China: las fiestas del Año Nuevo Lunar serán austeras

China: las fiestas del Año Nuevo Lunar serán austeras

Por Patti Waldmeir
Nada ofende más a un empleado chino como la cancelación de la fiesta de Año Nuevo Lunar, una extraña oportunidad de comer, tomar y ganar un iPad o iPhone, cortesía del jefe.
Pero el impulso por la austeridad lanzado por el nuevo liderazgo de Xi Jinping en el gigante oriental, combinado con la desaceleración económica, llevó a que en 2013 varios departamentos del gobierno y empresas estatales de todo el país cancelaran o achicaran radicalmente las festividades relacionadas con el inicio del nuevo año lunar, que es el equivalente a las fiestas de Fin de Año que organizan las oficinas de Occidente, pero en general mucho más generosas.
El año nuevo lunar comienza el 10 de febrero, pero la época de los banquetes normalmente está a pleno al menos quince días antes.
Algunas multinacionales cuentan que les está costando mucho encontrar funcionarios del gobierno dispuestos a ser agasajados con vino y cenas. Éstos buscan responder al nuevo pedido de austeridad proveniente de Beijing, que forma parte del impulso anticorrupción lanzado por el liderazgo.
Hasta las compañías privadas están adaptándose a la nueva frugalidad. Algunas optan por ofrecer el festejo en restaurantes de comidas rápidas, lo que llevó a los empleados a manifestar su gran descontento en los sitios de redes sociales. Todos, desde empresas de catering y florerías, hasta proveedores de vinos y relojes, informaron que esta ola de austeridad les hizo caer la facturación.
CIC, el fondo chino de riqueza soberana que administra u$s 500.000 millones, decidió saltear la fiesta de año nuevo en 2013. Un empleado comentó: “Nunca hemos sido extravagantes en nuestros festejos, y realmente tuvimos un muy buen 2012. Puedo entender que quieran ofrecer una fiesta más chica, pero no hacer nada es ir demasiado lejos”.
En PetroChina, el productor de petróleo estatal, explicaron que algunas de sus celebraciones fueron canceladas o reducidas. Sinopec, la refinería de petróleo, comentó que se suprimieron los festejos anuales en la sede central y en algunas de sus subsidiarias. Hace dos años, en Sinopec aseguraban que su fiesta de fin de año, que incluía sketchs cómicos y números de canto y baile protagonizados por miembros del staff, era importante para fomentar la “vida espiritual” de los empleados.
En Shanghai, empleados de las sucursales del Banco Agrícola de China contaron que este año no habrá festejos.
EL CRONISTA