10 Feb Mariano Estevez, productor de pases
Mariano Estevez es un emprendedor nato. Absorbió experiencia en el negocio del fútbol profesional como productor de contenidos de la compañía Torneos y Competencias, y adquirió expertise profesional durante una década en la agencia Squadra, dedicada a la representación de futbolistas. Hace siete meses fundó su propia empresa: MEMPSA, una consultora que asesora a jugadores en la Argentina y Uruguay, ofrece servicios de scouting (selección de talentos), asesora financieramente a clubes de la región y hace las veces de broker para cerrar acuerdos de marketing deportivo entre estrellas deportivas y grandes marcas.
Con esas cuatro unidades de negocio, el empresario proyecta facturar alrededor de $ 6 millones netos durante 2012. Para ingresar al exclusivo circuito del fútbol profesional, este licenciado en Producción y Dirección de Medios de Comunicación de apenas 36 años rindió un examen ante la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), entidad que le extendió una licencia para poder representar económicamente a entidades deportivas y a jugadores profesionales.
Con esa habilitación, que está avalada internacionalmente por la FIFA, cada manager paga un seguro por ejercer la profesión. “La mayoría de los que se dedican a esto contrata el seguro exigido por la FIFA o deposita dinero en una cuenta de la FIFA en Suiza para demostrar que tiene respaldo económico”, explica este licenciado egresado de la Universidad de California, Estados Unidos.
Los representantes, al menos en la Argentina y Uruguay, se quedan con el equivalente a un 10% del contrato anual que cada jugador tiene cerrado con su club; y los jugadores profesionales perciben entre un 10% y un 15% de su pase a otra institución
deportiva. Un esquema muy diferente al de mercados europeos, en los que los jugadores no participan económicamente de la ecuación.
Según Estévez, en el Viejo Continente se pagan cláusulas de rescisión de contrato, pero los futbolistas no participan económicamente de su pase (venta de un club a otro). Lo recaudado en cada operación engrosa la cuenta bancaria de la institución que lo vendió.
Por ahora MEMPSA, que tiene 10 empleados, trabaja por objetivos. Y como su principal meta es convertir a sus representados en estrellas del fútbol europeo e internacional, Estevez no les cobra hasta que ellos consiguen firmar un contrato con un club en el exterior.
El servicio de representación que un jugador contrata en MEMPSA no sólo incluye la administración de los ingresos y del contrato con el club, sino también un servicio de cobertura médica completa, con chequeos periódicos y dieta incluidos, además de contención psicológica y emocional.
“Trabajamos gratis a modo de inversión, apostamos a que nuestros jugadores triunfen afuera. Les cobramos por nuestros servicios una vez que logran un contrato importante”, explica el empresario, que acaba de volver de un viaje relámpago a Italia, país que visita con mucha frecuencia por el interés que tienen sus clubes en los jugadores argentinos.
La compañía fundada a comienzos de este año trabaja, además, con fondos de inversión de capitales internacionales que están interesados en hacer negocios en este universo cada vez más rentable. “Asesoramos a fondos que en vez de desembolsar dinero en sectores tradicionales, en momentos de crisis buscan otras alternativas”, explica el CEO de MEMPSA.
Según el empresario, los fondos de inversión financiera están apostando cada vez más a este negocio en épocas en las que se abren las transferencias de jugadores en Europa. La mayoría no está vinculada al mundo del sport business, pero les interesa el negocio por el volumen de dinero que mueve al año: US$ 1.000 millones.
“Los inversores apuestan a jugadores con gran potencial que pueden explotar su talento de un momento a otro. Se guían por el olfato de nuestros scouts (reclutadores). Los fondos saben que no hay techo económico cuando un club quiere comprar a una potencial estrella en el fútbol”, cuenta.
Según Estevez, magnates de China, Rusia y jeques árabes desembarcaron en Europa en plena crisis económica. Muchos de los clubes tradicionales de Italia, Francia, Inglaterra y España tienen sus números en rojo y necesitan vender sus activos para subsistir.
“En los últimos años proliferaron inversores chinos y árabes que quieren invertir en este negocio porque, además de ser rentable, les gusta el deporte”, agrega el empresario.
En MEMPSA, Estevez también cierra acuerdos de marketing deportivo con grandes marcas y compañías multinacionales.
En este momento trabaja en la campaña de difusión institucional de la firma de celulares Claro. MEMPSA se encargó de vincular a estrellas como Sergio “Kun” Agüero con la empresa de Carlos Slim.
Desde que ingresó al negocio del marketing publicitario, Estevez cerró acuerdos con marcas de la talla de Gillette, Duracell, Claro y Sony, entre otras. “Trabajamos con una agencia de publicidad que tiene clientes que demandan la presencia de celebrities del mundo del deporte para promocionar sus productos y su imagen de marca”, agrega el empresario.
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