18 Jun Fermaglio no llora
Por Juan Raúl Moncada
Confirmando su actualidad, el hipódromo local volvió a brindar una gran tarde hípica donde se disputaron sobre pista pesada once buenas competencias con un muy buen número de participantes, por lo que los amantes del deporte de los reyes se pudieron retirar por demás de reconfortados por el espectáculo vivido, ya que tanto los clásicos como las carreras comunes, fijadas en distintas distancias fueron muy atractivas.
El joven piloto local Emiliano “Torta” Mirón fue la gran figura al imponerse en cuatro competencias, mostrando su enorme capacidad para conducir un pura sangre.
Gran carrera
El clásico Día del Padre tuvo cinco participantes, los cordobeses Che Trago y Juguetes Perdidos llegaron con la firme premisa de lograr destronar al local Fermaglio, pero finalmente No Cry fue el que estuvo a un pasito de lograr la hazaña, ya que el debutante pensionista de Mario Palacios comprometió seriamente al ganador cuando quedaban 200 metros para la sentencia.
En el salto, Che Trago por dentro con Armando Glades intentó hacer la punta, pero a los pocos metros Claudio Olivarez se encargó de poner al frente a Fermaglio, rompiendo de esta manera todas las especulaciones previas, donde se manejaba como puntero a Che Trago.
Recorrieron los primeros metros con Fermaglio liderando con luz sobre Che Trago; Johnatan Cabral advirtió esto y apuró la marcha con No Cry que en pocos metros se ubicó segundo y cuando entraron a codo ya tenía al puntero a las patas.
Desde los 900 hasta los 500 cuando Fermaglio tenía un cuerpo sobre No Cry, en tanto que los de atrás perdían fuerza perfilándose a esta altura lo que finalmente sucedió, un mano a mano entre estos dos productos.
La recta
Por adentro, Claudio Olivarez intentó la disparada y de hecho lo consiguió ya que en esos primeros metros las diferencias se estiraron nuevamente, pero cuando Cabral embaló al rosarino el pupilo de Palacios, las mismas se achicaron, por lo que Olivarez tuvo que extremar recursos para contener al debutante.
Pasaron por los 200 y ambos caballos estaban casi en una misma línea, de ahí en más la lucha se hizo intensa y cuando parecía que pasaba No Cry, afloró toda la categoría de Fermaglio para recuperarse y lograr estirar tres cuarto cuerpo en la sentencia.
Confirmación para este potrillo como líder de la generación, empleando 1 minuto 22 segundos 32 centésimas, con un correcto trabajo de Claudio Olivarez que lo pudo al frente a los pocos metros y como siempre una magnífica puesta a punto por parte de Ramón Tavella que ayer no pudo estar presente en el hipódromo por una dolencia.
Sin dudas, el próximo 14 de julio tendremos una gran prueba en lo que será el clásico Independencia, ya que serán 100 metros más que los de ayer y donde seguramente No Cry —ya superado el debut— llegará mucho más a punto para tratar de poder destronar a quien hoy es el líder entre los potrillos de la zona.
EL LITORAL