De la Fuente: “En 2012 sobrevivirán aquellos que realmente son eficientes”

De la Fuente: “En 2012 sobrevivirán aquellos que realmente son eficientes”

Por David Cayón
La construcción y la seguridad en el transporte son dos rubros generalmente reducidos al mundo de los hombres. Sin embargo, Graciela de la Fuente es un nombre fuerte en el sector. Presidente de la empresa de logística y seguridad Megatrans –bajo sus sistemas operan 15.000 unidades del sector productivo y de servicios públicos y titular de la constructora Martínez & De la Fuente, una de las empresas que participan de las obras públicas y desde donde discutió con las diferentes administraciones públicas por el pago a proveedores.
Asegura que nunca se sintió discriminada por ser mujer en un mundo de hombres, aunque reconoce que después de tantos años la tratan como un igual, y que en los últimos años las mujeres lograron escalar más allá de la gerencia financiera.
Sus sectores son termómetros de la economía ¿Cómo observa 2012?
Es cierto que nuestros sectores logística y construcción son dos termómetros de la economía. Creo que hoy hay que prestarle mucha atención a lo que suceda en los mercados internacionales, a la crisis en los países centrales. Creo que se vienen recortes en la economía global.
¿Pero esos recortes van a llegar a la Argentina?
Creo que no vamos a salir indemnes del coletazo internacional. Entiendo que pueden bajar el precio de los commodities en el primer semestre, y eso va a afectar directamente la recaudación por lo que el Estado se va a poner a hacer la cuenta fina. No creo que sea un ajuste sangriento, sino que será como sucede en las casas de cada uno, mirar bien los ingresos y empezar a recortar los gastos, empezando por los superfluos. Recomiendo la racionalización.
¿Racionalizar es despedir?
No, no es despedir gente, sino cuidar en lo que cada uno gasta. Será un año para transpirar, donde sobrevivirán los eficientes.
¿El mercado se va a reorganizar?
Se viene un semestre de premios y castigos a la buena y mala gestión. Capacitar va a ser fundamental para estar de uno u otro lado. Nosotros invertimos mucho en capacitación y este es el año –por 2012– para demostrarlo porque vamos a tener que ser muy eficientes para mantener la rentabilidad.
¿Sintió esta merma?
No, en el mercado de carga diciembre es un mes que se mueve mucho, por las fiestas y demás. En el caso de la construcción todavía estamos manteniendo la estructura. Para el caso de la obra pública, el Gobierno ya dijo que la entiende como una inversión y no como un gasto. Hay obras que son esenciales para la vida de la gente, y creo que en ese aspecto se va a cumplir y que el recorte no llegará a la obra pública.
¿Y en el sector de las obras privadas donde el crédito hipotecario es casi nulo?
En el caso de la obra privada es diferente pero, sin embargo, no creo que tengamos una gran caída, pero sí que se va a notar más. De todos modos, en un contexto como el actual, el ladrillo sigue siendo un reservorio de valor.
Pero en logística está la diferencia entre ser eficiente o no…
Sí, pero en épocas de vacas gordas, si vos proponés una baja de 2% en los costos está bien, pero ahora hay que tener una herramienta que genere mayor eficiencia a nuestros clientes. Nuestro producto tiene que ayudar a mantener el orden de la sintonía fina tan en boga en estos tiempos. Si no lo logramos, si no podemos reducir los costos de nuestros clientes de manera significativa, no nos van a contratar. Durante 2012 todo el mundo va a eliminar los costos superfluos, eso es seguro.
¿El riesgo para 2012 es el conflicto laboral y las diferencias entre Cristina Kirchner y Hugo Moyano?
Creo que va a primar la razonabilidad de ambas partes, nadie quiere que esto se desborde. Todos tenemos que pelear por controlar la inflación más allá de las mini lucha de poder. Nadie quiere que esto estalle, más allá de los fuegos artificiales que estamos viviendo, entiendo que la racionalidad estará sobre todo.
Entonces es la inflación…
Sí. Creo que es un tema que todavía es atacable con posibilidades ciertas de ganarle. Un buen paso me parece la quita de los subsidios, a los que ya renuncié.
EL CRONISTA

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