No está muerto quien pelea

No está muerto quien pelea

Por Guillermo Courau
La noticia no es nueva. Sin embargo, a medida que pasan los meses una tendencia en forma de nube negra de tormenta sobrevuela Washington, y estalla en relámpagos sobre los cuarteles generales de Microsoft. Esta introducción (mal me pese, estilo Harry Potter) grafica bastante bien el presente de la compañía creada por Bill Gates, al menos desde el punto de vista de sus competidores.
Ya lo habían presagiado Steve Jobs y sus acólitos: se viene la era “pos PC”, por lo que una compañía que ha descansado sus bases en su interacción con las computadoras debería, por lo menos, preocuparse.
No es la primera vez que la “alianza rebelde” apunta sus cañones sobre Microsoft. Cada vez que surge un nuevo paradigma con puntos de contacto con la megacorporación, enseguida aparece el coro agorero vaticinando lo peor. Recordemos el caso de Linux, que llegó para comerse crudo al mundo, y terminó confinado a un reducto de fanáticos y de empresas alérgicas al pago de licencias.
Claro que sería una necedad plantear que el actual es un caso parecido. Porque en esta oportunidad no se trata de un soft buscando hacerle sombra al todopoderoso Windows, sino de un cambio en las costumbres de la sociedad, volcada cada vez con mayor vehemencia hacia los dispositivos móviles. Que esto es cierto, y que se va dando cada vez con mayor frecuencia es una realidad que puede constatar cualquiera. Basta que mire a su alrededor en lugares públicos, haga un análisis de las propagandas de diarios y revistas o siga fielmente esta sección para tener argumentación suficiente.
Entonces, ¿de qué se va a disfrazar Microsoft? Lo primero que a uno se le ocurre es mirar hacia el departamento de desarrollo de sistemas operativos para móviles. Pero no hace falta ser experto para darse cuenta de que este área no podría llegar nunca a tener la penetración de su par PC, frente a opciones tan robustas e instaladas como Android o el iOS de Apple.
El panorama se enturbia para todos… menos para los líderes de la empresa. Hace pocos días, el CEO de Microsoft, Steve Ballmer, a quien se le pueden achacar muchas cosas pero nunca falta de optimismo, dijo: “Estuvimos, estamos y estaremos siempre en la era Windows”. Vale señalar que la declaración fue durante una reunión general de accionistas, por lo cual era de esperar que Ballmer optara por el guiño de confianza y la palmada en el hombro.
Y no fue ésta la única referencia al futuro de la compañía, porque enseguida Steve continuó recordando a los miles de internautas que lo escuchaban en directo, que “Uno de los aspectos más notables de Windows a través de los años es que ha sabido cómo adaptarse a los cambios y las necesidades del mercado”. Y bastante razón tiene, aun cuando no hubo cambios tan radicales como los que depara el futuro.

ENTRE WINDOWS 8 Y EL ASESINO DE FACEBOOK
Las palabras de Steve Ballmer a los accionistas tienen su raíz en el híper promocionado pero todavía misterioso Windows 8. La nave insignia de Microsoft que se prepara para zarpar el año que viene. Con su soporte para pantallas touchscreen y su compatibilidad con dispositivos móviles, la compañía busca situarse justo en el punto medio que hay entre las computadoras personales, y los celulares y tablets. En palabras del CEO: “Con Windows 8 se verán formatos muy novedosos, desde las tablets, pequeñas o grandes, hasta las pantallas más pequeñas o las más grandes, algunas del tamaño de una habitación. Estamos en un momento en que la gama de dispositivos inteligentes sigue creciendo, eso es una verdadera oportunidad para Microsoft”. Confianza ciega que le dicen.
Y no es para menos, si se tiene en cuenta que W8 trabajará estrechamente ligado al buscador Bing, para poder darle el espaldarazo que éste necesita. ¡Y cómo lo necesita! De acuerdo a un informe de la CNN fechado en setiembre, Bing lleva perdidos más de cinco mil millones de dólares desde su lanzamiento en 2009. Y así y todo no se puede hablar de fracaso, ya que aumentó su cuota de pentración de mercado aniquilando a Yahoo!
Pero Bing no está solo, trae de la mano a Socl, la nueva apuesta de Microsoft en el sector de las redes sociales. El proyecto, del que en los últimos días se ha filtrado bastante información, cuenta con un diseño de columnas estilo Facebook, pero en lugar del conocido “¿Qué estás pensando?” se puede ver un campo de búsqueda. Luego, el usuario tendrá la posibilidad de etiquetar su búsqueda, para que ésta quede indexada y a disposición de otros usuarios. Esto permite resultados más precisos, ya que no sólo interfiere un motor de búsqueda sino también el criterio del internauta.
La característica mencionada es la que realmente puede hacer diferencia con redes ya existentes como Facebook o Google+, igualmente Socl cuenta con las mismas prestaciones de sus competidoras, aunque en estilo se parece más al proyecto de Mark Zuckerberg, para alegría de aquéllos que no terminan de encontrarle la vuelta a GPlus.
Aunque con la corona medio torcida, Microsoft todavía tiene mucha cuerda por delante. Lo demuestran esta política de cambios, y la expectativa con la que es recibido cada nuevo anuncio. Puede ser que en estos momentos se lo vea agachado, pero muy posiblemente sea porque está tomando impulso para un nuevo salto.
REVISTA DEBATE