La nueva ciudad global

La nueva ciudad global

Por Candace Jackson
El multimillonario ruso Yuri Milner acaba de desembolsar US$100 millones por una mansión en Silicon Valley, California, el precio más alto pagado hasta la fecha por una residencia unifamiliar en Estados Unidos. En enero, el ucraniano Rinat Akhmetov cerró la compra de dos apartamento en Londres por US$225,5 millones. Una princesa del Golfo Pérsico desembolsó US$97 millones el año pasado por una mansión con un patio interno, un jardín y una capilla privada en la rive gauche de París.
Algunos de los principales compradores de bienes raíces en muchas ciudades provienen del otro lado del mundo. Un reciente informe encontró que 65% de los compradores en el mercado de residencias de lujo londinense son foráneos. La Asociación de Agentes Inmobiliarios de Miami señala que casi 60% de las ventas del año pasado en la ciudad correspondieron a extranjeros. Más de la mitad de los compradores en un condominio de lujo en la Quinta Avenida de Manhattan son extranjeros.
La composición de los compradores de estas propiedades está cambiando, lo que refleja la transformación de la economía mundial. Los compradores de Rusia han regresado después de un letargo y está creciendo el número de los provenientes de Brasil, cuya economía creció 7,5% el año pasado. Los australianos están comprando casas en Aspen, el exclusivo centro de esquí de Colorado. Los venezolanos están adquiriendo condominios frente a la playa a precios muy rebajados en Tampa.
Uno de los factores más importantes que ha incidido en esta transformación es el surgimiento de los compradores chinos. A medida que se disparan los costos de los bienes raíces en el país, generando temores de que se esté gestando una posible burbuja inmobiliaria, los compradores con los bolsillos llenos optan por mercados que parecen baratos en comparación.
Steve High, corredor de propiedades del condado de Orange, en California, señala que los chinos representan la mitad de los clientes que visitaron las viviendas que mostró en la cotizada zona de Newport Coast, frente al puñado de hace apenas tres años. Agrega que numerosos compradores chinos están interesados en viviendas de más de 3.000 metros cuadrados para ir de vacaciones o para que se alojen sus hijos cuando vayan a la universidad. “Tenemos estas casas gigantescas y están vacías”, relata. “O hay un muchacho de 18 años que vive solo”.
Muchos compradores extranjeros en Estados Unidos están aprovechando el debilitamiento del dólar. Pascale Saliou pagó US$600.000 por un estudio, un departamento de un ambiente, en Manhattan. Saliou había estado visitando la ciudad durante 20 años y tras la mejora en el tipo de cambio decidió que era hora de comprar. “Nunca pensamos que podríamos hacer esto”, explica. Los canadienses son el grupo mayoritario de compradores extranjeros en EE.UU. y representan alrededor de 23%.
Cuando salen en busca de propiedades, los compradores globales se dirigen a zonas muy específicas. En Londres, por ejemplo, los clientes rusos y de Medio Oriente prefieren Knightsbridge, donde cuadras de elegantes apartamentos ofrecen comodidades de primer nivel. En Nueva York, los edificios más nuevos con diseño contemporáneo son los que atraen a los extranjeros. A continuación, un vistazo a algunos de los principales mercados.

Nueva York
El mes pasado, el compositor ruso Igor Krutoy y su esposa Olga adquirieron una propiedad en el piso 12 del legendario hotel Plaza por US$48 millones, uno de los precios más altos pagados por un condominio en la ciudad.
Jonathan Miller, presidente ejecutivo de la firma de tasaciones y consultoría Miller Samuel, dice que los compradores extranjeros realizan entre 15% y 20% de todas las compras en Manhattan. Tienden a optar por condominios recién construidos o totalmente renovados que cuestan varios millones de dólares.
Manhattan es desde hace mucho tiempo uno de los mercados predilectos de los compradores internacionales, pero su composición ha variado. Los inversionistas irlandeses, que estaban comprando durante el auge inmobiliario, desaparecieron y han sido reemplazados por compradores de China y Brasil.

