09 Jun El verdugo llegó desde el Nordeste
Por Juan Raúl Moncada
Con un escenario colmado de público como en las grandes tardes de la hípica rosarina, el Independencia vivió el paso de la impuesta Copa Unión de Trabajadores del Turf y Afines, donde la sorpresa se dio por el lado del zaino Nordeste, el representante de las prestigiosas sedas del stud L y R logró tapar sobre la sentencia al gran favorito Call Wells que con Carlos Figgini había dominado en plena recta como para consagrarse tal cual esperaba la cátedra.
En el salto fue Daniel Nuñez el que asumió el comando por dentro con El Datero, mientras Bixal y Great Britain se acomodaban cerca con el resto en un lote muy agrupado, mientras por fuera Hai Sola y Godzilla se sumaban buscando la punta.
Ingresaron a la recta opuesta y César Cuellar decidió pasar adelante con Hai Sola, mientras Godzilla corría segundo, delante de El Datero y Mr. Minot, con el resto bastante cerca esperando su oportunidad; en la mitad del opuesto Hai Sola mandaba pero muy controlada por Godzilla y El Datero que se mantenía por dentro apareado al cordobesa Mr. Minot, a la vez que Carlos Figgini ganaba terreno por el centro con el gran favorito Call Wells.
Se arriman
Dejaron atrás el opuesto y se metieron en el codo donde la mayoría de los jinetes que venían en el medio del lote buscaron arrimarse con los de adelante que a esa altura tenían un buen ritmo con parciales interesantes, en el palo de los 700 y por fuera Call Wells con Figgini emparejó a la puntera, mientras El Datero buscaba meterse por dentro, a esta altura Nordeste corría a la par de Free Coffee en los últimos puestos dejando en la cola a Bixal.
Pisaron la recta y como Call Wells fue más allá de media cancha, posibilitó que Hai Sola recuperara terreno al igual que El Datero, por lo que ambos pasaron a dominar, accionando muy cerca Mr. Minot con Gustavo Calvente que trataba de prenderse.
Se define
A 200 metros del disco el empuje del favorito se hizo sentir y El Datero que se había escapado de la valiente Hai Sola no pudo con Call Wells que a 150 metros del disco ya había cortado luz encaminandose a lo que parecía una clara victoria.
Bajaron algunos aplausos cuando muy abierto y pasando rivales como a postes entro en escena Nordeste con Alejandro González; a 100 metros del disco estaba lejos y la misión parecía imposible —“me alegré porque dije: entra segundo”, nos confesaba luego Nelson Graells, su propietario, a esa altura de la carrera—, pero con una furia tremenda el Petit Poucet descontó y siguió descontando ante un rival que no se entregaba, asimismo sobre el filo del disco la atropellada dio sus frutos y sirvió para exigir el trabajo del photochard.
Ambos caballos cruzaron en una línea y para completar el panorama las dos fustas se vieron ganadores; tras algunos minutos se confirmó el hocico para Nordeste que sin dudas ganó la carrera de su vida y muy bien merecido lo tiene con una tremenda labor de Alejandro González, esperando siempre y haciendo correr cuando debía, mientras que el joven Hernán Fuentes puso como se debe a un caballo que ganó una carrera que en la previa parecía imposible.
EL LITORAL