La muerte de Indygo Shiner: una pérdida muy sentida para el elevage nacional

La muerte de Indygo Shiner: una pérdida muy sentida para el elevage nacional

Por David Migerdichian
Un adiós inesperado se produjo el 27 de agosto, cuando en el Haras La Quebrada dejó de existir el reproductor Indygo Shiner. La lamentable baja fue producto de una torsión de estómago que afectó gravemente al noble hijo de A.P. Indy, quien había comenzado hace apenas unas semanas su undécima temporada de servicio en el país. Nacido el 25 de abril de 1998, el alazán norteamericano fue el último semental seleccionado por el recordado Hernán Ceriani Cernadas y le dio enormes satisfacciones al harás de la familia, convirtiéndose en uno de sus principales baluartes. Antes de desembarcar en Argentina, el fruto de la unión entre el extraordinario A. P. Indy (USA) y Navarra (USA), por El Gran Señor (USA), cumplió un aceptable paso por las pistas de su país. Criado en el Summer Wind Farm, el pupilo de W-Elliott Walden debutó el 6 de agosto de 2000 en el exigente mitin de Saratoga. Salió de perdedor en su segunda salida, en Monmouth Park, sobre la milla en pista de arena.
Tras su primer halago, viajó a Woodbine, Canadá, en pos del Breeders’ Cup Stakes (G1-1700 metros), donde culminó segundo a siete cuerpos de Macho Uno (Holy Bull). En la siguiente temporada alcanzó tres lauros en ocho intervenciones, incluyendo el Jefferson Cup Stakes (G3-1800 metros), en la grama de Churchill Downs.
No compitió a los cuatro años, teniendo su salida final un año más tarde, en un Allowance Optional Claiming de 1800 metros, que se corrió sobre el césped de Gulfstream Park.
Fue el mejor descendiente de los ocho que tuvo su madre, Navarra, la cual logró festejar en seis competencias, incluso el Vineland Hándicap (G3).
El sello distintivo de su padre fue quien lo depositó en la padrillera. Incluso, antes y durante su estadía en Argentina, viajó cada temporada hasta el cotizado Hiü’n’Dale Farms de Kentucky, con un éxito rotundo entre los criadores. Hernán Ceriani Cernadas fue quien dio el visto bueno para que el bello alazán fuese incorporado al Harás La Quebrada. Sus primeros nacimientos ya llamaban la atención.
De ese grupo, nacido en 2004, lo más destacado fue My Indy, que fue gradual en nuestras pistas, como también en Dubai, donde sobresalió entre los mejores animadores de cara a la Dubai World Cup (G1) de 2009. Dentro de su carnada inaugural también sobresalieron los vencedores clásicos The Credit (G3), Funny Joke (CHI-3) y Doña Terca (L).
Su explosión como reproductor sucedió un año más tarde, entregando ejemplares de la talla de Míss Match, vencedora del Gran Premio Selección (G1) en Palermo y del Santa Margarita Invitational Stakes (G1) en Estados Unidos; Tecla Shiner, héroe del Gran Premio Nacional (G1); Mi Amiguito, ganador del Gran Premio Polla de Potrillos (G1); y Garatero, puntal del Gran Premio Provincia de Buenos Aires (G1). Forlida, Alghero, Shining Cherie, Quebrada Shiner y My Honesty, nacidos ese mismo año, también se alzaron con pruebas importantes en el plano jerárquico. Los magníficos resultados alcanzados por sus vastagos durante 2008 le permitieron liderar la estadística clásica, siendo ade¬más galardonado como Padrillo del Año en la entrega de los Premios Carlos Pellegrini -distinción que compartió con Incurable Optimist-. A pesar que sus posteriores producciones no fueron tan buenas como las dos primeras, Indygo Shiner logró ser noticia fuera del plano común por intermedio de caballos destacados como AP Candy, So Shiny y La Charmante. Sin dudas, su obra magna la pro¬dujo antes de su muerte: el campeón Indy Point. El crack de la familia Lovisi fue el último gran hijo de Indygo Shiner, consagrándose como Caballo del Año y Campeón 3 Años Macho de 2012 en la Argentina, producto de sus triunfos en los grandes premios Nacional (G1), Jockey Club (G1) y Estrellas Juvenile (G1).
Indygo Shiner deja dos generaciones por venir, además de la que está debutando en la actual tempo-rada, y las pocas yeguas que alcanzó a cubrir este año. Su partida significará una pérdida muy grande para nuestra hípica, la cual lo recordará por siempre como un verdadero productor de campeones.
ARGENTINA TURF MAGAZINE