París
El mercado inmobiliario parisino está en medio de un boom impulsado en parte por los altos precios que los extranjeros están dispuestos a pagar. En el “triángulo dorado”, la zona cerca de los Campos Elíseos, el precio de los apartamentos subió 38% en los últimos 12 meses, según la cámara de notarios. Los compradores tienden a provenir de Rusia y Medio Oriente.
Charles-Marie Jottras, presidente de la red de agencias de bienes raíces Daniel Féau, cuenta que acaba de cerrar la venta de un lujoso apartamento en la Avenida Jorge V a un comprador chino por 10 millones de euros, US$14,2 millones.
La presencia brasileña también está creciendo en el séptimo y octavo arrondisement, como se conoce a las divisiones administrativas parisinas.
La mayor venta de Jottras ocurrió el año pasado, cuando una mansión con patio interior, jardín y capilla privada pasó a manos de una princesa del Golfo Pérsico por cerca de 68 millones de euros, unos US$97 millones.

Hong Kong
El auge inmobiliario de China se trasladó a Hong Kong, donde los precios de las propiedades han superado máximos históricos y están entre los más altos del mundo. De acuerdo con la agencia de propiedades Savills, las casas en Hong Kong son 52% más caras que en Londres y 111% más costosas que en Nueva York.
En abril de 2001, un condominio en el número 39 de Conduit Road se vendió por US$46,4 millones. El diario local Ming Pao informó que fue comprado por Shi Yuzhu, el fundador de la compañía de apuestas en línea Giant Interactive. La revista Forbes calculó su fortuna en US$1.600 millones.
Mientras tanto, una mansión en el vecindario de Repulse Bay se vendió recientemente por US$84,9 millones. Ming Pao inmformó que el comprador fue Gao Yanming, presidente de la empresa naviera Hosco Group.

Londres
De acuerdo con Liam Bailey, jefe de investigación del agente inmobiliario Knight Frank, 64% de los compradores de residencias en el centro de Londres que cuestan más de 5 millones de libras esterlinas (US$8,1 millones), son extranjeros. Es “el porcentaje más alto de una ciudad grande del mundo, sin lugar a dudas”, dice.
Representantes de 61 nacionalidades adquirieron viviendas en Londres el año pasado, un alza frente a las 46 de 2009, según las cifras de Knight Frank. El mayor crecimiento se dio entre los compradores chinos, indios y de Medio Oriente.
Para muchos, la estabilidad política y económica del Reino Unido convierte a Londres en un refugio seguro para el patrimonio. La caída de la libra frente al dólar, que bordea 20% desde 2008, aumenta el atractivo de la capital británica.

Miami
Casi 60% de las ventas del año pasado en el área del Gran Miami correspondieron a compradores foráneos, según la Asociación de Agentes Inmobiliarios. En el caso de construcciones nuevas, la cifra salta a 90%, informa la entidad.
Muchos compradores son brasileños, que se han beneficiado del auge de una economía que se expandió 7,5% el año pasado. El real se ha apreciado alrededor de 40% frente al dólar en los últimos dos años.
La constructora Fortune International se concentró en conquistar a los brasileños para vender Jade Ocean, un edificio de 50 pisos con piscinas, un cine privado y un salón de juegos infantil decorado con muebles de Philippe Starck. Los apartamentos tipo loft cuestan entre US$3,5 millones y US$10 millones. Cerca de 85% de los compradores son extranjeros.
El Icon Brickell, un edificio de 50 pisos en el centro de Miami, ha atraído a gran cantidad de británicos y brasileños, cuenta Oliver Ruiz, un agente de Fortune International Realty.
Los venezolanos también son una presencia creciente, al igual que los compradores de Italia, España y Suiza. Phillipp Yaffa, presidente de la oficina en Miami de Engel & Völkers, dijo que un suizo adquirió la semana pasada una casa frente al mar en US$9,3 millones.
Henrik Willingaard-Madsen, el dueño de una fábrica de zapatos de Dinamarca, compró dos apartamentos ubicados en el Icon Brickell en julio pasado. Dice que obtuvo un descuento de 30% y pagó US$520.000 por uno de dos dormitorios y US$840.000 para uno de tres. Icon “tiene tantas unidades, que estaban como desesperados en ese momento”, observa. “El precio fue muy bajo comparado con la calidad”, agregó.
Edgardo Defortuna, principal urbanizador de Fortune, dijo que su compañía se hizo cargo del marketing del complejo en junio pasado y que el edificio “se ha ido llenando significativamente desde entonces”. Hasta ahora, se han vendido 80% de las unidades.
LA NACION