17 Sep Lingote querido
Por Nicolás Martín Ferro, columnista invitado.*
No sé si habrá algún adjetivo con el cual pueda describir a Lingote de Oro. Todo lo que diga resultará poco.
Desde el primer minuto que el caballo perteneció al Keyser Soze fue especial, con su gran pedigree, su increíble mansedumbre y su presencia sorprendía a todos.
El día que debutó, allá por marzo del 2008, nos demostró que sería un caballo serio. Corriendo en una distancia en la que no se sentía cómodo puso calidad para llegar segundo; luego de una fallida actuación en la cual fue muy golpeado en la suelta, Lingote conseguiría su primera cómoda victoria en la arena palermitana. Lo mejor estaba por venir.
Nos hizo participar de todo el proceso selectivo en el año 2008. Fue segundo muy cerca en las Estrellas Juvenile, en las 2000 Guineas y en el Jockey Club; cuarto en el Nacional y sexto enla Polla de Potrillos en la que la cancha no lo ayudó nada. El Pellegrini de ese mismo año se le escapó por muy poco, perdió a solo un cuerpo del ganador recibiendo un fuerte golpe en la entrada a la recta.
Era tiempo de unas merecidas vacaciones en el campo y, al principio, la vuelta no fue fácil. Caballo grande, manso, de muy buen comer, le costó un par de carreras volver a su estado atlético ideal hasta que en agosto se reencontró con la victoria para ganar 7 de sus siguientes 8 carreras.
No solo ganaba, te demolía. Llegaba al palo de los 1.000 metros y empezaba a sacar las manos como pocos caballos lo hacen. No importaba quién estuviera adelante, él se tendía y llegaba siempre primero al disco. Así fue cómo logró enhebrar el Gran Premio de Honor, el República Argentina y el Gran Premio Estrellas Classic, aparte de los clásicos Comparación (dos veces) y Haras Argentinos. En la arena de Palermo no había caballo que le hiciera sombra. Si tenía que ganar fácil, lo hacía, y si tenía que luchar, ahí estaba él para entregarse entero.
Todas esas demostraciones fueron las que lo llevaron a quedarse con los premios Carlos Pellegrini a “Caballo del año”, “Mejor Caballo Adulto” y “Mejor Fondista”, aparte de ganar cómodamente el Campeonato Palermo de Oro.
Lingote, es tiempo de verte en acción otra vez. Luego de dos carreras en las que no explotaste todo tu potencial, mañana todos esperamos que vuelvas a ser el Lingote de siempre: el que llenaba el hipódromo, el que la gente aplaudía al salir a la cancha, el que apabullaba rivales.
Realmente no sé si podemos pedirte algo más querido Lingote, ya nos diste demasiado. Tenemos la suerte de disfrutar un pingo con todas las letras, un caballo diferente, esos que se buscan toda una vida y solo salen de vez en cuando.
*Manager Stud Keyser Soze