18 Dec Un Pellegrini ante grandes ausencias y pocas presencias de peso
El tradicional Gran Premio Carlos Pellegrini, que se correrá mañana a las 19.40 en el décimo tercer turno de la reunión en el hipódromo de San Isidro, tendrá más ausencias de peso que protagonistas de fuste.
Serán 23 ejemplares los que largarán para cubrir los históricos 2.400 metros del famoso Derby argentino. Y en esta oportunidad hay ausencias que no pueden pasar desapercibidas.
Suggestive Boy, ganador del Jockey Club, fue a parar al campo por una fiebre que no bajaba con nada, mientras que Chuck Berry, ganador de La Polla de Potrillos y segundo de Seggestive Boy en el Jockey Club, tampoco será de la partida porque decidieron darle descanso después del Gran Premio Nacional.
Y la yegua Perfect Shirl, de Canadá e invitada de lujo, a último momento no viajó por problemas en el traslado aereo que la traía a nuestro país.
En definitiva, son tres ausencias de peso, tres figuras, tres ejmplares de nivel que no serán de la partida.
De esta manera, la carrera quedó vacía de figuras de peso. No hay estrellas, tampoco ningún crack. Lo que queda es un lote de buenos caballos nacionales y extranjeros pero sin ningún plus. Son, apenas, buenos caballos. Nada más.
Ausente también Perfect Shirl, el favorito de la carrera puede estar entre estos tres caballos: Vení Vení, Es Richard y Val Champ.
Pero habrá que ver si llueve o no mañana, si el desarrollo de la carrera favorece a uno u a otro, si la estrategia es acertada teniendo en cuenta que corren 23 ejemplares. Un verdadero malón.
Val Champ corrió el Gran Premio Nacional en Palermo y fue distanciado por cerrar a Lange. En la pista había ganado por tres cuerpos sobre 2.500 metros en un registro de 2m 37s 64/100.
Jorge Valdivieso, su entrenador, comentó que cada vez que piensa “en ese final” se quiere “morir”.
“Ahora tenemos una linda revancha. Pero si llueve, lo borro, porque no lo voy a arriesgar”, aclaró.
Si la cancha está pesada disminuyen las chances de Val Champ, a punto tal que su cuidador ya anunció que lo borrará por lo que podría haber un caballo menos en carrera.
Después está Vení Vení, un pupilo de Juan Carlos Etchechoury (h), que viene de ganar en Palermo sobre 2.500 metros ante Bien Toi, a quien le estiró 8 cuerpos de ventaja.
También es cierto que el pasado 11 de noviembre perdió con la yegua Jumbalaya por cuatro cuerpos. Es un ejemplar de 4 años que puede dar un gran salto de calidad y en el stud La Pomme le tienen mucha confianza.
Así como Edwin Talaverano tendrá que correr a Val Champ con manos de hierro, para que no le pase lo que le pasó ante Lange, Gustavo Calvente tendrá que tener mucho tacto en la montura de Vení Vení.
Después surge Es Richard, un hijo de Espaciado con la monta de Juan Cruz Villagra, que es un gran galopador.
Viene de ganarle por 12 cuerpos a Blues For Me en 2m 28s 90/100 para los 2.400 metros. Tiene 14 carreras corridas de las cuales ganó 7. Julio Penna, su cuidador, es optimista: “Hizo todo bien en los ensayos y veremos si repite en la pista de césped”.
Es cierto, también, que la yunta de Video Game y Jumbalaya, del stud La Providencia, merecen ser destacadas.
Altair Domingos eligió correr a Video Game y afirmó: “Anda en el aire”, mientras que Julio César Méndez recibió la monta de Jumbalaya y expresó: “Es una yegua muy fuerte, guapa y de clase”.
Así que pueden ser uno de los grandes lances de la carrera.
Renglón aparte merece Star Runner, un gran caballo argentino que será de la partida pero hace seis meses que no corre por una seria lesión en uno de sus vasos. ¿Podrá meterse en la definición después de tanto tiempo sin correr? Eduardo Romero, su cuidador, es optimista.
Además, hay dos caballos brasileños peligrosos: Anakín y Veraneio; el peruano Jaguar Star llega con muchos elogios; y un chileno, Candidato Unico, que será corrido por Horacio Betansos, también para tener en cuenta.
¿Pueden ganar los extranjeros? Después de las ausencias mencionadas en el comienzo de la nota, la carrera es lo que se dice abierta. Es decir, que no hay ninguna fija, ningún gran favorito y ninún crack que pueda surgir.
Este Gran Premio Carlos Pellegrini tuvo más promoción que realidades. Se insistió mucho con la presencia de la yegua Perfect Shirl y después tuvieron que bajarse de semejante papelón. Casi una verguenza.
Es la carrera que cierra el año del turf argentino, pero le faltó jerarquía de caballos desde que comenzaron a promocionarla. A veces, con la propaganda, no se puede tapar la verdad.
TELAM -TERRA