30 Dec De Xi a Abenomics, seis eventos que sacudieron Asia
Por David Pilling
Cuáles son los seis eventos más significativos que ocurrieron en Asia este año? La pregunta es totalmente arbitraria. ¿Por qué seis? ¿Qué queremos decir con “significativos”? Y, ya que estamos hablando del tema, ¿a qué nos referimos por “Asia”, un término que se ha utilizado para referirse a las “tierras al este de Europa” desde Herodoto? Pero ya casi es Navidad, así que sigamos adelante. Definiremos Asia en la forma en que el Financial Times lo hace, en términos generales desde la región del subcontinente indio hasta Australia. Es un conjunto de naciones que contienen casi cuatro mil millones de personas, más de la mitad de la población mundial. “Significativo” para nuestros propósitos significa algo que afectará a un gran número de personas durante muchos años, una definición que excluye eventos interesantes en países pequeños.
Este año contó con sus tragedias. El tifón Haiyan mató a más de 6,000 personas en Filipinas. Luego surgieron las consecuencias de la grotesca violación y el asesinato de una estudiante de 23 años de edad en India, que dirigió la atención hacia un tema que se ha ignorado durante mucho tiempo: la violencia contra las mujeres. En un ámbito totalmente diferente, la afirmación de Kevin Rudd, el entonces primer ministro de Australia, que el auge de las materias primas había terminado, cristalizó la preocupación de que el súper ciclo alimentado por el crecimiento chino ya había seguido su curso. Otros posibles contendientes son el abandono por parte de Alibaba de su oferta pública inicial de $60 mil millones y más, después de que las autoridades de Hong Kong se negaron a modificar los reglamentos relacionados con los consejos de administración; un nuevo estallido de disturbios en Tailandia (déjà vu); y la primera transferencia civil del poder en Pakistán, aunque resultase en el tercer mandato del primer ministro Nawaz Sharif (otro déjà vu más).
Así que (redoble de tambores por favor)
los seis eventos más importantes son:
Consolidación de Xi Jinping en el poder
Hasta este año, el liderazgo chino se estaba volviendo cada vez más colectivo. El nuevo presidente de China ha revertido totalmente esa tendencia. Puso en marcha una campaña contra la corrupción que ha consternado a los fabricantes de marcas de lujo, aterrorizado a los líderes del partido y afectado a los otrora “intocables”, incluyendo Zhou Yongkang, un ex miembro de la comisión permanente. Xi se perfila como el más poderoso líder chino desde Deng Xiaoping. Eso le imparte la seguridad suficiente para llevar a cabo reformas radicales necesarias para hacerles frente a las graves ineficiencias en la economía china, sobre todo permitiéndoles a las fuerzas del mercado jugar un papel más importante. Con respecto al extranjero, el Sr. Xi se muestra menos tímido a la hora de hacer valer el poderío de China.
Senkaku/Diaoyu
Una señal es la creciente tensión sobre las islas en disputa en el Mar Oriental de China. Beijing está poniendo a prueba la determinación de Tokio y Washington para defender el control administrativo de Japón. La ausencia de Barack Obama en el foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico en Bali, debido al cierre del gobierno estadounidense, reforzó la impresión del desvanecimiento del compromiso de EEUU con la región. (El fuerte apoyo de EEUU a las Filipinas después de Haiyan ayudó a contrarrestar esa impresión). La declaración china de una “zona de identificación de defensa aérea” que incluye el espacio aéreo sobre las islas en disputa ha alarmado a la región y expuesto grietas en la alianza entre EEUU y Japón.
Abenomics
Parte de la respuesta del Japón a la “amenaza de China” ha sido un intento por Shinzo Abe, el primer ministro de línea dura, para revitalizar su economía. La principal herramienta ha sido una expansión monetaria masiva con el fin de poner fin a 15 años de deflación. Esto ha insuflado nueva vida a la economía, a pesar de que los escépticos esperan que el efecto desaparezca. Aun si Japón tiene éxito en anclar la inflación en un 2 por ciento, cuenta con una población en envejecimiento y en contracción. Sin embargo, ya sean exitosos o no, los Abenomics tendrán grandes ramificaciones para la economía japonesa y los flujos internacionales de dinero.
Modi manía
La posibilidad de que Narendra Modi se convierta en primer ministro de la India después de las elecciones de mayo próximo ha energizado y consternado a partes iguales. Los defensores esperan que el Sr. Modi, ministro en jefe del estado de Gujarat y candidato a primer ministro por el partido nacionalista hindú Bharatiya Janata Party, pueda replicar el éxito económico de Gujarat a nivel nacional. Sus detractores temen que el Sr. Modi es anti-musulmán. También dicen que ha tomado demasiado crédito por el éxito en Gujarat, el cual ha fracasado dramáticamente en transformar su crecimiento en mejoras en las condiciones de vida de la clase pobre.
Rumores del “estrechamiento”
El estrechamiento no sucedió en Asia. En el sentido estricto de la palabra, no sucedió en absoluto. Pero la mera posibilidad de que la Reserva Federal de EEUU reduzca la cantidad de bonos que compra fue suficiente para enviar algunos mercados asiáticos, notablemente India e Indonesia, al mini pánico. Cuando se dé inicio al estrechamiento, las economías asiáticas más vulnerables a las salidas de capital podrían verse afectadas.
Rana Plaza
El derrumbe de un edificio en Bangladesh, que dejó como saldo 1,129 muertos, concentró la atención del mundo entero en las miserables condiciones en las que millones de trabajadores del sector textil laboran para fabricar ropa barata. En cierto modo, el boom textil de Bangladesh ha sido de gran ayuda, especialmente para las mujeres, para quienes incluso una fábrica de explotación es un peldaño para arriba. Las muertes en Rana Plaza fueron el resultado tanto de la corrupción local como de la disposición de parte de las marcas occidentales de hacerse la vista gorda. La tragedia de Rana Plaza sólo será significativa si resulta en cambios que puedan balancear la aspiración por una mejor situación económica con normas mínimas de seguridad, y dignidad. Este evento está incluido como una combinación tanto de esperanza como de expectativa.
EL CRONISTA