
Pero sin dudas el evento más destacado de esa jornada fue la presentación en sociedad de la edición del famoso volumen traducido por primera vez a la lengua vietnamita. Un hecho inédito, de un impacto cultural que representó la confirmación del interés que Evita despertó en el seno de esa sociedad.
Aunque todas las muestras habían sido pensadas originalmente para mantenerse durante la Semana de la Cultura Argentina en Vietnam, al cierre de esta edición y debido a la buena repercusión de las mismas, los organizadores evaluaban la posibilidad de extenderlas hasta finales de diciembre. De este modo se puede jugar a reformular un viejo slogan, para afirmar no sólo que “¡Evita vive!”, sino que por unos días se mudó a Vietnam.
TIEMPO ARGENTINO