14 Oct Saber controlar el pulso ayuda a prevenir el infarto cerebral
Controlarse el pulso periódicamente, algo que cualquier persona puede hacer sin mucha más tecnología que un reloj, es una medida sencilla pero sumamente útil para prevenir el accidente cerebrovascular (ACV).
Detectar la presencia de un ritmo irregular en el pulso es el primer paso para el diagnóstico de la más común de las arritmias -la fibrilación auricular-, que es la causa del 20% de los ACV en los que se obstruye una arteria cerebral.
“Aunque puede dar síntomas como palpitaciones, cansancio o falta de aire, en muchos casos la fibrilación auricular suele pasar desapercibida. Se estima que en América latina hay 3 millones de personas que padecen esta forma de arritmia, pero sólo la mitad lo sabe. Y en la Argentina, aunque no hay estadísticas al respecto, sucede lo mismo”, dijo a La Nacion el doctor Ricardo Iglesias, presidente de la Fundación Cardiológica Argentina.
La amenaza para la salud que supone la fibrilación auricular, además, está en aumento. “A más edad, más riesgo de padecerla; por encima de los 80 años de edad, la padece el 20%de las personas”, agregó Iglesias. “Es una epidemia que se viene, porque las personas viven cada vez más años”, dijo por su parte el doctor Sebastián Ameriso, jefe de Neurología Vascular de Fleni.
En 2004, en América latina los accidentes cerebrovasculares causaron más de 250.000 muertes, pero para 2024 ese número podría triplicarse como resultado del envejecimiento de la población, afirma el informe ¿ Cómo reducir los accidentes cerebrovasculares en Latinoamé rica, presentado en el marco de la III Conferencia Latinoamericana de la Sociedad Internacional de Farmacoeconomía.
Por eso, el citado informe, suscripto por numerosas sociedades científicas -entre las que se cuentan la Sociedad Neurológica Argentina y la Asociación Médica Argentina-, recomienda mejorar la detección de la fibrilación auricular, un factor de riesgo de ACV mucho menos conocido que la hipertensión, el tabaquismo o la diabetes.
“Todo el mundo sabe que el cigarrillo y el colesterol alto son malos, aun cuando no se cuide, pero no existe conocimiento en la población sobre el riesgo que representan las arritmias”, opinó Iglesias.
Guerra contra el coágulo
La fibrilación auricular no sólo aumenta cinco veces el riesgo de sufrir un ACV, sino que además es un factor de peor pronóstico en comparación con accidentes cerebrovasculares producidos por otra causa. “Los ACV causados por la fibrilación auricular suelen ser más graves y causar daño neurológico más severo”, comentó el neurocirujano Pedro Lylyk, director del Centro Integral de ACV de la Clínica La Sagrada Familia. “Esto se debe a que usualmente son causados por coágulos grandes, que obstruyen arterias como la carótida o la cerebral media”, explicó.
¿Cómo se relaciona el ritmo caótico de la fibrilación auricular con los coágulos que causan un ACV? “Al contraerse el corazón en forma irregular, se produce el estancamiento de la sangre en el interior de la aurícula y se coagula -explicó Ameriso-. Ese coágulo queda pegado a la pared interna de la aurícula, pero cualquier contracción puede despegar el coágulo, que va por las arterias al cerebro, causando un embolismo.”
Hoy, el diagnóstico de la fibrilación auricular -que se sospecha a partir de la medición del pulso y que luego debe confirmarse a través de un electrocardiograma- apunta a combatir el coágulo. “Independientemente del tratamiento de la arritmia, que puede realizarse con medicamentos o mediante la ablación del foco eléctrico, hoy se indica el uso de anticoagulantes para hacer que el coágulo se degrade y prevenir así un ACV”, comentó Iglesias.
LA NACION