Volkswagen Voyage: virtudes intactas

Volkswagen Voyage: virtudes intactas

Por Gabriel Tomich
Uno de los segmentos con más opciones de modelos y versiones en el mercado argentino es el de los sedanes pequeños (segmento B). Allí, la oferta es amplia y es justo dividirlo en dos. Por un lado, los autos más pequeños y económicos (por ejemplo, Chevrolet Classic, Fiat Siena), y por otro, los sedanes de mayores dimensiones y equipamiento, que casi rozan las características de un mediano (segmento C).
En esta última franja compiten modelos como el Chevrolet Aveo G3, Peugeot 207 Compact Sedan, Fiat Grand Siena, Honda City y este nuevo Volkswagen Voyage, probado por la nacion.
Antes de revisar el rendimiento de éste, cabe mencionar que en 2012, sin entrar en mayores distinciones de precio, tamaño y equipamiento, el tricuerpo pequeño más vendido fue el Chevrolet Classic con 42.024 unidades. Le siguió su hermano de marca Aveo con 16.415 unidades patentadas, y el VW Voyage con 14.951, compartidas entre el modelo anterior y éste, lanzado oficialmente en octubre 2012. Más atrás quedan otros modelos involucrados en la pelea como el Fiat Siena (14.152), los Renault Logan (9230) y Symbol (4298), Honda City (3684), Chevrolet Prisma (3300), Peugeot 207 Compact Sedan (3093) y Ford Fiesta Max (2583).

Carácter de familia
El nuevo Volkswagen Voyage y la versión hatchback (bicuerpo) Gol Trend se lanzaron a fines de 2012 (la anterior gama databa de fines de 2008) con una estética renovada, a tono con sus hermanos mayores como el VW Vento. Precisamente, en materia estética este Voyage guarda una gran similitud con el mencionado Vento tanto en el sector frontal (que sigue el nuevo family feeling de VW con parrilla pequeña, ópticas más rasgadas y, en este caso, luces antiniebla redondas) como los laterales (con vistosas llantas de aleación de 15″) y el remate del baúl; en especial por las nuevas ópticas que continúan desde el guardabarros dentro de la tapa del baúl. En suma, una estética fluida y atractiva.
También hay novedades en el interior con el rediseño de la consola central (teclas, toberas de aire, comandos de climatización), con apliques símil cromado, retoques en el tablero de instrumentos y nuevos tapizados. También es nuevo el equipo de audio, igual al de todos los modelos de VW que se fabrican en el Mercosur. Todo esto le aporta al Voyage una mejor calidad percibida en los materiales y las terminaciones.
Este restyling no afecta la estructura ni la mecánica que el Voyage ofrece desde 2008. Así, la única motorización de la gama sigue siendo el noble motor 1.6 naftero de 101 CV a 5250 rpm y un torque de 14,6 kgm a 2500 vueltas, que Volkswagen utiliza en varios otros modelos (Suran, Fox, Saveiro, etcétera).
Poco puede agregarse de este conjunto motor
transmisión (caja de velocidades manual de 5 marchas, correctamente relacionada) que hace gala de un buen torque a regímenes bajos y medios, lo que beneficia la conducción urbana, que resulta ágil y cómoda. Aunque en alta es más tranquilo, en la ruta también se comporta muy bien en aceleración y elasticidad, bajando algún cambio para los sobrepasos. Con estas características, el consumo (alrededor de 9 l/100 km en ciudad y 8 a 120 km/h) es más que razonable para un tricuerpo familiar como el Voyage.
Las suspensiones tienen un reglaje más bien duro que favorece el buen comportamiento dinámico del auto en ruta, aunque algo sensible a los vientos y los desniveles. Sin embargo no son tan duras como para comprometer el correcto confort de marcha urbano que muestra este Voyage.

Más seguridad
Otras de las virtudes que no han cambiado son la habitabilidad interior, que resulta suficientemente cómoda para cuatro adultos, y la generosa capacidad del baúl de 480 litros. Eso sí, no es nada práctico abrir la tapa de éste sólo con la llave y las bisagras de chapa que disminuyen la altura de carga en su radio de giro.
La posición de manejo es adecuada, confortable y fácil de encontrar por el doble ajuste de la columna de dirección (altura y profundidad) y la regulación del alto de la butaca. El instrumental es claro y de fácil lectura, incluyendo el display de la computadora de viaje.
En el rubro seguridad, el Voyage Highline con el que se realizó la prueba cuenta con ABS en las cuatro ruedas (lo que mejoró sustancialmente la respuesta de los frenos respecto de la versión precedente probada en 2008) y doble airbag frontal. Completan el equipamiento pack eléctrico completo, alarma antirrobo y volante multifunción, entre otros elementos (podrían agregarse sensores de estacionamiento y ganchos Isofix, por ejemplo).
El Volkswagen Voyage resulta un auto práctico y útil para moverse en la ciudad o para viajar en familia. La gama tiene precios desde $ 83.870 (1.6 Comfort MT) hasta $ 105.770 de la versión Highline MT. Con todo esto, más versiones con caja automatizada (I-Motion), el VW Voyage constituye una excelente opción entre los muy requeridos tricuerpos chicos.
LA NACION