El Pellegrini más internacional de la historia

El Pellegrini más internacional de la historia

Se conocieron los ratificados para la gran jornada del Carlos Pelle-grini del sábado en San Isidro y ya comenzaron a latir los corazones. No es para menos, esta edición 2011 de la carrera más importante del turf ar­gentino reúne todos los condimentos para ser una verdadera sensación. Habrá 13 extranjeros en cancha, re­partidos en los cuatro grandes pre­mios. Y además de los provenientes de Brasil, Perú y Uruguay -visitas fre­cuentes para estas grandes fechas-, se suma la de la americana Perfect Shirl, nada menos que la ganado­ra de la Breeders’ Cup Filly & Mare en Churchill Downs, y que llega con su jockey habitual, John Velázquez, y para conquistar la gloria en una de las carreras más importantes de Sudamérica.
Pero también se verá en acción a La Laguna Azul, figura indiscutida de La Copa de Plata; a Curioso Slam, dominador indiscutido en la milla del Joaquín S. De Anchorne. Y se aguarda un mano a mano desde las gateras al disco del Félix de Alzaga Unzué entre Doña Ley y Charles King, los que defi­nieron el Gran Premio Suipacha.
En síntesis, la agenda marca en rojo el sábado 17, y con un único y claro destino: el Hipódromo de San Isidro, a donde los corazones latirán más fuerte que nunca, y al ritmo de los va­sos de los mejores caballos del conti­nente repicando sobre el césped.

En busca del honor herido
El año pasado y luego de un agua­cero el brasileño Xin Xu Lin le dio un golpe de nockaut al turf argentino. Pero este año podemos recuperar el honor herido en aquella oportunidad. Hay algo en el aire que presagia que podemos cambiar la historia. Porque el dique de contención que forma un grupo de ejemplares argentinos (los mejores del turf local) parece estar preparado para neutralizar la “avan­zada” extranjera.
Ahí estarán para defendernos, por ejemplo, Aristocity y Expressive Halo, el segundo y tercero del brasileño Mr. Nedawi en el Gran Premio Dardo Rocha (Gl). Ambos, para demostrar que pueden alcanzar la gloria en la pista de césped.
No estarán solos ni mucho menos. Vuelve un gladiador como Star Run­ner, dando 8 meses de ventaja por la falta de competencia, es cierto; pero con el aval de una seguidilla triunfal en los grandes premios de Honor, República Argentina y Classic de las Estrellas. Un ejemplar notable que parece capaz de superar cualquier escollo.
Jumbalaya se salió del camino de las hembras para ganar la Copa de Oro (G1), para hacer historia el sába­do en el Carlos Pellegrini: ser una de las pocas yeguas -la última fue Potri Pe—que inscriba su nombre en una carrera mayormente “machista”. Y la de La Providencia parece tener cali­dad para conseguirlo.
De la misma “escuadra” de la Puré Prize es Video Game, un potrillo con arrimes en el Jockey Club y el Derby al que le tienen una fe enorme. En es­pecial Altair Domingos, el jockey de la casa, quien eligió correr al Orpen antes que a la yegua…
Ganador en forma consecutiva de los clásicos Progreso, General Pueyrredón y Cocles, el tordillo Es Richard busca su consagración defi­nitiva con ese galope tan particular que tiene.
El eterno Calidoscopio, Val Champ, Vení Vení y El Serióte, son los otros argentinos que se ponen la camiseta para tratar de que esta vez el triunfo quede en casa.

Perfect Shirl y “Johnny V”, un lujo sobre el césped
Los extranjeros que participarán del Pellegrini son 5 -sin contar a Flying Floo y a Vení Vení, nacidos en Uruguay y en Estados Unidos, res­pectivamente, pero entrenados en San Isidro–, pero hay uno que se lle­vará todas las miradas. En realidad serán dos: Perfect Shirl y su jinete, el portorriqueño John Velázquez, hé­roes del Breeders’ Cup Filly & Mare en la tarde de Churchill Downs. La visita de yegua y jinete en verdad son un lujo para el Hipódromo de San Isidro, y no vienen de paseo precisamente, sino con un claro ob­jetivo: por toda la gloria. ¿Por qué si no, como se entiende que después de ganar más de un millón de dólares en premio se lancen a la aventura de viajar a correr a la Argentina, y por una bolsa de casi 200.000 dólares? La realidad indica que la yegua de propietarios australianos puede ga­nar el Pellegrini, y por eso los loca­les deberán estar atentos a su atro­pellada.
REVISTA PALERMO