08 Oct Tesla desafía al mercado de autos eléctricos
Por Natalia Alvarez
Dejemos de lado a Porsche, Audi y Jaguar. En el mercado de automóviles más innovador del mundo, Tesla Motors tiene el sedán de lujo de más rápido crecimiento. Y no tiene caño de escape.
Apenas un año después de su lanzamiento, el Modelo eléctrico S de la compañía es el tercer auto de lujo más popular en California. Es algo que las superestrellas de Hollywood y los titanes de la tecnología no pueden dejar de tener, un rival importante para marcas premium establecidas y una respuesta a la pregunta más frecuente en la industria automotriz: ¿se venden los vehículos ecológicos?
Al fabricar un auto ecológico, rentable, con motor eléctrico que sea lo suficientemente cool como para estacionarlo en la puerta de un hotel cinco estrellas, Tesla y su presidente, el CEO y arquitecto de producto Elon Musk, lograron lo que muchos creían imposible.
Y al haber superado un reto que hasta el momento representa una frustración para General Motors, Toyota y Volkswagen, la empresa y su líder tienen un desafío mucho mayor en vista: hacer que la idea de que los autos eléctricos sean asequibles y accesibles para el mercado de consumo masivo se convierta en una realidad.
Los vehículos eléctricos son costosos de fabricar, difíciles de vender y están repletos de limitaciones técnicas. La mayoría no llega a recorrer 100 millas con una carga y la recarga puede tardar más de seis horas, lo que reduce enormemente la utilidad de los mismos. Pero el Modelo S de Tesla tiene un alcance de 260 millas y carga 80% de la batería en 40 minutos.
Musk, cuya otra compañía se dedica a desarrollar y construir cohetes espaciales, dijo que la producción de vehículos eléctricos que alcancen entre 200 y 300 millas está a tres o cuatro años de distancia, por lo menos. Pero Musk afirmó que Tesla lo logrará desde el punto de vista tecnológico – y habrá un mercado esperando.
“No creo que podamos fabricar suficientes”, comentó Musk con respecto a un vehículo de volumen valuado en u$s 35.000. “El mercado demandará varios cientos de miles o millones por año”, agregó el CEO.
Hasta el momento, Tesla está recorriendo un camino complicado que se ha cobrado muchas víctimas.
Fiat pierde u$s 10.000 cada vez que vende una versión eléctrica de su modelo 500 y la implosión pública del fabricante de automóviles híbridos Fisker, junto con la quiebra de Better Place, una empresa dedicada al recambio de baterías, pusieron de manifiesto los riesgos de apostar solamente a lo verde.
Si Musk puede encontrar la forma de usar esa tecnología y dar un salto desde lo cool premium al mercado masivo, esto sería el acontecimiento más perjudicial en la industria automotriz desde el auge de las marcas japonesas que tuvo lugar en la década de 1970.
“Deberían ponerse a trabajar de inmediato en los autos eléctricos y tomarlo en serio”, dijo Musk, de 42 años, quien considera que la iniciativa de Big Auto de concentrar sus ambiciones eléctricas en vehículos pequeños y económicos es un error crucial.
Musk, quien nació en Sudáfrica y se formó en Wharton de la Universidad de Pensilvania, asistió solamente dos días a un programa de doctorado en Stanford, luego abandonó sus estudios y se convirtió en empresario. El cofundador de PayPal a menudo es comparado con Tony Stark, el magnate de la tecnología que salva al mundo en las películas de Iron Man.
“Lo que espero es que, con el tiempo, las grandes automotrices vean lo que logramos y se concentren más en los vehículos eléctricos. Espero que esto los motive a tomarlo en serio”, comentó Musk a Financial Times. “Los fabricantes tienen una actitud de esperar a ver qué sucede, a ver si se mantiene la demanda [del S] – y no toman decisiones rápidas. Hay muchos ingenieros excelentes en las grandes automotrices, si sólo apuntaran en la dirección correcta”, agregó el CEO.
Hace mucho tiempo que los observadores de la industria vienen analizando si el hecho de que las grandes automotrices no se concentren lo suficiente en los vehículos verdes puede dar lugar a que innovadores como Tesla se queden con una parte importante de lo que muchos creen que será un gran mercado a mediados de siglo.
“Es simple: Tesla hizo que los vehículos eléctricos aparecieran en la portada de la revista Time”, dijo un alto ejecutivo de una automotriz global. “Estos autos están lejos de ser la solución completa al problema, pero lo que han hecho realmente nos recordó a los principales actores del sector lo que tenemos que hacer”, agregó el ejecutivo.
Andy Palmer, vicepresidente ejecutivo de Nissan, afirmó: “Sin duda, las empresas como Tesla estimularon el mercado de cero emisiones. Realmente es la confirmación de que estábamos en el camino correcto “.
Las ventas del modelo S, cuyo precio arranca en u$s 62.400, incluyendo un crédito fiscal federal de u$s 7.500 ofrecido para todos los nuevos vehículos eléctricos, sólo se ubican por debajo del Mercedes-Benz clase E y el BMW serie 5 en California en lo que va del año.
Si el Modelo S resulta ser el precursor de un vehículo eléctrico de aceptación masiva, sin embargo, las automotrices más importantes se verán obligadas a reaccionar de una forma mucho más agresiva que hasta el momento.
“Creo que el modelo S se considerará más importante que el Modelo T,” dijo Steve Jurvetson, uno de los directores de Tesla. “[Es] un catalizador que finalmente transformará todo el transporte. El mercado de masas llegará mucho más rápido de lo que todos piensan”, agrego Jurvetson.
Tesla vendió alrededor de 10.000 automóviles en los primeros seis meses de 2013, muchos de ellos en California, donde ya es común verlo por las calles.
EL CRONISTA