Mitos y claves para no ahogarse con datos

Mitos y claves para no ahogarse con datos

Por Juan Manuel Damia
Hay un mito que dice que Internet es el único medio en el que todo se puede medir. En primer lugar, no todo en Internet puede ser mensurable, hay mucha información que realmente puede ser medida eficazmente así como también, hay gran cantidad de datos que, aun cuando se pudieran cuantificar, el costo de hacerlo sería mayor a los beneficios de la propia información obtenida.
Disponer de datos no es un problema hoy en día. Los gerentes y empresarios de hoy se asfixian en información y hay una única forma de no hacerlo y es utilizarla a nuestro favor para responder a las preguntas correctas.
Al enfrentarnos a una fuente o informe de datos –que hoy comúnmente podemos extraerlos utilizando herramientas que están al alcance de nuestras manos, tanto para las grandes como pequeñas empresas–, lo primero que tenemos que hacer es redactar previamente las preguntas que queremos responder, eso simplemente. Esto hace más fácil el trabajo de lectura de datos ya que sólo tendremos que llenar los espacios en blanco con las respuestas, en lugar de sentarnos delante de una fuente para estar una, dos o tres horas en busca de ‘algo interesante o útil’.
Otra cuestión a tener en cuenta es entender qué preguntas puede contestar cada fuente de datos. Esto es tan importante como las preguntas que vamos a responder. Porque sino nos veremos buscando respuestas en lugares donde no las vamos a encontrar.
Las preguntas básicas que tenemos que hacernos son:
¿Qué?: Esto nos brindará detalles de comportamiento. Para responder a esta pregunta utilizamos como tipo de fuentes las Web Analytics Tools, Adservers, herramientas de marketing por correo electrónico, entre otros. Si usted está usando alguna de las herramientas de información antes mencionados debe acordarse de hacer preguntas con qué. Por ejemplo lo correcto es preguntarse: ¿Qué están haciendo los usuarios de mi sitio web?, ¿qué páginas están navegando?; y lo incorrecto es preguntarse: ¿Por qué los usuarios navegan por esas páginas?
Otra de las preguntas básicas es el ¿Por qué? Las respuestas a esta pregunta nos darán un tipo de información con detalles actitudinales. Esto se consigue muchas veces utilizando como fuente a las encuestas. Lo correcto es preguntarnos ¿Por qué están buscando pero no compran los productos que ofrezco? Y lo incorrecto es preguntarse: ¿Qué páginas están visitando los usuarios antes de comprar?, ¿cuál fue la fuente de información que llevó a tráfico con el producto A?
Cuando hacemos preguntas a una fuente incorrecta de información lo que sucede es que se generan inferencias y el resultado es peor que no tener información.
¿Cuántos empresarios o gerentes tienen la cultura de permanecer horas delante de la plataforma buscando la información que puede serles útil? El camino es otro. Antes de comenzar con su análisis y para no asfixiarse en data, hay que tomarse un tiempo y escribir las preguntas en un pedazo de papel. Peguntarse para luego buscar únicamente respuestas.
EL CRONISTA